Entrevistas

A 15 años de las AFAP: "El sistema ha demostrado que es solvente en invertir los ahorros de los trabajadores"

A 15 años de las AFAP: "El sistema ha demostrado que es solvente en invertir los ahorros de los trabajadores"

El sistema mixto de seguridad social, que introdujo a las Administradoras de Fondos de Ahorros Previsionales (AFAP), está cumpliendo 15 años en Uruguay. ¿Cómo serán las jubilaciones de los trabajadores de hoy? ¿Cuánto incidió la reforma previsional de 1996 en las jubilaciones? Para contestar a estas y otras interrogantes, En Perspectiva consultó al presidente de República AFAP, el contador Luis Costa, y a la directora de esa administradora, la economista Jimena Pardo. Por un lado, Costa opinó que "hay bastante desconocimiento" porque "los temas financieros son bastante arduos para la gente". Ante la pregunta de por qué no hay más inversión en los sectores productivos, el presidente de AFAP sostuvo: "Invertimos todo lo posible en el sector productivo, el problema es que el fondo ha llegado a tal magnitud que el mercado de capitales uruguayo es muy chico. Puede ser que en porcentaje represente poco, pero ha sido muy importante en varios proyectos". Por su parte, Pardo sostuvo que "el sistema [de las AFAP] se ha ido fortaleciendo y ha demostrado que es solvente en lo que vino a hacer, que es invertir una parte del ahorro del trabajador".


(emitido a las 10.06 Hs.)

EMILIANO COTELO:
¿Cuántas veces pensó en el momento en el que le tocará jubilarse? ¿Y cuántas veces pensó en cuál será el monto de su jubilación?

El sistema mixto de seguridad social que se instrumentó en nuestro país en 1996 introdujo las administradoras de fondos de ahorros provisionales, más conocidas como las AFAP.

Desde entonces ya han pasado 15 años. ¿Sabemos bien qué son las AFAP? ¿Conocemos los trabajadores cómo funcionan? ¿Qué expectativas tenemos sobre la pasividad que vamos a recibir en un futuro cuando nos retiremos? Más en general, ¿qué balance puede hacerse de estos 15 años del sistema mixto de seguridad social?

El tema da para bastante, hoy vamos a enfocarlo con el presidente de República AFAP, contador Luis Costa, y la directora de esa administradora, economista Jimena Pardo.

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
Empecemos hablando de números para ir a las preguntas más generales. En setiembre veíamos que, producto de la crisis internacional y la inestabilidad financiera, los ahorros de todos los que aportamos, que somos cerca de un millón de personas, se redujeron un poco más de 8%; 7.240 millones en total.

Para empezar sería bueno explicar por qué este dato muy coyuntural que se ha conocido recientemente y que tiene que ver con el mundo, con lo que está pasando fuera.

LUIS COSTA:
La noticia puede sonar fea, pero lo que motiva esa baja del Fondo de Ahorro Previsional (FAP) es el hecho de que momentáneamente, producto de la crisis internacional, el valor de los títulos uruguayos (bonos o letras de tesorería) ha descendido con relación al precio que tenía antes, y como una buena parte del FAP está invertido en esos bonos, se refleja la baja que han tenido.

Esto ya ha sucedido en otras ocasiones y en forma muchísimo más importante. En el 2002, cuando la crisis propia del Uruguay, la baja fue muy importante. También en el 2008. El inicio de esta crisis que se ha extendido en forma de W hizo que el fondo bajara momentáneamente. Traje a colación esos dos ejemplos porque la recuperación fue mucho más rápida de lo que esperábamos, y seguramente así va a ser también ahora.

Siempre tratamos de transmitirle a la gente que lo importante no es lo que pase en un mes concreto, sino lo que pase en toda la vida en que está ahorrando el trabajador, y como todos sabemos, en Uruguay hay que ahorrar como mínimo 30 años para poder jubilarse. Eso es lo importante, lo que pase en esos 30 años.

JAE - La fotografía de 2008, por ejemplo, que también significó una reducción importante de los ahorros, generó un gran revuelo de mucha gente que recién se enteraba de que esto podía pasar, que los ahorros previsionales podían reducirse producto de un contexto internacional adverso.

¿Cuánto entienden que la gente conoce que hace su AFAP y se preocupa por su jubilación?

