¿Qué perspectivas se abren para la economía de EEUU?
Análisis de la economista Florencia Carriquiry, de la consultora Deloitte
(emitido a las 8.30 hs.)
JUAN ANDRES ELHORDOY (JAE):
El miércoles se conocieron los datos de actividad económica de Estados Unidos correspondientes al primer trimestre del año. El PBI de ese país cayó 6,1%, una baja similar a la que se había observado en el cuarto trimestre (6,3%).
Los medios especializados señalaron que la contracción económica en la principal economía del mundo fue mayor a la esperada pero de todas maneras los mercados vieron señales positivas y las acciones en Estados Unidos operaron al alza. ¿Cómo se explica esa aparente contradicción? ¿Cómo se evalúan esos datos? ¿Cómo quedan las perspectivas para Estados Unidos? En seguida, ese es el tema del análisis económico de hoy, con la economista Florencia Carriquiry, de la consultora Deloitte. Florencia, esta es tu primera participación en el programa así que te damos la bienvenida.
FLORENCIA CARRIQUIRY (FC):
Gracias.
JAE: ¿Cómo vieron el dato de Estados Unidos?. ¿Cómo se explica que los mercados hayan reaccionado con subas en las acciones?
FC: Hay dos factores a tener en cuenta. En primer lugar, no es muy claro que los mercados estuvieran esperando un dato menos negativo que el que finalmente se divulgó ayer. Antes de que se publicaran los datos oficiales se divulgaron algunas encuestas que marcaban una expectativa de caída del PBI de entre 4,5% y 5%. Finalmente el descenso fue, como tú decías, de 6,1%. Aclaremos que ese 6,1% es una variación contra el trimestre anterior pero expresada en términos anuales (como si la caída del trimestre se repitiera a lo largo de cuatro trimestres).
Sin embargo, en las semanas anteriores varios analistas habían señalado que el primer trimestre iba a ser tan malo como el cuarto trimestre. Nosotros, de hecho, estábamos contemplando esa situación y por eso estábamos esperando una caída del PBI del orden de 6%. Entonces, como primera conclusión, el dato global de PBI no fue tan sorprendentemente malo. El segundo elemento a considerar tiene que ver con las señales que surgen del análisis de los componentes de la demanda.
JAE: ¿Cuáles fueron las principales señales?
FC: Un primer elemento significativo es que una parte apreciable del descenso del PBI en el primer trimestre obedeció a una reducción de inventarios de las empresas. Previendo un escenario recesivo, caracterizado además por una notoria falta de crédito, las empresas redujeron sus inventarios para tener más liquidez. Eso supone una caída de la demanda porque no se reponen stocks luego de las ventas. Esa reducción de inventarios tuvo una incidencia negativa de 2,8% en el PBI. Si no hubiesen bajado los inventarios la actividad económica habría caído un 3,4% en lugar de un 6%.
Por otra parte, el consumo privado tuvo un desempeño positivo. subió 2,2% en términos anuales (frente al cuarto trimestre) impulsado principalmente por una suba significativa, de 9,4%, en la compra de bienes durables. Esa mayor demanda de bienes durables es considerada en cierta medida un indicador de más confianza de los consumidores. En el cuarto trimestre, la demanda de bienes durables había bajado más de 20% y venía cayendo a lo largo de todo 2008.
Esos dos elementos, un efecto de reducción de inventarios que no puede repetirse en el tiempo porque las empresas cuentan ya con niveles más reducidos de stocks y un repunte en el gasto de los consumidores, probablemente incidieron positivamente en el ánimo de los inversores. También influyó ayer que se conocieron resultados de empresas mejores que los esperados.
JAE: ¿Y qué sucedió con los demás componentes de la demanda en Estados Unidos? ¿Qué ocurrió con la inversión? ¿Cómo inciden las medidas de estímulo fiscal?
FC: La inversión en activos fijos continuó cayendo a un ritmo muy fuerte más de 35% en términos anualizados, con descensos generalizados en lo que hace a equipamientos, inversiones en infraestructura y también en inversión residencial.
