EMILIANO COTELO:
El debate en Uruguay a veces es un poco anticuado. Por ejemplo, no tenemos conciencia clara de algunos hechos nuevos y muy potentes que están ocurriendo en el mundo.

La advertencia no es mía, sino que pertenece al contador Enrique Iglesias.
Lo dijo durante su conferencia del viernes pasado en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Económicas, que trasmitimos en directo aquí EN PERSPECTIVA.

Cuando exponía sobre la necesidad de un nuevo paradigma para el desarrollo de América de Latina, Iglesias dijo que para elaborarlo era imprescindible, entre otras cosas, tener en cuenta fenómenos internacionales nuevos que aparentemente en Uruguay desconocemos o despreciamos.

"El segundo puntal de ese paradigma incremental sería tener una clara conciencia de los hechos nuevos que están ocurriendo hoy en el mundo. Yo estoy en una posición privilegiada, viviendo en Washington uno tiene oportunidad de ver las cosas desde un sitial realmente privilegiado. Están pasando cosas muy importantes en el mundo, a veces tengo la impresión -lo digo con todo respeto- de que nuestro debate a veces es un poco viejo, no viejo en el sentido de que no sean temas importantes, sino que no estamos siendo capaces de incorporar las nuevas cosas que están ocurriendo en el mundo. El fenómeno del avance que ocurrió en menos de una década, en una década larga, en China y la India, estos países le pusieron un segundo piso al mundo, es un fenómeno que nunca vio el capitalismo en su historia. Yo decía hablando con unos economistas en China, es un fenómeno realmente impresionante, y la India viene detrás. Y no solamente es impresionante en el ingreso en las cosas tradicionales en las que nosotros veníamos exportando, sino que ahora van a entrar en las tecnologías de la información. Hay políticas explícitas del Estado para llevar a estos países en esa línea. Es un fenómeno que abre inmensas posibilidades, pero abre inmensos desafíos", dijo el presidente del BID en un pasaje de su conferencia en Montevideo.

Para insistir en la importancia de seguir de cerca esas transformaciones, Iglesias llegó a sostener que para América Latina pueden ser más relevantes la salud de aquellas nuevas economías que una eventual suba en la tasa de interés de Estados Unidos.

"En este momento de Panamá para abajo el ingreso de China es fundamenta. Es una bendición. Hoy en día nos preocupan las políticas de la Reserva Federal. A mí me preocupa qué pasa con la economía china, porque si allí se producen alteraciones importantes en su condición económica y tenemos un bajón, las materias primas van a sufrir y vamos a tener problemas con la soja, con el cobre, con el hierro. De alguna manera éste es un problema muy importante, el mundo está cambiando rápidamente y están entrando en escena nuevas figuras que de alguna forma se hacen temas centrales en la transformación del mundo", advirtió.

El viernes, mientras escuchaba estos comentarios de Iglesias, yo miraba a un costado de la mesa de este estudio donde tenía abierto un ejemplar de la revista argentina Gestión. Hacía varios días que tenía marcado un artículo que quería compartir con ustedes. Un artículo que habla, justamente de esos cambios que Iglesias destacaba el viernes y que, quizás, por este lado del mundo no apreciamos en toda su magnitud.

El título del informe es "Las potencias que vienen". Se basa en una investigación de Goldman Sachs y presenta conclusiones verdaderamente impactantes. Creo que vale la pena repasar, por lo menos, algunos de sus párrafos principales.

"Una investigación de Goldman Sachs sobre las perspectivas de la economía global vaticina que a mediados de este Siglo, Brasil, Rusia, India y China integrarán con los Estados Unidos y Japón el nuevo grupo de los seis países económicamente más poderosos de la Tierra.

La economía del mundo cambió muchísimo en los últimos 50 años. En los próximos, 50 el cambio podría ser, como mínimo, igualmente dramático", comienza el informe.

"En nuestra reciente investigación global, subrayamos la importancia de observar al mundo en desarrollo, considerando las cuestiones que interesan a los inversores que piensan en el largo plazo. De ese trabajo surge que en las próximas dos décadas el crecimiento generado por los principales países en desarrollo, particularmente el grupo BRIC (Brasil, Rusia, India y China) podría convertirse en una fuerza económica mucho más grande y mucho mayor también, de lo que prevén los inversores.

Determinamos cuán grande podría llegar a ser esa fuerza en los próximos 50 años. Y para hacerlo no nos limitamos a explorar las actuales tasas de crecimiento sino que establecimos supuestos claros respecto de la probable evolución del proceso de crecimiento y desarrollo y aplicamos un modelo formal para generar pronósticos de largo plazo. Luego comparamos nuestras proyecciones para el Grupo BRIC con las proyecciones del largo plazo para el actual Grupo de los Seis, integrado por Estados Unidos, Japón, Reino Unido, Alemania, Francia e Italia.