LC - Creemos que hay bastante desconocimiento, los temas financieros son bastante arduos para la gente. Por eso en estas oportunidades que tenemos intentamos explicarlo. Sabemos, por algunas investigaciones que hemos hecho, que el desconocimiento es bastante grande, hay gente que dice: "Yo pensé que guardaban la plata en una caja y la dejaban quieta, no se hacía nada con ella". Tratamos de trasmitirle que el sentido del sistema es hacerla crecer, invertirla todo el tiempo.

JIMENA PARDO:
Cuando empezamos con las entrevistas siempre tenemos que recapitular qué es el sistema mixto porque la gente no lo tiene claro. En Uruguay, a diferencia del resto de América Latina, el sistema es bien mixto, porque la persona siempre aporta al Banco de Previsión Social (BPS), y además, voluntariamente si a la fecha de hoy gana menos de 24.709 pesos, puede elegir una AFAP, u obligatoriamente si gana más de eso, elige una AFAP.

La función de la AFAP en Uruguay, a diferencia del resto de América Latina, es complementar al BPS. No lo vino a sustituir, vino a complementarlo. Ahora aporto el 15% de mi sueldo nominal por ley, no importa si tengo o no AFAP, y lo que cambia cuando elijo una AFAP es cómo se distribuye ese 15%. Una parte va al BPS para contribuir en el sistema solidario a pagar las jubilaciones de los actuales jubilados; ese compromiso se basa en que mañana mis hijos con sus aportes van a pagar mi jubilación.

Y por la parte de la AFAP tengo una cuenta a mi nombre, que nadie puede tocar, que es inembargable y que si no da origen a un beneficio para mí tiene que dar origen a un beneficio para algún heredero mío. Por ejemplo, si yo fallezco y no tengo beneficiarios de pensión, el fondo es heredable. O me puedo jubilar a los 65 años de edad sin requisitos de años de trabajo. Esto es muy importante para aquellas personas que no cotizan continuamente a la seguridad social.

EC - ¿Cómo es este último punto?

JP - Por la AFAP uno puede jubilarse a los 65 años de edad sin requisitos de años de trabajo. Recordemos que para generar causal por la AFAP uno tiene que generar causal por el BPS. La otra forma es, a los 65 años, aunque no haya juntado los años que son necesarios para jubilarse por el BPS, venir a la AFAP y con el único requisito de mi cédula de identidad tramitar mi jubilación por ahorro individual. Obviamente, si aporté poco va a ser poco, si aporté mucho va a ser mucho.

EC - Llevemos el ejemplo al absurdo, supongamos que yo aporté un solo mes en mi vida.

JP - Le va a dar una renta de nada, pero la puede tramitar.

EC - Supongamos que aporté a la AFAP un solo mes en mi vida, por las circunstancias que fueran. A los 65 años igual voy a la AFAP y tengo una determinada suma de dinero que voy a poder cobrar.

JP - Por ejemplo, para un joven que hoy empieza a trabajar con alrededor de 6.000 pesos de sueldo y que aporta alrededor de 20 años –dependiendo de la rentabilidad, porque este es un sistema que depende de muchas variables–, con una rentabilidad razonable da una proyección del 3%; hasta ahora el promedio anual medido en UR ha sido 9%, arriba del índice medio de salarios y similar a la inflación.

LC - Es muy parejo en el largo plazo. Y esto es a los 15 años.

JP - La rentabilidad es 3%, y la renta a los 65 años estaría llegando al 20% de su sueldo de ese momento. Es una estimación, porque los cálculos no son verdades reveladas, dependen de muchos parámetros, pero al día de hoy es lo único que la persona tiene para resolver. Eso y algunas otras ventajas que puede tener.

Recapitulando este concepto del sistema, tenemos que tener claro que lo que la AFAP hace es invertir una parte del ahorro del trabajador para tratar de acercarlo a su sueldo en actividad. Cuánto lo va a acercar va a depender de cuánto la persona elija retrasar su retiro, si es que configuró causal; si se jubila más tarde siempre es mejor, en todos los sistemas, y más cuando las poblaciones nos ponemos más viejas, se premia el retraso del retiro.

Pero volviendo al tema de la crisis y lo que es hoy el fondo, si miramos hoy el fondo, a pesar de esta baja coyuntural, primero que la mayoría son títulos públicos, no son títulos de Tanganica, y el Estado uruguayo siempre cumple. Su valor nominal es 100 y el Estado siempre paga 100. O sea que esas variaciones de valor que estamos viendo son las que se dan en el precio de mercado de los bonos.

