Entrevistas

Ceres: aún no se puede confirmar quiebre del ciclo económico negativo

El investigador del Instituto Ceres Carlos Díaz manifestó a En Perspectiva que si bien hay señales positivas aún falta el dato del mes de julio para anunciar el fin de la fase contractiva de la economía uruguaya. Según el economista, la expansión de junio se debió tanto a variables externas como internas, particularmente "la demanda global de productos nacionales y la demanda por productos intermedios en el proceso productivo". Además, explicó que el Índice Líder –dato utilizado para el análisis– es un indicador adelantado del nivel de actividad que permite predecir los cambios en el ciclo económico pero no la profundidad y duración de una eventual caída o expansión del siguiente ciclo.


(emitido a las 7.38 hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
La economía uruguaya habría dejado de contraerse y podría retomar el camino del crecimiento a partir del tercer trimestre del año.

Esta es la principal conclusión del análisis que el instituto Ceres realizó sobre el comportamiento de su Índice Líder que es diseñado para anticipar cambios en los ciclos económicos.

El indicador aumentó 1.1% en junio con respecto a mayo. Si analizamos el dato anterior, vemos que este indicador se había mantenido estable y en los siete meses anteriores se había producido un descenso.

EMILIANO COTELO:
O sea, van dos meses –mayo y junio– en los que se corta con aquella tendencia a la baja que había mostrado durante ese largo período.


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JAE – Estamos con el economista Carlos Díaz, investigador de Ceres. ¿Se puede confirmar que estamos ya frente a un quiebre del ciclo económico negativo?

CARLOS DÍAZ:
No por el momento. Como bien decían en la presentación, el Índice Líder de Ceres es un indicador adelantado del nivel de actividad y nos permite predecir los cambios en el ciclo económico. Pero nosotros tenemos una regla sencilla de determinación de esos quiebres en el ciclo económico y le pedimos tres señales; hasta ahora tenemos la señal de mayo y la de junio, necesitaríamos el dato de julio que ratificara las observaciones anteriores para confirmar que la fase contractiva, que eventualmente transcurrió en el primer semestre del año, ha finalizado.

EC – Yo sé que estos temas son muy técnicos y complicados pero podríamos explicar qué es el Índice Líder, porque hace ya meses que se habla mucho de él y sería bueno que el público no especializado tuviera una aproximación a cómo se lo construye.

CD – El Índice Líder es un índice que está integrado por variables que tienen la propiedad de cambiar con anticipación a lo que lo hace el ciclo económico. Lo que nos permite eso entonces es anticipar quiebres en la actividad económica. Esa es la característica más importante que tiene el Índice Líder y por lo tanto no puede ser interpretado como un índice contemporáneo de la actividad económica.

EC – Adelanta.

CD – Adelanta la actividad económica, exactamente.

EC – ¿En qué factores se basan en este caso concreto, cuáles serían algunos de los que estarían marcando esta nueva tendencia?

CD – Como nosotros comentamos en el informe, analizamos variables que tienen que ver con el contexto internacional y variables que tienen que ver con la economía doméstica. Particularmente en la observación del mes de junio observamos que la expansión se debe tanto a las variables externas que integran el Índice Líder como a las variables internas. O sea, tanto las externas como las internas han contribuido en la expansión del índice. Para ir un paso más, dentro de las variables externas se destaca la demanda global de productos nacionales y dentro de los factores internos se destaca la demanda por productos intermedios en el proceso productivo, esas serían las variables a destacar de la expansión observada en el mes de junio.

JAE – O sea que ustedes toman datos oficiales que recoge el Banco Central, el Instituto Nacional de Estadística, lo procesan en el marco de esa fórmula para elaborar este índice y de allí sacan la conclusión.

CD – Exactamente.

JAE – ¿Qué peso tiene el porcentaje? En junio aumentó 1.08% con respecto al mes de mayo, ¿esto tiene que ver con el énfasis, con el vigor que tiene o tendría el crecimiento económico del país?

CD – Es una buena pregunta. Nosotros por la metodología aconsejamos no interpretar las cifras del índice más allá del signo, nos quedamos con el signo positivo. Hay quienes utilizan el Índice Líder de Ceres para hacer estimaciones de otro tipo y ahí ya entran consideraciones de la amplitud de la expansión o contracción de las variables. Lo más relevante aquí es que observamos una primera cifra positiva que acompañada con la estabilización que vimos en el mes anterior ya nos puede estar dando una eventual señal de que la economía entraría en expansión. Pero hacemos énfasis en que la magnitud de la contracción o expansión del índice no sea tenida en cuenta para su primera interpretación.

EC – Y ustedes dicen que podría ocurrir -falta una medición más para confirmarlo- que la economía uruguaya empezara su recuperación en el tercer trimestre del año, en el comienzo del segundo semestre.

CD – Exacto.

EC – Comienzo de la segunda mitad, o sea que ya estaríamos en esta etapa de recuperación.

CD – Así es.

JAE – La pregunta vinculada a la vehemencia o al énfasis del crecimiento económico tiene que ver con una advertencia que ha hecho la consultora Deloitte aquí hace algunas semanas con respecto a qué debería pasar en la economía uruguaya para que se cumpliera el pronóstico del gobierno. El gobierno ha dicho que, según sus estimaciones, la economía va a crecer este año un 0.7%. Con los datos del primer trimestre y eventualmente del segundo, que se van a confirmar ahora, la economía debería crecer en el segundo trimestre cerca de un 8% para llegar a ese nivel por factores arrastre y demás. ¿El Índice Líder de Ceres no permite anticipar si efectivamente la economía va a crecer rápidamente como estaría indicando el análisis del gobierno?

CD – No, lamentablemente una de las dos limitaciones clave que tienen los índices líderes en general es que no nos permiten anticipar ni la profundidad de una eventual caída o una eventual expansión ni la duración de ese próximo ciclo económico. En este caso en particular por más que nosotros confirmáramos en julio que la economía entró en una fase expansiva a partir del segundo semestre del año no estaríamos en condiciones de afirmar a qué tasa crecería ni cuánto duraría esa etapa.

JAE – Ustedes en el informe que difunden y preparan mes a mes también incluyen el Índice de Difusión, que es aquel que calcula la proporción de las variables que integran el Índice Líder y su evolución, y en este caso encuentran que la mayoría tienen signos positivos. ¿Cómo se interpreta esto? ¿Qué significa el Índice de Difusión? ¿Qué peso tiene el hecho de que la mayoría esté evolucionando favorablemente?

CD – El Índice de Difusión es un índice que del total de las variables que integran el Índice Líder mide qué proporción contribuye para que el índice en ese mes dado se expanda. Como bien decían, el Índice de Difusión marcó un 67%, esto sería una señal de fortaleza adicional a la tasa positiva de crecimiento del Índice Líder porque nos indica que más de la mitad de las variables que lo integran se está expandiendo, o sea que ese crecimiento tiene una base de sustento generalizada. Tampoco es un dato menor decir que esta observación que supera el nivel crítico del 50% no se registraba desde octubre de 2008, que fue cuando comenzamos a tener observaciones negativas en el Índice Líder y que ya nos ponían una advertencia respecto a la fase contractiva que se podría iniciar y que se terminó iniciando a partir del primer trimestre de este año.