(emitido a las 8.50 hs.)

JOSÉ IRAZÁBAL:
"Conaprole cierra sus plantas por la baja remisión de leche", dice hoy Últimas Noticias. "La caída abrupta de la demanda desde el exterior, una reducción de los precios y una sequía que redujo la remisión de leche a planta obligaron a la empresa a diseñar un plan de cierres rotativos de algunas de sus plantas y habrá trabajadores de Conaprole que irán a seguro de paro".

"Dos crisis, cada una independiente de la otra, golpean a Conaprole, que fue el segundo mayor exportador el año pasado, con la misma intensidad y al mismo tiempo. A la reducción de demanda mundial de productos lácteos y la baja en los precios se suma también ahora el efecto climático. La sequía ha ocasionado una sensible baja en la remisión de leche a planta y si no llueve abundantemente las proyecciones son peores hacia otoño, por lo tanto es necesario actuar y tomar decisiones".


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JI – Para hablar de la actual situación de Conaprole y también de esas posibles decisiones que haya que tomar más adelante si se sigue agravando esta situación, vamos a hablar esta mañana con el directivo Wilson Cabrera.

¿Concretamente cómo podría resumirnos la situación de Conaprole al día de hoy?

WILSON CABRERA:
Yo diría que la situación de Conaprole -estrictamente de la empresa Conaprole- hoy es totalmente normal. Se está recibiendo prácticamente la [misma cantidad de] leche que se recibía el año pasado, porque a pesar de la importante baja de remisión que ha habido, como teníamos un pico este año hemos tenido una producción bastante más importante desde la primavera. En la situación que estamos hoy, a pesar de haber una merma importante en la remisión de los productores, estamos prácticamente recibiendo la leche que se recibe normalmente en los meses de enero.

Pero estamos mirando hacia delante porque vemos que los productores están sufriendo una crisis de sequía muy importante en este momento. La ración que los productores pueden dar a su ganado de acuerdo a la relación insumo-producto que hoy tienen -como se sabe los productores tienen un precio de leche prácticamente a la mitad de lo que tenían en el invierno pasado- sin ninguna duda que va a redundar en una menor producción para el otoño porque esto se ha agravado por esta crisis de la seca.

Entonces, sumadas las dos cosas, vemos una proyección hacia delante con muy poca leche para el otoño. Se está haciendo lo que se hace siempre: evaluando la cantidad de leche que va a recibir la cooperativa y viendo de qué forma la vamos a recibir y transformarla en productos que valoricen más la leche para poder pagarle el mejor precio al productor, eso es lo que nosotros estamos haciendo y es lo que hacemos normalmente.

JI – Ordenemos un poco la información. Se habla básicamente de dos efectos que estarían golpeando a Conaprole, los efectos de dos crisis paralelas: una, la que tiene que ver con el impacto de la crisis a nivel internacional y con la caída en la demanda de productos lácteos y también en la baja de los precios. Desde ese punto de vista ¿qué es lo que nos puede comentar de estos últimos meses?

WC – Que ha habido una involución de los precios internacionales muy importante. De la misma forma que los productores reciben menos precio por el litro de leche la cooperativa también está recibiendo mucho menores precios en los productos de exportación sobre todo en la leche en polvo que es el mayor volumen...

JI – ...¿desde cuándo se registra esa caída y de cuánto es?

WC – Esta caída viene insinuándose desde mayo del año pasado y la baja del precio de la leche se concretó prácticamente -como Conaprole en ese momento tenía todavía vendido para adelante- a partir del mes de setiembre. Ha seguido bajando mensualmente hasta que en este último mes de diciembre recibimos una baja de prácticamente el 3%, 2.9%, porque justamente los productos que se venden al mercado exterior han tenido una baja muy importante y además ha bajado mucho la demanda, cosa que hace muy dificultosa la colocación de los productos. Aunque en estos últimos días ha habido un movimiento un poco mayor y se han podido concretar algunos negocios.

JI – ¿De cuánto ha sido esa caída, por un lado la leche al productor y por otro los precios internacionales?

WC – Ha sido bastante similar porque la leche en polvo superó los 5.000 dólares por tonelada y hoy la estamos vendiendo por debajo de los 2.000, así que estamos bajando la colocación de los productos en una proporción muy importante. Los productores también hemos tenido una baja muy sensible en el precio de la leche. Los que van a absorber toda esta crisis mundial que estamos atravesando más la sequía, los que soportan todo eso, son los productores directamente.

Nosotros, desde la cooperativas, desde la industria, lo que hacemos es trasladar a los productores los precios que recibimos de los productos cuando los colocamos, y por eso estamos haciendo estos estudios a futuro para ver la leche que vamos a recibir porque la planta tiene que adaptarse a las circunstancias.

Pero el golpe más importante lo van a recibir los productores y no así la industria; nosotros lo que hacemos es acomodar los márgenes y tratar de ser lo más eficientes posible para trasladarle el mayor precio a los productores.

Repito: siempre los que pagan los platos rotos en una crisis como esta son los productores directamente, sin ningún tipo de duda el último eslabón de la cadena es el que va a bancar toda esta situación.

