(Emitido a las 07.37)

EMILIANO COTELO:
Había llamado la atención la noticia de que el presidente argentino, Néstor Kirchner, invitaba a empresarios uruguayos a acompañarlo en la visita a China que realizó hace pocos días.

Estamos en comunicación con uno de ellos, el presidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz, Hugo Manini, que estuvo en estos días en Beijing y otras ciudades en el otro lado del mundo. Decíamos, entonces, que viajó ¿a instancias del presidente de un país vecino?

HUGO MANINI:
Noto que hay una pequeña desinteligencia entre nuestro Ministerio de Relaciones Exteriores y la prensa, porque no fue una invitación del presidente Kirchner a algunos empresarios uruguayos. A comienzos de mayo nos llegó, vía Cancillería, la información de que se estaba organizando una misión comercial conjunta de todo el Mercosur a China para los días 27 de junio al 2 de julio. Vimos la importancia que revestía una misión de empresarios del Mercosur, a título individual y a título institucional. Incluso se nos informó que iban a concurrir numerosas organizaciones de Brasil, Paraguay y Argentina que agrupaban sectorialmente a empresarios, como la Cámara de Exportadora de la República Argentina, la Cámara de Industriales, la Cámara de la Industria Aceitera, etcétera, etcétera, y que efectivamente concurrieron. También sabíamos que iban a estar presentes los industriales paraguayos a través del presidente, el vicepresidente, el secretario de la Cámara de Industria y numerosos empresarios.

Esto cambia el encare: no fue una invitación personal...

EC - Fue una misión de los países del Mercosur que aprovechó la presencia en China del presidente Kirchner, si entiendo bien.

HM - ...que además es el presidente pro tempore del Mercosur, y es a quien le correspondía genuinamente encabezar una misión empresarial del Mercosur nada menos que a ese mundo tan importante que es China.

EC - Es interesante el matiz; valía la pena la puntualización. Usted participó de esa misión comercial conjunta de los países del bloque, y acaba de volver; por eso lo estamos llamando, porque regresó hace apenas 24 horas.

HM - 24 horas, y estamos sufriendo el contraste tremendo de temperatura durante nuestra estadía en Beijing y Shanghai, cercana a los 40 grados, y acá estamos en los días más fríos del invierno.

***

EC - Nosotros no exportamos arroz a China.

HM - No; está llegando a China un contenedor de 20 toneladas, se había enviado otro hace casi dos años con motivo de la visita del presidente Batlle, y estamos comenzando una negociación. En el comercio, sobre todo con un mundo tan poco conocido para América del Sur como es el mundo asiático, los negocios no surgen de un día para el otro, ni como producto de una misión o de una visita; es toda una escalera que hay que recorrer escalón por escalón. En lo que respecta a nosotros, como representantes del sector arrocero, China es un fenómeno a tener muy, muy en cuenta.

EC - Por ahora, China es exportador de arroz; creo que el quinto del mundo...

HM - Hasta el 2002 era el quinto exportador de arroz del mundo, con 2:5 millones de toneladas, pero en los últimos dos años, 2003 y 2004, pasó a ser importador neto: exporta 1:3 millones de toneladas e importa 1:4, es decir que tiene un déficit de 100 mil toneladas.

Pero lo más curioso es que China, que en los años 1999 y 2000 mantenía un importantísimo stock (no olvidemos que es el principal consumidor de arroz del mundo, y además el principal productor y era quinto exportador) de 98:5 millones toneladas de arroz elaborado, en una tendencia que viene constante ha venido bajando ese stock en un 66 por ciento: pasó de 98:5 millones de toneladas de arroz elaborado a 32:9 millones.

Quiere decir que China se perfila como un importantísimo comprador de arroz. No digo de cantidades brutales, pero sí importantes.

EC - Y en esa perspectiva ¿cómo se ubica Uruguay como eventual proveedor?

HM - Diría que un poco más del 50% del arroz que consume China es de grano largo, que es el que produce Uruguay en su mejor versión, en una calidad realmente destacable, y hay que apostar a la calidad en ese sentido. Pero también hay que pensar que China hasta ahora exportaba a numerosos países, algunos de los cuales están del otro lado del Atlántico, como Costa de Marfil, a la que proveía más de un millón de toneladas por año. El comercio del arroz es tan pequeño que cualquier modificación de este mapa sirve no sólo para alentar la posibilidad de exportar a China (con un flete costoso, en este momento ha subido mucho) sino también de que China comience a retirar mayor cantidad arroz de Tailandia, que es el mayor exportador, al tiempo que nos deja libre mercados como puede ser Costa de Marfil, Rusia, Nueva Guinea...

Esos mercados eran abastecidos hasta ahora por China salvo en estos últimos dos años en que fue reduciendo su stock interno, pasó de 31 millones a 27 millones de hectáreas cultivadas en 2003 - 2004... Se supone que va a aumentar algo el área, pero China va a tener un gran problema, que es el desafío del agua dulce, que es una de las grandes riquezas que posee Uruguay. China está viviendo una emigración de las zonas rurales (70% de su población estaba radicada en ellas) a las zonas urbanas, y se pronostica que en los próximos 10 años posiblemente lleguen 300 millones de chinos a engrosar las ciudades. Ahí va a venir otro conflicto: el agua para uso humano, el agua para uso industrial (sin lugar a dudas China se perfila como país industrial) contra el agua para uso agrícola. O sea que, dado que la inmensa mayoría del arroz que se cultiva en China es irrigado, no vemos posibilidades de que pueda superar los volúmenes de los que estamos hablando.

EC - Todo esto abre posibilidades para Uruguay que ustedes estuvieron explorando en este viaje. Porque en definitiva estas conversaciones no dejaron ningún resultado concreto a corto plazo; no hubo definiciones.

HM - No. Hubo muy importantes reuniones con directivos de Kofko, la corporación del Estado que maneja la mayor parte de los negocios de importación y exportación de granos, aceites y productos alimenticios. Pero no hay que olvidar que hace tiempo que nosotros estamos en esta perspectiva, en esta estrategia.

EC - O sea que lo que se hizo fue continuar las conversaciones.

HM - Sí. En el año 2001 realizamos una misión a China, Japón y Tailandia con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo; concurrimos cuatro directivos de la Asociación de Cultivadores de Arroz y el entonces director de investigación arrocera del INIA, Gonzalo Zorrilla. Allí hicimos contactos muy importantes, y llamó la atención este el problema de falta de agua que iba a surgir.

EC - China envió en mayo de este año una delegación de técnicos que visitó algunas arroceras uruguayas. ¿Está previsto que vuelvan?

HM - Sin duda. Estuvo una delegación de Chinatex, una empresa importantísima vinculada a Kofko (ahora estuvimos con ellos también en Beijing y en Shanghai), y todo hace pensar que China va a ser un importante comprador de Uruguay. De pronto, no de grandes volúmenes pero sí de variedades de calidad que nosotros podemos suministrarle de acuerdo a los requerimientos de ese mercado. En esta oportunidad, el arroz que más les gustó es uno de grano medio, que se vende en los supermercados con el nombre de "Doble Carolina"; es una variedad que se planta en forma muy reducida en el país pero su cultivo se puede aumentar inmediatamente. El tema es tener un convenio, un acuerdo de varios años por delante para la colocación de ese producto en el mercado chino.

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Transcripción y edición: Jorge García Ramón