Segundo, aun en el 2008, cuando se registró otra caída coyuntural, si uno miraba el valor del fondo, la mayor parte siempre es rentabilidad y la menor parte es aporte. Si uno lo mira al día de hoy, el 38% son aportes y el resto es rentabilidad que se le agregó a ese aporte por el trabajo de la AFAP. Digo esto porque lo importante es saber que puede haber caídas coyunturales, pero todas ellas van contra la ganancia que se agregó, nunca contra el aporte. La gente recibe el estado de cuenta y puede chequear y preguntar, ¿qué pasó acá? Y uno le puede dar la explicación. Eso es lo que tiene de cristalino el sistema.

JAE - Cerca del 80% de los fondos administrados por las AFAP está en títulos del Estado. La pregunta que surge y que se reitera cada tanto es: ¿por qué no se invierte más en sectores productivos?

LC - Invertimos todo lo posible en el sector productivo, el problema es que el fondo ha llegado a tal magnitud que el mercado de capitales uruguayo es muy chico. Puede ser que en porcentaje represente poco, pero ha sido muy importante en varios proyectos.

JAE - ¿Por qué es todo lo posible? Tengo entendido que por ley el porcentaje es mayor, bastante mayor de lo que efectivamente hoy las administradoras de fondos invierten. ¿Dónde está el límite?

LC - En la demanda. En la oferta tenemos los fondos y la reglamentación para hacerlo. El fondo, que se maneja entre las cuatro AFAP, actualmente tiene más de 7.200 millones de dólares, y la inversión más grande que hubo en Uruguay fue en el aeropuerto de Carrasco, 86 millones de dólares. El porcentaje es muy chico, 86 millones de dólares en 7.200 millones de dólares, pero es muy importante para el Uruguay.

EC - Usted dice que las AFAP invirtieron en el aeropuerto de Carrasco.

LC - Sin duda.

EC - Ese es el ejemplo de mayor inversión.

LC - Exacto.

EC - ¿Cuánto fue?

LC - Creo que fueron 86 millones en su momento. Y ha habido otras muy importantes, hace pocas semanas se emitió un fondo de tierras y forestal muy importante, 50 millones de dólares, participamos activamente. En todo lo que se ha podido, porque ha surgido el proyecto, se ha realizado. En porcentaje puede resultar poco, pero en este momento, exactamente ahora, debe de haber más de 450 millones de dólares en proyectos de infraestructura, productivos u otras actividades.

EC - Cuando se creó el sistema mixto, uno de los tantos argumentos a favor de la instauración de las AFAP era que iban a promover el desarrollo del mercado de capitales en Uruguay. ¿Lo han promovido?

LC - Creo que sí.

EC - Es decir, ¿sin las AFAP el mercado de capitales sería más chico? Punto uno. Punto dos, ¿qué pasa que no han logrado tanto?

LC - Por un lado, sí se ha desarrollado, ha surgido una cantidad de nuevos lanzamientos o desarrollos que estoy seguro de que no habrían salido si no estuviera este fondo institucional tan importante para invertir. De cualquier manera, el hecho es que la cantidad de proyectos disponibles para invertir no es tan representativa con relación al fondo.

EC - ¿Por qué? ¿Ustedes tienen una interpretación?

JP - Recordemos que en estos 15 años los últimos años que la economía uruguaya ha sido muy dinámica, ha habido más proyectos. Las empresas financian dinero para invertir. Se lo pueden pedir a un banco, pueden financiarlo con ahorros propios o pueden pedírselo a una AFAP. Las empresas hacen eso cuando les va bien o cuando tienen perspectivas de que van a tener una actividad que les va a repagar la inversión. Durante estos 15 años la economía uruguaya atravesó distintas fases que por algún motivo hicieron que no fuera suficientemente dinámica o atractiva.

En ese sentido me gustaría contestar tu pregunta. Nosotros no nos podemos hacer cargo de esa afirmación, llegamos a esta tarea en el 2005, y lo que tenemos clarito es que la AFAP ha hecho bien lo que para nosotros tiene que hacer, que es complementar, mediante invertir una parte del ahorro del trabajador, la jubilación del BPS, lo va a hacer bien. En eso demostró que es buena, pasó 2002 y 2008, incluso en el 2002 había un banco que era propietario de una AFAP que se fundió.

