El Banco Central aumentó su tasa de interés a 7,75% anual. Análisis y perspectivas para los meses siguientes.
Por la economista Sandra Pérez Ramos, de la consultora Deloitte.
(Emitido a las 7:51 horas)
EMILIANO COTELO (EC):
El viernes pasado el Banco Central decidió aumentar la tasa de referencia de la política monetaria en 50 puntos básicos, situándola en 7,75% anual.
Esta decisión se tomó un día después de que se conociera el dato de inflación de setiembre, que marcó una suba de los precios minoristas de 0,6%. Esta es la primera vez en el año que el Banco Central decide modificar la tasa call de referencia y es una decisión que se tomó en un momento de gran incertidumbre. Para entender cuáles fueron las razones que llevaron al Banco Central a tomar esta medida, les proponemos dedicar nuestro espacio de análisis económico a este tema. ¿Qué es lo que está ocurriendo con la inflación? ¿Por qué el Banco Central decidió subir ahora la tasa de referencia? ¿Qué podemos esperar para los próximos meses? Enseguida el diálogo será con la economista Sandra Pérez Ramos, de la consultora Deloitte.
Empecemos hablando de la inflación. El jueves pasado se conoció que la inflación de setiembre fue de 0,6%. ¿Cómo vieron ustedes esa cifra? Por lo pronto, fue un poco más alta que la que esperaban los analistas.
SANDRA PÉREZ RAMOS (SPR):
Sí, es cierto. La mediana de la encuesta de expectativas del Banco Central marcaba una inflación para setiembre de 0,46% y nosotros, en particular, estábamos esperando una inflación de 0,5%.
Como tú señalabas recién, el IPC subió finalmente 0,6% en setiembre y con este dato la inflación de los últimos doce meses tuvo un repunte de dos décimas porcentuales respecto a agosto y ahora se ubica en 7,46%.
EC: ¿Y cuáles fueron los principales determinantes de la inflación del mes pasado, Sandra?
SPR: En setiembre los precios administrados prácticamente se mantuvieron estables y los precios de las frutas y verduras tuvieron una incidencia marginal. Entonces, la gran explicación de la inflación está en los precios transables -los que se comercializan con el exterior- y no transables los que dependen del mercado interno-, que componen la inflación subyacente. Según nuestros cálculos, la inflación subyacente fue de 0,9% el mes pasado, un aumento relativamente importante.
Sin embargo, a pesar de eso, el dato de setiembre igual puede catalogarse de relativamente bueno, en el sentido de que marcó un descenso de la inflación subyacente mensual, que había superado el 1% en los dos meses anteriores.
EC: ¿Esto significa que ahora hay menos presiones inflacionarias?
SPR: No. La inflación subyacente de setiembre fue un poco menor que la de julio y agosto, pero en términos anuales, todavía sigue situada por encima del 10%; un registro alto que se viene dando desde hace varios meses. Este resultado sigue pautando la presencia de fuertes presiones inflacionarias que se derivan, por un lado, del dinamismo de la demanda interna y, por otro, del contexto externo.
EC: En setiembre el tipo de cambio subió mucho pero al mismo tiempo los precios de varios commodities bajaron. ¿Cómo incidieron esos dos factores sobre la inflación?
SPR: Esos son dos elementos que tienen efectos opuestos. Los precios de los commodities están bajando en el mundo y eso presiona a la baja los precios locales. Pero como al mismo tiempo el tipo de cambio está subiendo, el efecto neto depende de cuáles sean las magnitudes de las variaciones. Concretamente, el mes pasado los precios de los alimentos transables que tienen más ponderación en la canasta se desaceleraron mucho en relación a los dos meses anteriores, por ejemplo la carne, los panes y cereales.
Y en cuanto a otros artículos de la canasta que también están relacionados con el dólar, como los electrodomésticos, el mes pasado mostraron subas, a diferencia de lo que venía ocurriendo en los meses anteriores.
EC: Ahora que delineamos el escenario actual, con presiones inflacionarias altas y con un tipo de cambio en alza, pasemos a hablar de la decisión que tomó el Banco Central el viernes. ¿Podrías hacer un breve resumen de las principales medidas? Porque no sólo se decidió subir la tasa de la política monetaria, ¿no?
