El desarrollo de la zafra de granos de Argentina, Uruguay y Paraguay se puede observar desde la Rambla de Montevideo. En estos días de intenso movimiento por la superposición de las exportaciones de trigo, cebada malteada, soja y maíz, el cielo suele iluminarse en el horizonte por la cantidad de barcos que esperan. Pero, ¿qué es lo que esperan?

Vamos por partes con la explicación.

El Río de la Plata tiene cuatro zonas para hacer operaciones comerciales:
a) Alfa (Atlántida – 32 pies - )
b) Beta (Piriápolis – 36 pies - )
c) Bravo (Argentina)
d) Charlie (Argentina)

Pero frente a Montevideo, hay una zona de servicios. Allí no se puede trabajar ni hacer operaciones comerciales. Es únicamente un lugar de mantenimiento (aspectos sanitarios, descansos, etc.) o de espera.

¿Qué pasa en la actualidad?
Por efecto de la crisis internacional y por la zafra de granos que se registra en la región, se amontonan barcos en esta zona de servicios.

Esto se explica por:
a) una menor demanda de barcos de carga a nivel mundial. Por este motivo, volvieron al Río de la Plata barcos más pequeños para transportar granos. Resulta que esto facilita el comercio (puede suceder que algún comprador internacional pueda fragmentar alguna operación en barcos más chicos). Por este motivo, se estima que el tráfico crece ya que se requieren más embarcaciones para sacar una producción  más voluminosa. A su vez, el puerto de Nueva Palmira está trabajando intensamente desde marzo hasta julio. Como no pueden permanecer anclados frente a los puertos más de tres barcos, los otros esperan frente a Montevideo. Por este mismo motivo, también aguardan frente a Montevideo barcos graneleros que cargan en el Río Paraná o en la misma Buenos Aires.

b) empresas navieras que deciden negociar nuevos fletes frente al Puerto de Montevideo. Se estima que es una buena opción para esperar, ya que está cerca de la costa y además, es más económico. Hay buques que pueden esperar una semana hasta que se le contrata para un nuevo viaje.

El secretario de la Sociedad de Prácticos del Río de la Plata, Daniel Báez, dijo a En Perspectiva que hay otra razón que explica un mayor movimiento de barcos frente a las costas uruguayas: la importación de combustibles que hacen Chile, Argentina y Uruguay para la producción de energía eléctrica en sus centrales térmicas.  

Esta actividad implica que barcos de gran porte descargan en la zona alfa, frente a Atlántida, el combustible que es trasladado a embarcaciones más pequeñas.  

En efecto, el vicepresidente de UTE, Pedro de Aurrecoechea, dijo a En Perspectiva que el ente energético está importando  combustible (fuel oil procesado) a través de Ancap.  Sucede que en algunos momentos, la refinería de La Teja no da abasto para la demanda de la Central Batlle.

Por este motivo, en estos momentos UTE está comprando productos a través de un contrato firme con Petrobrás. Pero además, sucede que en algunos momentos, a la empresa le sirve comprar directamente para disponer rápidamente de combustible.

Pero volviendo a la actividad en los puertos uruguayos, se afirma que mientras el movimiento de contenedores en Montevideo bajó, las dos terminales graneleras de Nueva Palmira, en Colonia, están a tope.

Allí, en estos días, se registran importantes congestionamientos por la superposición de exportaciones de trigo (atrasadas), cebada, soja y maíz.