JAE - El Banco de Montevideo.

JP - Ese fondo pasó a ser administrado por el Banco Central del Uruguay (BCU) y los trabajadores no sufrieron ningún deterioro. Porque una cosa es la administradora y otra cosa es el fondo del trabajador. En ese sentido el sistema se ha ido fortaleciendo y ha demostrado que es solvente en lo que vino a hacer, que es invertir una parte del ahorro del trabajador. Es como si el BPS tuviera reservas financieras propias –que no las tiene– y contratara un agente profesional de inversión. Esa es la única tarea de la AFAP. Si además contribuye con el mercado de capitales, bienvenido sea, pero no es que sea condición necesaria y suficiente. En todo caso hay fondos que si la gente los pide de la manera adecuada puede demandar.

JAE - De la audiencia llegan preguntas muy llanas pero muy buenas. Por ejemplo esta: "¿Por qué tenemos que depender de los avatares del humor de los mercados cuando nos manejamos con el dinero cada uno en forma directa?". Y asociado a esto: "¿Qué garantías tiene la persona que se va a jubilar dentro de cinco o 10 años de que no le va a pasar lo mismo ante una eventual crisis dentro de cinco o 10 años?".

LC - Lo que hemos planteado, y seguramente se hará en el futuro cuando se torne más necesario, es separar a las personas que están próximas a jubilarse en un segundo fondo que no esté sujeto a este tipo de variaciones. Lo importante es que durante el período de acumulación vaya obteniendo rentabilidad y vaya creciendo su fondo, y cuando esté a cinco años de la fecha de retiro empezar a pasar su fondo a otro que no esté sujeto a esos avatares. Así fue en Chile. Chile fue pionero, ya lleva 25 años con el sistema, a los 18 años de funcionamiento creó el bifondo para las personas más cercanas al retiro. Obviamente, en Uruguay tienen que correr 30 años para jubilarse, estamos lejos de que empiecen a jubilarse las personas, hay tiempo para hacer ese bifondo. En ese caso se va pasando el fondo de las personas que están cerca del momento de jubilarse a ese fondo que no está sujeto a estas variaciones, pero mientras tanto le permitió obtener buena rentabilidad e ir acumulando.

JAE - O sea que hay una solución, una especie de garantía que forma parte de los planes del sistema.

JP - Requiere ley y se está planificando.

***

JAE - Hay muchas preguntas que redondean esta primera parte de la entrevista.

Por ejemplo, dice Diego: "Ustedes dicen que la rentabilidad es del orden del 60%. ¿Quiere decir que si yo tenía 100 en mi cuenta ahora debo tener 160?".

JP - Si se afilió en el 96, sí. Eso es mirando el fondo desde el inicio hasta ahora. Obviamente, si la persona se afilió ayer o anteayer no.

EC - Repasemos cuál era el concepto: del total del fondo...

JP - De los más de 7.200 millones de dólares, el 38% es aporte y el resto es rentabilidad o valor que se les agregó a esas cuentas.

EC - Es lo que ese dinero ganó trabajando.

JP - Exactamente, siempre que uno se haya afiliado en el 96. Si se afilió hace tres años, esa cuenta no vale, porque para generar una rentabilidad razonable una persona tiene que estar 30, 35 años aportando, en los primeros tres acumula algo de capital y la cuenta se empieza a ver cuando pasa el tiempo.

LC - De los 7.200 millones de dólares, 5.000 millones son utilidad y rentabilidad que se obtuvieron invirtiendo los aportes del trabajador.

EC - Repasemos, ¿invirtiendo en qué? ¿En qué se invierte?

LC - Procuramos la mayor diversificación por aquello de no poner todos los huevos en la misma canasta. Hay una buena cantidad invertida en papeles del Gobierno uruguayo, que son muy confiables y han dado muy buen resultado. Después todo tipo de inversión para la que estamos habilitados, con mucha seguridad; tiene que pasar por el BCU, ahí dicen autorizan a participar, tiene que ser de oferta pública, con calificación de riesgo. Siempre muy controlado, pero muy diversificado. Empresas que se ha financiado: Conaprole, Isuza, Fanapel, la construcción de la terminal de Tres Cruces y el shopping, el aeropuerto de Carrasco, el hipódromo de Maroñas, el hotel Conrad, la Corporación Vial y reparación de rutas. En el aspecto productivo el fondo de la actividad lechera, el fondo de la actividad arrocera, UTE... una cantidad impresionante de distintas actividades que se han potenciado con el ahorro de los trabajadores uruguayos, lo cual está muy bueno.