A partir de las últimas proyecciones demográficas y de un modelo de acumulación de capital y crecimiento de la productividad, estimamos el crecimiento del Producto Bruto Interno, el ingreso per cápita y el movimiento monetario para las economías de Brasil, India, Rusia y China hasta el año 2050. Los resultados sugieren que si las cosas salen bien, éstas se convertirían en una fuente muy importante del nuevo gasto global en un futuro no demasiado distante. La economía india, por ejemplo, podría ser mayor que la de Japón para el año 2032. Y la de China podría ser mayor que la de Estados Unidos ya en el año 2041. Por supuesto sería mayor que cualquiera de las otras antes que eso. Mayor que las demás antes en el año 2016.
La economía BRIC, tomada en conjunto, podría ser más grande que la del actual Grupo de los Seis para el año 2039.

El informe aclara luego que aunque hay una buena posibilidad de que las condiciones reales en una u otra economía no se ajusten finalmente a lo proyectado en este trabajo, si los BRIC adoptan políticas acertadas, el mundo que vislumbramos podría tornarse real. Las proyecciones no dejan dudas respecto de que el progreso de este grupo de países será crucial para la evolución de las economía mundial. Si estas economías podrían convertirse en las próximas décadas en la fuerza impulsora en el crecimiento del gasto", publicó Gestión citando el informe.

Unos cuantos párrafos más adelante a un resumen de lo que este estudio de Goldman Sanchs prevé para cada una de las economías BRIC. "En Brasil, hasta mediados de siglo, su Producto Bruto Interno crecerá a un promedio de 3,6%. La economía de Brasil superará en tamaño a la de Italia en el año 2025, a la de Francia en 2031 y a las del Reino Unido y Alemania en 2036".

Sigamos con Rusia. "Las proyecciones de crecimiento se ven dificultadas por la disminución de su población pero las fuertes tasas de convergencia trabajan en favor de Rusia y para el 2050 su Producto Bruto Interno per cápita será el más alto del grupo y comparable con el de uno de los países Grupo de los Seis. La economía rusa superaría a la de Italia en 2018, a la de Francia en 2024, a la del Reino Unido en el 2027 y a la alemana en el 2028".

Pasemos a hablar de India. "A diferencia del Grupo de los Seis, Brasil, Rusia y China, donde el crecimiento se moderará significativamente en algunas décadas, en el caso de India el ritmo de crecimiento anual se mantendrá en un 5% anual hasta mediados del siglo. Su Producto Bruto Interno dejará atrás al de Japón hacia el año 2032. India tiene potencial para elevar 35 veces su actual ingreso per cápita en dólares de aquí al año 2050. Sin embargo, lo más probable es que este indicador siga siendo significativamente más bajo que el del resto de los países analizados".

Finalmente hablemos de China. "En 2020 el crecimiento anual del crecimiento del Producto Bruto Interno ya no rondará los 8 puntos sino que será del 5% y para el 2045 China crecerá a 3,5 anual. Aún así, su alta tasa de inversión, su enorme fuerza laboral y su constante convergencia, la convertirían en la mayor economía del mundo en el año 2041".

Un dato más del informe, el referente a la demografía y los ingresos. Se señala que pese al acelerado crecimiento que tendrán, en el año 2050, la gente en el área BRIC seguiría siendo más pobre en promedio que la de las economías del Grupo de los Seis, salvo Rusia. Este país alcanzaría un ingreso per cápita cercano al de los países más pobres del Grupo de los Seis. El ingreso per cápita de China podría ser similar al actual de las economías desarrolladas, alrededor de 30.000 dólares. En 2050, el ingreso de los Estados Unidos estaría en los 80.000 dólares".

El informe es bastante más largo que esto que yo acabo de reseñar.
Está acompañado, además, de varios gráficos y tablas. Yo no voy a leerlo completo. Nos llevaría demasiado tiempo e implicaría ingresar en detalles técnicos demasiado complejos para un espacio radial. De todos modos, lo esencial ya lo conocen. Creo que valía la pena compartirlo con ustedes.
Además lo dejamos como el punto de partida de una serie de enfoques que en las próximas semanas tenemos previstos sobre estas nuevas potencias que se vienen, las economías BRIC: Brasil, Rusia, India y China.

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En nuestro sitio web, Espectador.com, van a poder encontrar hoy mismo la versión original, en inglés, de este trabajo. Si desean leerlo en español, les recomiendo que recurran a la revista argentina GESTION, en su número del mes de marzo-abril.