En una jornada marcada por la volatilidad, las bolsas del mundo cayeron abruptamente y el dólar se vio fortalecido
Análisis del economista Pablo Rosselli, de la consultora Deloitte.
(emitido a las 7.40 Hs.)
EMILIANO COTELO:
"Pánico económico mundial. En Uruguay saltó el dólar, fue un lunes negro". Este es el título con el que presenta el tema hoy en su portada el diario El País.
El Observador, por su lado, elige este otro encare: "El dólar supera la barrera de los 19 pesos y entra en zona de volatilidad".
La Diaria tituló: "Se quema todo. Oleada mundial de derrumbes en los mercados bursátiles mientras en la Unión Europea se anuncian nuevos ajustes".
En Últimas Noticias también aparece destacado: "Caída mundial de bolsas y suba del dólar en Uruguay".
La República señala: "El mundo cae y el dólar sube".
JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
Otro indicador para manejar es el riesgo país, que en Uruguay ayer subió más de 15%, según República AFAP. Esto es la comparación de los rendimientos de los títulos uruguayos con títulos americanos a igual plazo.
Y otro dato es el índice de la Bolsa de Valores de Montevideo (BVM), que de algún modo resume el valor de los títulos públicos que operan en nuestro país. También ayer registró una caída de 1,4% lo que está en niveles históricamente altos.
En todo caso estamos hablando de efectos que tienen que ver con un día en particular, el de ayer lunes, con mercados muy volátiles, con un dólar que por ejemplo en nuestro país saltó 2,26% pero que termina muy firme, porque si observamos la última operación en la Bolsa Electrónica de Valores terminó a 19,15. O sea que mirando el "punta a punta" deberíamos decir que el salto es incluso mayor, cercano al 3% en un solo día.
EC Al contexto internacional ya aludimos, pero vale la pena reseñarlo nuevamente. Fue, dicen algunos, un "lunes negro". ¿Por qué? ¿Qué fue lo que terminó ocurriendo con las bolsas, por ejemplo?
JAE Esto era esperable. Las bolsas cayeron en forma estrepitosa, se derrumbaron en Europa, en Estados Unidos y en prácticamente todo el mundo, no hay absolutamente ninguna bolsa que ayer haya escapado de esta situación.
En este contexto además hay que decir que el valor de las acciones en las bolsas se derrumbó, mientras que algunos títulos públicos como los de Estados Unidos subieron, lo que marca algo para destacar. También ocurre esto en el caso de España y de Italia lo que, como comentábamos ayer, responde a la intervención del Banco Central Europeo que quiere de algún modo ahuyentar a los especuladores en ese mercado.
EC ¿Cómo hay que entender todas estas señales que estallaron en la víspera? Vamos a conversarlo con el economista Pablo Rosselli, de la consultora Deloitte.
JAE ¿Cómo debemos interpretar estos datos? ¿Qué importancia hay que asignarle a estos números que vimos ayer? De algún modo todo se refiere a la información del viernes a última hora, con esa rebaja que Standard & Poor´s (S&P) le puso a la nota de la deuda soberana de Estados Unidos.
PABLO ROSSELLI:
Ayer fue un día de pánico, de mucha volatilidad y quizá la primera conclusión que tenemos que sacar es que no deberíamos apresurarnos a sacar conclusiones muy asertivas sobre cómo puede impactar todo esto en la economía mundial y en la de nuestro país.
Me parece que hay un segundo elemento a destacar y es que en el día de ayer hubo una fuerte volatilidad y se acentuaron algunas tendencias que habíamos visto en prácticamente las dos semanas anteriores: una es la caída de las bolsas y otra es el fortalecimiento del dólar en el mundo. Las bolsas tuvieron un muy mal día ayer pero venían cayendo en todo el mundo desde hacía unos cuantos días, prácticamente dos semanas. Y esa caída de las bolsas venía reflejando una preocupación por la capacidad de crecer de la economía mundial, sobre todo porque habíamos visto malos datos de actividad económica en Estados Unidos y porque la crisis fiscal en Europa genera incertidumbres, ya que sabemos que tiene que haber más medidas de ajuste en esa zona.
EC Recordemos lo que ocurrió en el fin de semana, antes de la jornada de ayer que es la que estás comentando. El viernes la agencia S&P le bajó la nota a la deuda soberana de Estados Unidos de AAA a AA+, algo histórico. Por otro lado, el Banco Central Europeo se decidió a intervenir en respaldo de los papeles de deuda de España y de Italia, que venían siendo muy castigados por los inversores, y salió a comprar esos títulos. Entonces, ¿por qué como reacción a esas resoluciones se producen estos movimientos que vimos ayer? ¿Por qué las bolsas bajan, por ejemplo?
PR Nosotros tendemos a pensar que, en buena medida, las bolsas bajaron porque se generó un pánico ante la reducción de la categoría de la deuda de Estados Unidos.
EC Que las bolsas bajen quiere decir que baja el valor de las acciones de empresas.
PR Exactamente. Uno podría preguntarse si esto es solamente reflejo de un pánico o si realmente los inversores han hecho un cálculo juicioso y cuidadoso acerca de que finalmente Estados Unidos se va a ver obligado a tomar más medidas de ajuste, para tratar de recuperar su AAA o para evitar que la AA+ continúe cayendo y que se le siga bajando la nota. Y de que si hay más medidas de ajuste la economía va a crecer todavía menos de lo que estaba previsto, las empresas van a ganar todavía menos, y si la economía de Estados Unidos crece menos la economía mundial puede crecer menos.
