(emitido a las 07.37 Hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
"Acepten estas espléndidas ofertas venezolanas para achicar la plantilla laboral", dijo el presidente Mujica ayer, a propósito de la política que está llevando adelante el Bandes, banco que opera aquí en Uruguay y que es propiedad del Bandes de Venezuela. Una oferta para que se reduzca su plantilla laboral, que actualmente anda en los 460 trabajadores.

El presidente Mujica dijo ayer en su audición de M24: "Realmente son desusadas para nuestro medio –estas ofertas que ha presentado Bandes–, tengo que confesar, siento vergüenza de que los números que se ofrecen no conformen".

Antes de dos llamados que ha hecho Bandes oportunamente en las últimas semanas, había 460 funcionarios bancarios, a los que se les presentó un paquete de retiros incentivados con el objetivo de reducir en unos 200 el número de trabajadores, sin embargo aceptaron este planteo un total de 60 bancarios.

EMILIANO COTELO:
Bandes ofrecía 24 salarios completos para aquellos trabajadores menores de 50 años, a los de más de 50 y de hasta 59 años les pagaba el 70% del salario por hasta cinco años o hasta que alcanzaran la edad de retiro, y aquellos con 60 años o más tenían una oferta de retiro incentivado por el 50% del sueldo.

JAE - Bandes se instaló en el país en 2006, surgió de las cenizas de Cofac, que había tenido problemas en 2005. En lo que va de 2010, Bandes ha registrado pérdidas acumuladas por 17 millones de dólares, una caída de depósitos cercana al 30%, según datos del Banco Central del Uruguay (BCU). También ha tenido una caída de los créditos, que es parte del negocio bancario, casi 40% de caída, y el volumen de depósitos en la institución al cierre de agosto, según el BCU, apenas superaba los 100 millones de dólares.

EC - Ayer el presidente Mujica estaba muy preocupado por la situación de Bandes y la necesidad de encarar el achicamiento para volver viable la institución, y dedicó unos 10 de los 15 minutos de su audición a este asunto. Puso especial cuidado en reconocer el gesto que había tenido el gobierno del presidente Hugo Chávez cuando en los primeros meses del primer gobierno frenteamplista se avino a salvar a esa institución que se había presentado como un problema duro al arranque de la presidencia de Tabaré Vázquez.

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JAE - Estamos en comunicación con Gustavo Pérez, presidente de AEBU.

¿Cómo interpreta estas palabras, el hecho de que el presidente Mujica ayer haya dedicado 10 minutos de los 15 de su audición a referirse a este tema?

GUSTAVO PÉREZ:
Uno siempre tiene que presuponer la buena fe de las personas cuando hablan, máxime cuando se trata del presidente de la República. Presupongo la buena fe del presidente, lo cual no me impide expresar y pensar que este tipo de apelaciones públicas no es la forma más adecuada de buscar una solución como la que pretende hacer, poner prácticamente a los trabajadores del Bandes como responsables de la situación, en el banquillo o teniendo que determinar una solución.

JAE - ¿Por qué dice que la forma no es la adecuada?

GP - Porque la forma de tratar temas tan delicados no es a partir de mensajes radiales. Reconocemos que es el estilo que en algunos temas adopta el actual presidente, hay que respetarlo, pero son temas de gran delicadeza; fíjese que según la reseña que ustedes hacían, estamos hablando de 380 trabajadores, casi 400, y de una institución bancaria. Son temas que tienen extrema delicadeza para la vida institucional y para las propias personas involucradas, por tanto la vía debería ser, en la medida en que está la preocupación, una conversación serena, franca, con ideas arriba de la mesa, con propuestas, y no solamente con apelaciones. No atribuimos intencionalidades al presidente, pero no es la forma más adecuada, porque no predispone adecuadamente a quienes él pretende que se predispongan a tomar una actitud.

JAE - ¿Hay un nuevo llamado abierto para esto? ¿Por qué el presidente Mujica hace referencia al tema?

GP - Ese es el segundo aspecto. Hoy, aún si los trabajadores de Bandes quisieran cumplir con el deseo del presidente de la República, no podrían hacerlo porque no hay ningún plan arriba de la mesa.

JAE - El plazo se abrió y se cerró en dos oportunidades, y hasta ahora no hay ninguna señal de que otra vez se vuelva a plantear un plan de retiro incentivado.