SPR: Sí. Además de la suba de la tasa de referencia, que fue la principal decisión del viernes, el Banco Central tomó otras medidas. Se elevó de 10% al 20% la tasa de facilidad marginal del crédito, que es la tasa que pagan los bancos cuando piden préstamos al Banco Central y se dispuso que sólo se podrá usar hasta tres veces en el mes. Además se suspendió otra facilidad de crédito que tenían los bancos a un día de plazo. Todas estas medidas apuntaron a desalentar la especulación financiera, en un momento de gran incertidumbre en el mercado.
Y por supuesto la principal decisión del viernes fue subir en 50 puntos básicos la tasa de referencia una tasa objetivo que se usa como referencia para la tasa call interbancaria- de la política monetaria, a 7,75% anual, a la que se le agregó un rango de tolerancia de 25 puntos básicos en más o en menos.
EC: ¿Cuáles fueron los argumentos que se manejaron para explicar esa suba?
SPR: En términos generales se aludió a que la inflación sigue siendo alta. Hay que recordar que en todo el año nunca se logró que la inflación estuviera dentro del rango meta, de entre 3% y 7% anual. Además se comentó que la economía está creciendo mucho y por eso se espera que por algún tiempo se mantengan las presiones inflacionarias domésticas. En este sentido esta suba de la tasa puede ayudar a contener esas presiones, al desacelerar un poco la economía.
Y también se habló del tipo de cambio y de la estabilidad de la moneda. Un aumento de la tasa de interés puede ayudar a moderar la suba del dólar. Recordemos que ese era uno de los principales argumentos por los cuales el Banco Central no había subido la tasa call interbancaria durante todo el año; para evitar que el tipo de cambio cayera más. Ahora el dólar está subiendo y esa restricción ya no opera. De hecho, una suba más moderada del dólar puede contribuir a reducir la inflación.
EC: Lo que puede llamar la atención es el momento en que se toma esta decisión ¿Cómo interpretan ustedes que el Banco Central haya decidido ahora subir la tasa, cuando hay una gran incertidumbre en los mercados?
SPR: Varias veces hemos señalado que para asegurar una convergencia de la inflación a las metas establecidas, era necesario que la política monetaria se volviera más contractiva, porque mes a mes las cifras oficiales marcaban que las presiones inflacionarias no estaban cediendo. En cambio, en este momento el panorama no era tan claro por el contexto de incertidumbre que estamos viviendo. De todas formas, un elemento que debe haber jugado un rol decisivo es que el tipo de cambio ahora está subiendo y eso sí es algo distinto de lo que ocurría en los meses anteriores.
Además, las tasas en moneda nacional tuvieron un aumento muy fuerte en las últimas semanas, fundamentalmente en los tramos más cortos de la curva y eso era un indicio de que se podía avecinar una suba de la tasa de referencia. La semana pasada las tasas en pesos a 30 días se ubicaban en torno al 10% anual, lo que marca que el mercado estaba cambiando sus expectativas y por eso pedían tasas en pesos más altas y el Banco Central las estaba convalidando. Desde ese punto de vista, la suba de la tasa de referencia no hizo más que alinearse con lo que ya se había observado en el resto de la curva de rendimientos.
EC: Para terminar, a partir de este cambio de tasa, ¿qué esperan ustedes que suceda en los próximos meses con la inflación y con la política monetaria?
SPR: La gran incertidumbre que hay en los mercados en este momento hace bastante difícil realizar proyecciones. De todos modos, en términos generales es muy probable que la inflación baje un poco, digamos de aquí a fin de 2009, porque habrá menos presiones del exterior. En cambio, es probable que las presiones domésticas se mantengan por algún tiempo más, apoyadas en nuevas subas de los salarios reales.
En ese marco, todavía es muy pronto para estimar lo que pueda ocurrir con la política monetaria. Tendremos que ver cómo continúa evolucionando la inflación en los próximos meses para ver si este ajuste de la tasa de referencia es suficiente o no como para encauzar la inflación hacia las metas que ya están establecidas.