EC - ¿En todos esos casos lo que han hecho las AFAP es comprar títulos de deuda, o también han sido accionistas? ¿Han entrado como accionistas en alguna de estas empresas?

LC - En el caso específico de República AFAP hemos participado como accionistas por ejemplo en el shopping de Tres Cruces y en la terminal, tenemos acciones de Isuza, y creo que hay un ejemplo más de acciones del poco dinámico mercado de capitales uruguayo, en las acciones que se podían negociar hemos participado activamente. Comentaba el reciente fideicomiso de Bosques del Uruguay, que me parece superinteresante porque ahí fueron certificados de participación, o sea que el FAP es dueño de ese fideicomiso, que es dueño de 30.000 hectáreas de campo uruguayo. O sea que, con este mecanismo, los trabajadores uruguayos accedieron a campos uruguayos.

EC - Cuando por otro lado hay fondos de pensión extranjeros que han comprado tierra en Uruguay.

LC - Montones, sí.

EC - ¿Las AFAP uruguayas están invirtiendo fuera del país?

LC - Sí, en el primer Gobierno del Frente Amplio (FA) ya hubo una primera apertura a papeles de organismos multilaterales de los que Uruguay fuera miembro (BID, Banco Mundial, Fondo Monetario...). Así se hicieron muy interesantes inversiones en el exterior, muy controladas, porque esos organismos son muy seguros.

Apenas iniciado el segundo Gobierno del FA se hizo una revisión de nuestras oportunidades de inversión, siempre destacando el hecho de que lo hacía no porque estuviera funcionando mal, sino al revés, porque estaba funcionando muy bien. Se superaba el millón de afiliados, la rentabilidad en estos 15 años había sido muy buena, se habían juntado 7.200 millones de dólares, y había que invertir, porque lo peor que puede pasar es que no estén invertidos. Ahí nos habilitaron no solo a organismos multilaterales de los que fuéramos miembros, porque hay otros organismos multilaterales muy parecidos a los nuestros en Asia, Europa, América Central, la propia Corporación Andina de Fomento, nos permitieron acceder, incluso a bonos de países extranjeros con muy buena calificación. De a poco se ha ido abriendo, porque el fondo ha crecido mucho.

JAE - El presidente Mujica ha preguntado alguna vez: ¿por qué no colocar dinero de las AFAP o de los trabajadores, en la construcción de viviendas, en el Plan Juntos, por ejemplo?

JP - Primer detalle, estamos encantados de invertir en el país si hay proyectos, de hecho estamos esperando las notas de crédito hipotecario, que son un instrumento que se diseñó en el Gobierno pasado, porque bajo la ley que acaba de salir de viviendas de interés social puede haber proyectos para que concretemos finalmente, que es lo único que le falta al fondo.

JAE - ¿Qué quiere decir eso?

JP - Las AFAP no pueden invertir ni prestar directamente, tiene que haber un instrumento financiero que canalice la inversión, por ejemplo un fideicomiso. Entonces necesitamos gente que esté interesada en hacer proyectos, por ejemplo hacer viviendas, que se quiera financiar y haga un fideicomiso. Eso es lo que necesita una AFAP para invertir. Obviamente necesita además un proyecto solvente, que tenga calificación de riesgo, que sea de oferta pública. No es que yo arreglo contigo y... Tiene que salir al mercado, ser transparente y estar autorizado y revisado por el BCU.

Redondeando, la inversión en el exterior que tenemos nosotros es muy limitada, en especial si miramos lo que pueden hacer otras AFAP en el mundo. Nosotros podemos comprar solo bonos de organismos multilaterales y bonos de muy alta calificación.

JAE - No pueden comprar por ejemplo tierras en Paraguay, como hacen otras administradoras aquí en Uruguay.