Nosotros seríamos bastante cautelosos en convalidar mucho ese razonamiento. Tendemos a pensar que fue más producto del pánico que de un cálculo juicioso o muy medido. Sin perjuicio de que lo que ocurrió ayer con las bolsas, más allá de que tuvo una magnitud fuerte, ya venía sucediendo desde hacía unos cuantos días.
JAE Este escenario continúa hoy aunque con porcentajes de reducción menores que ayer. Las bolsas siguen cayendo en Asia, siguen cayendo en Europa y aunque todavía no abrieron en Estados Unidos ya de algún modo se ve que los números rojos están extendidos por doquier.
PR Es verdad. Por lo tanto, en este momento de volatilidad es conveniente esperar unos días para ver hasta dónde caen las bolsas y si este fenómeno termina siendo transitorio y los inversores empiezan a dar marcha atrás.
Pero el otro elemento interesante de lo que ocurrió ayer tiene que ver con lo que decía Emiliano, que el Banco Central Europeo, durante una reunión de fin de semana, y previendo que el lunes iba a ser un día volátil, anunció una medida realmente importante de compra de bonos españoles e italianos. Los bonos de esos países se valorizaron ayer y el riesgo país de España e Italia registró una caída muy significativa.
JAE Sí, fenómeno que también se extiende al día de hoy, aunque con porcentajes menores, porque los bonos de Italia y España también están subiendo.
PR Exactamente.
EC O sea que esa medida del Banco Central Europeo tuvo éxito.
PR Por lo menos ha tenido éxito en el cortísimo plazo. Porque si uno mira la historia de la crisis fiscal europea, que se hizo evidente en mayo del año pasado, la realidad es que hemos visto un deterioro continuo, con interrupciones de corto plazo en las cuales los mercados reaccionaron positivamente a alguna de las medidas que se tomaron y luego retomaron las tendencias negativas. Si uno mira la evolución del riesgo país de Grecia, España e Italia, todos venían mostrando una tendencia creciente, aunque a distintas velocidades y niveles.
Cada tanto una medida de los gobiernos genera una ola de optimismo, pero pocos días o semanas después estamos peor que antes de los anuncios. No podemos estar seguros de si las medidas que se anunciaron el fin de semana van a ser suficientes para revertir completamente este fenómeno. Nosotros tendemos a pensar que todavía hace falta medidas más claras de resolución de las dificultades que tienen Grecia, Irlanda y Portugal. No solo para terminar de resolver el problema de esos tres países sino para terminar de despejar el riesgo de contagio de Italia y España.
EC Otra de las cosas que ocurrió ayer fue que el dólar subió y paralelamente los inversores no castigaron a los títulos de deuda de Estados Unidos. Pese a que S&P le bajó la calificación, siguieron siendo títulos bien demandados.
PR Sí, eso puede resultar paradójico. En los comentarios que hacíamos ayer de mañana nosotros decíamos que a Estados Unidos le bajaron la nota pero sigue siendo una muy buena nota, y no hay en el mundo otro Gobierno que tenga la combinación de una muy buena nota y la capacidad de absorber una cantidad importante de fondos de los inversores en el mercado. Estados Unidos sigue siendo el activo de refugio más claro que tienen los inversores. Lo vimos en el día de ayer de forma bien patente, los inversores se refugiaron en el dólar, compraron los bonos americanos, y le piden al Gobierno americano tasas que son de las más bajas de la historia. ¿Por qué? Porque sigue siendo un refugio, no hay una opción mejor, y también porque el mercado antes de la rebaja de la calificación no le pedía a Estados Unidos un ajuste fiscal como sí le estaba exigiendo S&P. Ayer vimos todos esos efectos. Estados Unidos sigue ofreciendo la mejor opción de refugio.
JAE ¿Qué tenemos que seguir esperando con respecto al dólar en el plano local?
PR Estamos en días de mucha volatilidad y probablemente esto continúe hoy, sería un poco sorprendente que este pánico se resolviera en un solo día. A nuestro juicio, la clave para la economía mundial y para los impactos en Uruguay sigue estando mucho más focalizada en Europa que en Estados Unidos. ¿Qué nos preocuparía de Estados Unidos? Nos preocuparía mucho que a partir de esta reducción de la calificación de deuda Estados Unidos se embarcara rápidamente en una sucesión de ajustes fiscales fuertes e implementados en el corto plazo. Lo que comentábamos ayer es que Estados Unidos probablemente requiera un compromiso político firme de reducir el déficit con medidas que se implementen dentro de un par años por lo menos. En cambio, descartando que Estados Unidos se embarque en demasiadas medidas de ajuste en el corto plazo para tratar de satisfacer a las agencias calificadoras, probablemente sea mucho más significativo lo que ocurra en Europa. En ese marco, me parece que durante los próximos días vamos a tener que seguir prestando atención a cómo evolucionan las expectativas y la confianza de los inversores entorno al problema europeo.
Por ahora no modificaríamos sustancialmente las proyecciones macroeconómicas que teníamos para Uruguay, que contemplaban que la economía uruguaya va a mostrar un crecimiento más o menos significativo. Quizás tengamos que revisarlo un poco a la baja, quizás la economía mundial, la economía regional y la de Uruguay acusen en un trimestre los efectos de esta parálisis que estamos viendo en los mercados financieros.
Y también mantendríamos por ahora la noción de que el dólar en el mundo va a seguir siendo débil. La economía de Estados Unidos está enfrentando problemas muy significativos de crecimiento y entonces no podría absorber un fortalecimiento importante del dólar. Por supuesto, movimientos de medio peso o de un poco más de medio peso, como tuvimos en estos días, son muy importantes como porcentajes diarios, pero esos valores no cambian lo que estábamos diciendo. Seguimos teniendo un dólar muy barato en términos históricos y nos parece que este es el escenario que probablemente vamos a ver en los próximos meses.
***