Según informó el diario La Nación, se trata de la "vetusta" planta industrial de Celulosa Puerto Piray, y agrega que la autorización fue dada "sin que, en este caso, el declamado celo ambientalista haya impedido esa decisión".
    
Se trata de una empresa que se presentó a concurso de acreedores y que ahora será explotada por una cooperativa formada por 197 ex operarios, a la que el gobierno argentino le otorgó un subsidio para comenzar a funcionar.
    
Argentina y Uruguay terminaron hace una semana sus alegatos ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por la instalación de Botnia.