JP - No, ni acciones de empresas de otros países. Es muy limitado, es el 15% del fondo, podemos comprar 100 títulos públicos uruguayos, el 85 cuando se termine de instrumentar la progresión. Lo importante ahí es que no es antagónico; son más de 7.200 millones de dólares y el fondo crece en promedio en unos 400 millones de dólares por año. Y esto es una presión muy grande para la economía uruguaya, pensemos en un fondo muy dolarizado, como era en el 2002, lo que hubo que hacer para que se desdolarizara y los trabajadores uruguayos no perdieran dinero con un dólar cayendo mucho. Para poner un ejemplo, en un mercado que opera alrededor de 10 millones de dólares por día en promedio, si uno quiere tirar un 1% del fondo en un día al mercado, destroza todo. Lo mismo podría pasar si uno se pone a vender títulos públicos uruguayos.

En ese sentido, descomprimir el mercado local es muy importante. No es simpático, a la gente no le gusta, a los políticos no les gusta, a nadie le gusta. A la gente le parece mal, y es razonable que así sea, si uno dice "compro un bono de Estados Unidos, no lo coloco en Uruguay". Lo que tiene que saber es que hay plata para colocar en Uruguay y además sobra, ese es el problema. Y como es plata de su jubilación, lo peor que le puede pasar es que no esté colocada. El mundo nos gusta o no nos gusta, pero es el mundo que tenemos hoy y tenemos que tratar de adaptarnos dentro de lo que sea lo mejor para Uruguay. Siempre va a haber dinero para buenos proyectos, como ha habido hasta ahora. De todos esos proyectos que mencionó Luis las AFAP han comprado la mayoría, y si no han comprado es porque no pudieron entrar en la licitación. Pero de los buenos ha habido plata siempre. El tema es que a veces faltan proyectos, eso es lo que tenemos que cuidar.

JAE - Saliendo de este dilema que enfrentan ustedes, ¿cuánto sirvió este sistema de administradoras de fondos en estos 15 años? ¿Cuánto aportó al Uruguay? ¿Qué consideran ustedes como hechos sobresalientes?

LC - El hecho sobresaliente podemos dividirlo en dos, uno es que estamos solucionando en parte la presión que los cambios demográficos le estaban imponiendo al sistema único de Uruguay que era el de solidaridad intergeneracional. El hecho de que en estos 15 años el sistema que se instauró en el 96 haya funcionado muy bien y haya ahora este fondo de 7.200 millones de dólares indica que las futuras generaciones del Uruguay van a tener un soporte mejor para enfrentar ese desafío que implican los cambios demográficos.

EC - La clave para eso no fue solo la introducción de las AFAP; la introducción de las AFAP forma parte de una ley –la que hoy está cumpliendo 15 años– que incluía otras disposiciones.

LC - Sin duda. Uno de esos casos fue el ajuste del otro sistema. En el sistema de solidaridad intergeneracional que lleva adelante el BPS hasta el 96 se pagaba el 60% del promedio de sueldo de la persona. Ahí hubo que ajustarlo al 50%, o sea que también se tomaron medidas de ajuste del otro sistema.

EC - Y se levantaron las edades de retiro.

JP - Para las mujeres de 55 a 60, y se creó la historia laboral, que no es nada menor.

EC - Se creó la historia laboral, que implica otro cambio importante desde el punto de vista de cómo se construye la pasividad llegado el momento del retiro.

JP - Exactamente. En Uruguay estaba construido el concepto –y estaba bien porque así funcionaba– de que uno trabajaba y se jubilaba siempre, no necesariamente aportaba. Lo llamativo es que en Uruguay el sistema se llama contributivo, esto es, uno se jubila si contribuye. Eso es mucho más cierto a partir de la historia laboral del 96, por ejemplo mis hijos se van a jubilar si en su historia laboral tienen probados los años de servicio. Por eso en este sistema es importante la causal jubilatoria a los 65 sin requisito de años de trabajo, eso permite complementar muy bien el pilar del BPS.

De nuevo, este es un pilar que viene a complementar al otro. Tú preguntabas en qué beneficia; te diría que cuando la población envejece buenas noticias en jubilación no hay, técnicamente te lo puedo decir, no son simpáticas las noticias.

EC - Ahí está el debate en Europa en este momento.