JI – Y a eso hay que sumarle la sequía, que se traduce en una falta de agua y de alimento para los animales.

WC – Por supuesto, por eso es que digo que los productores están viviendo una situación muy difícil en este momento. La crisis ya ha sido tan importante que en este momento hay una cantidad muy importante de tambos que están dándole agua de mala calidad o algunos ya hasta han tenido que cerrar porque no tienen más agua; eso no se había visto nunca en la historia de la lechería.

JI – ¿Dónde habrían cerrado estos tambos concretamente?

WC – En Florida ha habido algunos tambos que ya se han cerrado y otros que también están proyectando cerrarse porque tienen agua de muy mala calidad y es imposible acarrear agua.

JI – ¿Y qué hacen en ese caso con los animales, con la infraestructura del tambo?

WC – Generalmente lo que nosotros estamos viendo es que se está vendiendo una cantidad impresionante de ganado Holando, que sería el ganado que iba a producir en este año. Lo primero que hace el productor es tratar de venderlo; esa oferta acumulada también hace que la demanda se achique y se vendan a precios prácticamente irrisorios, con todos los problemas que ya sabemos que ha tenido la carne, pero se agudiza más todavía con esta situación. Hay que ver cómo salvamos a los productores lecheros del país porque esto puede tener como saldo una caída importante en la producción lechera uruguaya.

JI – ¿Por qué si se está dando esa situación -que está complicado colocar productos en el exterior-, la remisión de leche es más o menos la misma que la del año pasado en esta época?, ¿por qué no ha habido una baja de los productos lácteos al consumidor aquí en el mercado local?

WC – En Conaprole se elaboran una cantidad de productos, tanto en el mercado interno como en el mercado internacional. El promedio de precios de venta de todos esos productos es lo que se le paga al productor. Nosotros no podemos bajar los productos lácteos en este momento cuando el productor está recibiendo mucho menor precio por el litro de leche. Entonces, el costo que el productor realmente tiene se compone de todo, no es solamente de lo que vendemos en el mercado interno sino de los costos de las raciones, los costos de no tener verdeos para pastorear, los costos de la pérdida de kilos que tiene el ganado. Como le dije al principio, hay productores que prácticamente están cerrando sus establecimientos, todo eso es el costo del litro de leche. De ninguna manera podemos pensar que se va a bajar, el costo está subiendo tremendamente. Por eso decimos -todo el mundo lo sabe y se comenta todos los días- que en la relación insumo-producto es mucho más caro lo que el productor está pagando de insumos que lo que recibe por el precio de la leche.

JI – Cuando los precios de la leche eran realmente muy importantes a nivel internacional hubo escasez de leche en algún momento a nivel local y los precios se fueron muy arriba. Se lo digo desde el punto de vista del consumidor común y corriente, en la ecuación siempre termina afectado el mercado interno de alguna forma ¿no?

WC – Sí, nosotros lo que podemos decir al respecto es que en momentos en que la leche era mucho más rentable venderla al exterior nosotros seguíamos abasteciendo. Nosotros sabemos que hubo una escasez de productos en las góndolas y en los almacenes de los barrios porque hubo otras empresas que se retiraron del mercado directamente, y nosotros seguimos, la gente lo sabía, los productos que había eran productos Conaprole, sobre todo la leche fluidas que no valía la pena venderlas en el mercado interno sino exportarla. La cooperativa siempre lo tuvo muy en cuenta y siguió tratando de abastecer un mercado que realmente no podía abastecer al cien por ciento porque no podíamos vender lo que nosotros vendíamos más la demanda que aparecía por la escasez de leche que se estaba dando porque otras plantas habían salido del mercado.

Pero para los productores de Conaprole y para la cooperativa, el mercado interno es fundamental y –repito- hoy no podemos hacer eso que usted me dice porque realmente los productores tienen un costo altísimo y la leche que se va al exterior se ha desvalorizado tremendamente.

JI – ¿Qué va a pasar con las plantas de Conaprole? Hoy dice este artículo de Últimas Noticias que va a haber seguramente un plan de cierres rotativos para algunas plantas y que habrá trabajadores de Conaprole que irán al seguro de paro. ¿Qué datos tiene?

WC – De acuerdo a la proyección que nosotros tenemos, si no hubieran lluvias de aquí al otoño –supongamos- se va a dar sin ninguna duda, pero son todas suposiciones, no podemos decir "hoy las plantas de Conaprole se cierran" porque no sería la realidad.

JI – No es para hoy, es un plan que se está estudiando a largo plazo entonces.

WC – Es un plan que se está estudiando a largo plazo si las condiciones no se revierten, si no hay lluvia. Si la semana que viene llueven más de 100 milímetros o llueven 70 milímetros y en cuatro semanas se vuelven a repetir 30 o 40 milímetros más, que se hagan lluvias periódicas digamos, que se normalice la situación de lluvia, esto seguramente no va a acontecer porque van a mejorar las condiciones. Pero si eso se mantiene seguramente vamos a tener poca leche en el otoño y supuestamente nosotros tendríamos que cerrar alguna planta en forma rotativa o adaptar la demanda de producto que tengamos en ese momento a la industrialización de la empresa.