En cuanto a la incidencia de los estímulos fiscales hay dos comentarios para hacer. Por un lado, las medidas de reducciones de impuestos seguramente han influido en las decisiones de mayor consumo de las familias (aunque no es posible proporcionar una estimación de ese efecto). Por otro lado, el gasto público bajó un 3,9% anual en el primer trimestre. Eso puede resultar sorprendente dado que el gobierno está aprobando medidas de expansión del gasto pero en el primer trimestre se produjo un recorte de los gastos en defensa. También bajó el gasto público a nivel de estados y municipios, pero seguramente en los trimestres próximos el gasto público va a subir, contribuyendo a la reactivación de la demanda agregada.
JAE: Después de ese análisis, ¿cómo quedan las perspectivas para la economía de Estados Unidos? ¿Hay una perspectiva de recuperación más rápida?
FC: En primer lugar debemos señalar, como lo hemos estado haciendo en las últimas semanas, que estamos ante un marco macroeconómico muy incierto.
Los datos del primer trimestre muestran algunos indicios favorables, pero en principio a nuestro juicio y en línea con lo que señalan numerosos analistas, debemos esperar algunas caídas adicionales de la actividad económica de Estados Unidos en los próximos trimestres. De hecho, hay analistas que señalan que nuevas pérdidas de empleos podrían llevar la tasa de desocupación hasta un 10%, desde un 8,5% que es ya un nivel alto (el más alto en 25 años). También parece lógico esperar que prevalezcan condiciones de retracción del crédito. Esos elementos podrían ocasionar algunos descensos adicionales del consumo. La inversión también podría seguir cayendo.
De todas maneras, también parece probable que el ritmo de descenso de la actividad se atenúe sensiblemente.
JAE: ¿Y entonces cómo queda la proyección para el conjunto del año?
FC: Nosotros seguimos trabajando sobre la hipótesis de que la economía de EEUU terminará el año con un descenso promedio anual de entre 3% y 3,5%. Esa proyección es algo más pesimista que la que maneja el FMI (de una baja de 2,8%) pero hay muchos analistas contemplando esa cifra que supone un descenso de nuevo importante en el segundo trimestre y cierta estabilización en la segunda mitad del año.
JAE: ¿Cuándo terminaría la recesión, entonces?
FC: Probablemente sobre fines de este año la economía de Estados Unidos dejaría de caer. Para el año próximo se debería observar una recuperación pero probablemente será moderada.
JAE: Hasta aquí el análisis de la actividad económica en Estados Unidos. No quería terminar el análisis económico de hoy sin detenernos, al menos un instante, en las perspectivas de actividad para Uruguay. Te lo planteo porque el Banco Central divulgó el martes los resultados de la encuesta de expectativas, que marcó una revisión a la baja de las proyecciones de los analistas. ¿Cómo vieron los resultados de la encuesta?
FC: Ciertamente hubo un recorte importante de las perspectivas de actividad para este año. La encuesta de marzo mostraba que la mediana de las expectativas apuntaba a una suba del PBI promedio anual de 1,5% para este año, con un mínimo de 0% y un máximo de +2%. La encuesta de abril marca una mediana de las respuestas de 0%, con un mínimo de -0,5% y un máximo de 2%.
Eso supone que ahora la mitad de los analistas espera una variación nula en el promedio anual. Si tenemos en cuenta que los datos del cuarto trimestre de 2008 dejan un efecto arrastre positivo de 2,5%, la proyección de la mediana de la encuesta contempla caídas del PBI significativas en algún momento de este año. No tenemos datos trimestrales porque la encuesta no los releva, pero presumiblemente los analistas esperan descensos al menos en la primera mitad de este año.
JAE: Ustedes estaban proyectando una variación nula desde hace ya algún tiempo. ¿Es así?
FC: Sí. A instancias de la profundidad de la crisis internacional y considerando los primeros efectos sobre la industria manufacturera, nosotros ya habíamos hecho una corrección importante de nuestras proyecciones a fines de febrero, contemplando un escenario de descensos del PBI a lo largo de 2009 y mantenemos esa proyección, que apunta a una variación nula en el promedio del año.
En las últimas semanas se ha observado cierto optimismo en los mercados que abre alguna expectativa de una recuperación algo más rápida de la economía mundial, pero a nuestro juicio todavía parece razonable asumir que el contexto externo será muy recesivo en 2009 y que la recuperación de la economía mundial será moderada en 2010. Y en ese marco, también nos parece lógico aguardar un marco recesivo para este año en Uruguay.