JP - Exactamente. En Europa se está viendo hoy que con sistemas con un solo pilar, como sería acá el del BPS, hay tres soluciones que derivan todas en bajarle la prestación a la gente: o subo la edad de retiro y la gente se jubila más tarde, o directamente le bajo la prestación que va a cobrar, o le pido que aporte más. Recordemos que además en Europa al día de hoy son sistemas superavitarios. Ellos todavía tienen reservas. No es el caso de Uruguay. Estamos muy contentos de que exista el BPS, nunca quisimos que desapareciera, y de hecho el BPS sigue siendo el administrador de la seguridad social, administra la historia laboral, establece las causales, pero tenemos que decir que eso para la sociedad del futuro y para nuestros hijos era una presión muy grande si fuera un único sistema de reparto.

JAE - Parecería que al revés no es la misma impresión. El BPS ha señalado, pese a que es socio de República AFAP, que hay cosas que hay que cambiar. Por ejemplo, en el propio programa de gobierno del FA se establece que hay que eliminar progresivamente el lucro de las AFAP. ¿Cómo ven esto de acuerdo con lo que están señalando?

LC - Según hemos podido apreciar, lo que se intenta, como en el caso de muchos otros países, es que la comisión de las AFAP tienda a descender, como está haciendo República AFAP. Cuando asumimos en República AFAP hace seis años, la comisión que se cobraba en el momento en que llegaba el aporte –se cobra un porcentaje sobre el sueldo por el que se aporta a la AFAP– era un 1,578%, y nosotros hicimos un proceso de rebaja gradual de la comisión cada seis meses, controlando mantener la calidad de los servicios, manteniendo las reservas, manteniendo toda la fortaleza de la empresa, y estamos en 1,03%. O sea que ha habido una rebaja muy importante.

Esta rebaja no ha sido seguida por las AFAP privadas, que están exactamente en el doble –la que está más baja está en el doble que nosotros–. Creo que buena parte de esa prédica era tendiente a bajar la comisión de las AFAP; nosotros ya hemos cumplido nuestra parte.

JAE - ¿Se puede ir a cero como se pretende?

LC - No, eso no es posible.

JAE - Porque por otra parte las AFAP ganaron 30 millones en el último año las cuatro en conjunto.

JP - Es importante aclarar cuando se maneja ese número –es bien difícil de explicar técnicamente, trataremos de hacerlo sencillo– que las AFAP tienen por ley la obligación de tener una reserva que sus accionistas no pueden retirar, que se cuenta dentro de esa utilidad que dijiste. República AFAP tiene lo que la ley establece como reserva especial, que está dentro del balance de la administradora a los efectos de si mañana hay un problema y hay que compensar la rentabilidad, porque hay una normativa que indica que la tiene que llevar a la rentabilidad promedio del sistema. Esto pasó, por ejemplo en el 2008 Unión Capital e Integración tuvieron que compensar, sacaron de la reserva especial y pusieron en la cuenta de cada persona para llevarla de la rentabilidad que estaba teniendo a la rentabilidad promedio del sistema.

Para esto es la reserva especial, y eso forma parte de esos 30 millones de dólares que sí ganaron sus accionistas pero no los pueden retirar, por ley siguen en la AFAP. Por ejemplo, República AFAP ganó el año pasado alrededor de 10 millones de dólares, recordemos que República AFAP es propiedad del BROU, el BPS y el Banco de Seguros del Estado, o sea que en teoría esos 10 millones de dólares se distribuyen entre ellos tres. Pero no se distribuyen 10, porque la reserva especial hay que dejarla en la AFAP, o sea que se distribuyeron alrededor de cuatro millones de dólares. Esto para que tengan una idea de cuánto pesa ese encaje de esta actividad.

JP - Tú preguntabas por las ventajas. Por un lado, me da la impresión de que el Uruguay ha hecho un adelanto, en el sentido de que en Uruguay hoy no es una preocupación, como en Europa, el tema de las pensiones y las jubilaciones, porque tomamos un camino hace 15 años y ha andado bien.

Por otro lado, tú decías que las AFAP tienen el 80% invertido en títulos públicos. Como mucha gente dice, podría haberlo hecho el BPS. Pero el título que debe de haber dado más en Uruguay en dólares puede haber andado en 6%, y la rentabilidad en estos 15 años en dólares de las AFAP es 12, el doble del mayor valor que dio uno de los títulos. El tema no es comprar un título y quedárselo, sino cuándo comprarlo, cómo hacerlo, cómo venderlo, cómo manejarlo.

***

Transcripción: María Lila Ltaif

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