GP - Exactamente. El plan tuvo su tiempo, se acogieron unos 60 trabajadores, pero el plazo se cerró. Incluso no todos los trabajadores se han retirado aún, las autoridades del banco están dosificando los retiros; y ese plan está cerrado, el propio banco lo comunicó. Al día de hoy eso no está presente, las autoridades venezolanas que estaban en el país se fueron hace unas semanas, no han regresado, no hemos tenido contactos, a pesar de que hemos procurado por distintas vías no hemos podido conseguir un contacto productivo, entonces la situación hoy está detenida. Este tema se va a mover y podremos considerar distintos aspectos, el que señala el presidente u otros, en la medida en que haya propuestas arriba de la mesa, salidas, que se tenga en cuenta lo que pasó en este intento, pensar para adelante y fundamentalmente en salidas laborales, que es lo que AEBU pretende en toda situación similar a esta.

JAE - El presidente Mujica ayer habló de "espléndidas ofertas venezolanas". ¿Qué dice usted?

GP - Esas valoraciones son subjetivas. El presidente lo valora así, seguramente un número de trabajadores lo valoraron como oportuno para su situación y por eso se acogieron, y otros no lo valoraron de la misma forma.

JAE - ¿Es un tema negociable? ¿Puede AEBU ponerse el tema al hombro y negociar una mejora de estos retiros que ya fueron ofrecidos?

GP - Como norma, nunca negociamos incentivos; con las empresas negociamos salidas laborales. Este proceso de incentivos no lo negociamos, fue una propuesta que realizó el banco, se ofreció. Lo que hicimos fue considerar exhaustivamente y en profundidad con los trabajadores cuál es la situación de la empresa, cuál es la situación del banco, su historia, sus antecedentes, su presente y sus posibilidades de futuro y las alternativas que les cabían a los trabajadores en cada una, en la opción de retirarse y en la opción de permanecer. Lo consideramos exhaustivamente, y a partir de allí queda el fuero íntimo de cada persona porque defendemos profundamente en estos procesos que no exista la compulsividad. No aceptamos como principio la compulsividad del despido para resolver este tipo de situaciones. Por tanto, la acción de AEBU, que es una acción permanente en esto, es de reflexión y de contribuir con los compañeros a analizar adecuadamente una situación que es extremadamente compleja. La situación del banco es compleja, porque mantiene sus números en muy buena forma en el BCU, pero tiene un volumen de negocios insuficiente para el volumen que tiene.

JAE - ¿Qué quiere decir que mantiene buenos números? Porque ha dado pérdidas sistemáticamente.

GP - Mantiene un nivel de liquidez adecuado, mantiene su patrimonio por encima de los niveles exigidos.

JAE - Se le ha exigido y ha capitalizado, creo que ya lo ha hecho cuatro veces.

GP - Exacto; si no fuera así, el banco no estaría con sus puertas abiertas, porque el BCU en esto es como debe ser, muy riguroso.

JAE - ¿El futuro del Bandes depende del retiro de funcionarios? ¿Qué pasa con el plan de negocios?

GP - Esa es de las cosas que no hemos podido determinar adecuadamente con las autoridades del banco y que inciden en este tipo de procesos. El banco cuando ofreció sus incentivos en ningún momento manifestó cómo seguía la historia, cómo va a seguir, cómo va a ser su plan de negocios, a qué áreas de mercado se va a volcar, cómo va a remontar la situación. Todas estas cosas no hacen fácil la discusión con un grupo de trabajadores. El banco está comprometido a presentar al BCU antes del 15 de octubre sus planes de negocios y de readecuación. También estamos a la espera de la venida de las autoridades a efectos de ver si podemos tener un poco más de claridad para pensar. Pensar con serenidad las autoridades del banco, el accionista, el banco Bandes de Venezuela, el sindicato, y a partir de este interés marcado del presidente de la República sería oportuno también un involucramiento del Poder Ejecutivo en la elaboración o la discusión de soluciones para adelante.

JAE - ¿En qué está pensando? ¿En algo como lo que hubo en el Banco de Crédito, aquel tres por uno que en algún momento se instrumentó?

GP - No necesariamente; hay que pensar con cabeza abierta, con un menú de soluciones. Alguna parte podría ser por allí, no exactamente esa experiencia, pero siempre se pueden buscar posibilidades adecuadas a las necesidades de las empresas estatales que pudieran participar. Por otro lado, soluciones que incluso han sido manejadas por las autoridades, como instalar una segunda empresa de propiedad del mismo accionista con objetivo en pequeñas y medianas economías. Los propios accionistas han manifestado su interés en diversificar el negocio.

Hay que buscar distintas salidas, pero lo fundamental es que las autoridades del banco clarifiquen cuál es su opción a futuro. Eso es lo que les da a los trabajadores la posibilidad real y libre de elegir, en la medida en que conozcan exactamente el futuro, cosa que ha quedado bastante difusa. Esto no ha sido responsabilidad ni de AEBU ni del Poder Ejecutivo uruguayo. Esa es una de las claves en las conversaciones futuras.

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Transcripción: María Lila Ltaif