(emitido a las 7.37 Hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
Pequeños productores del noreste de Canelones se movilizaron en el centro de Montevideo, en la zona del monumento a El Gaucho, a una cuadra del Ministerio de Ganadería.

La idea fue llamar la atención de las autoridades acerca de la situación que viven algunos productores de tomate en estos momentos. Pequeños productores regalaron tomates en reclamo de mayor apoyo estatal en la industrialización.

Estamos con Daniel Ponce de León, dirigente de Copronec, la cooperativa de productores que se formó en 2005 nucleando a productores del noreste de Canelones y que ha impulsado esta movilización.

¿Quiénes integran la cooperativa?

DANIEL PONCE DE LEÓN:
La integran productores de la zona que está en el límite con Lavalleja, o sea la zona de Tala, Migues, Tapia, San Jacinto. Entre la ruta 11 y el límite de Lavalleja, sobre el eje de la ruta 7 hacia el costado.

JAE – ¿Cuántos productores son?

DPL - Hay unos 150 productores asociados a Copronec, que han trabajado en distintos planes, no sólo tomate, sino también para exportación de cebolla y calabacín.

JAE – Para ubicarnos, cuando hablamos de pequeños productores, ¿qué extensión promedio tiene un productor de esta cooperativa?

DPL - Hay desde productores que tienen una o dos hectáreas a productores que tienen 20 o 30. Pero son productores de un perfil económico muy bajo, el 90% era perfil Uruguay Rural. Para explicarlo mejor, unos 50 de estos productores han sido atendidos en estos últimos años por Mevir haciendo lo que se llama las Unidades Productivas, o sea han construido su casa con apoyo de Mevir en el campo.

JAE – Es una zona que fue muy golpeada por el cierre de Rausa, era una zona muy remolachera en su momento, y a lo que hay que agregar también que hasta hubo efectos negativos desde el punto de vista de la calidad de los suelos. Todo eso de algún modo ubica a un tipo de productor muy especial, tal vez no son los productores más pujantes que tiene la zona granjera de Canelones.

DPL - Sí, exactamente. Se ha ido mucha gente, los que han podido.  A esta altura estamos en la mitad de la población que había en el año 2000. Tú mencionabas a Rausa, pero también era la zona que tradicionalmente producía el tomate para salsa en el país, el 80% o 90% venía de esta zona cuando estaba Calforu y también para otras fábricas.

JAE – Vamos a lo que explica hoy La Diaria. Dice que con el apoyo y el asesoramiento de organismos estatales la cooperativa Copronec logró en 2009 la asociación con la fábrica procesadora Vulcania, de la familia Pitzer, ubicada en las proximidades de Barros Blancos, para tener su propio proyecto industrial. Se importaron maquinarias para producir tomate aséptico con un envasado especial que lo mantiene libre de gérmenes, que no requiere agregar conservantes, que no es elaborado en Uruguay y con el cual se podría sustituir importaciones. Copronec adquirió el 55% del emprendimiento y Vulcania el 45% formando una sociedad anónima, Madanol, que comenzó a procesar en la zafra 2010-2011. Con este escenario, tomando en cuenta que ya han puesto pata en la industrialización del tomate, ¿por qué ahora los productores que integran la cooperativa se movilizan en el centro de Montevideo y reclaman más apoyo?

DPL – Precisamente, el tema es que esta industria tuvo problemas. Sobre todo la maquinaria, es una línea de maquinaria que costó 960.000 dólares, que vino con defectos en la fabricación. En la zafra pasada se industrializó; por primera vez en Uruguay se hizo tomate envasado aséptico en esos tambores de 230 kilos. Hay que destacar que Uruguay importa las tres cuartas partes del tomate que se usa para salsa, o sea que se importa el equivalente a unos 25 o 30 millones de kilos de tomate. Lo que queremos es una oportunidad de producir para que la gente pueda mantenerse en el campo, que da para que produzcan unos cuantos productores más.

¿Qué pasó? Hubo un déficit. Ha habido apoyo para esto, pero hubo un déficit y lo que se plantea es que a la vez hay que hacer una serie de reparaciones en las máquinas, hay que terminar de prepararlas para que la zafra ande bien, para que las máquinas produzcan bien. Hemos tenido asesoramiento y estas máquinas son adecuadas. Del tomate que se produjo, por ejemplo, se le vendió a Conaprole 60 toneladas de concentrado, el equivalente a 400.000 kilos de tomate. Por primera vez en la historia en el Uruguay, en los envases tetrapack del tomate que vende Conaprole se pone "tomate uruguayo". Se ha logrado una calidad muy buena y no depende solamente de comprar en el exterior.

JAE – ¿Pero cómo es que se llega a esta situación, a este reclamo de mayor apoyo, tomando en cuenta que ya hay un aporte del Fondo de Reconversión y Fomento de la Granja de entre 60 y 70 centésimos por kilo de tomate?

DPL - El tema es que si a un enfermo que necesita diez litros de oxígeno por minuto le das siete se muere. En este caso pasa algo similar. Venimos en conversaciones y planteando la situación desde principios de año, pero en los últimos meses venían diciéndonos "ustedes metan para adelante que los apoyos están, planten tranquilos, produzcan tranquilos". Los apoyos que se habían estado previendo se han ido demorando de tal manera que el tomate ya está pronto. No todo, por supuesto, porque lo que está produciendo la cooperativa para este año son dos millones y medio de quilos de tomate. Pero ya hay tomate pronto y las máquinas no están preparadas porque no han llegado a tiempo los fondos comprometidos. Hace dos meses se nos dijo que en 30 días estaban los fondos, y todavía no están. Por ejemplo, para hacer el mantenimiento de la envasadora aséptica tienen que venir de Argentina, porque es la primera vez que se hace. Es una máquina hecha por la firma Aeropac, que se dedica a la aviación. Es una automatización muy sofisticada, es la primera máquina que hay en el país...

JAE – Me adelanto a preguntar algo que se pregunta la gente: ¿por qué el Estado y los contribuyentes tienen que subsidiar a una producción o a un grupo que no es sustentable, que no llega a cubrir sus costos, que en definitiva puede interpretarse no es eficiente? ¿Por qué el Estado debería o le convendría eventualmente poner plata para que este emprendimiento continúe?

DPL - Yo en principio te digo como contra pregunta: ¿por qué el Estado apoyó y los contribuyentes pagaron la leche más de lo que se pagaba para la industria, de modo de apoyar a construir una empresa que es orgullo de los uruguayos como Conaporole? ¿Y durante cuántos años lo hizo? Pero se construyó competitividad.

En este caso es una producción mucho más chica pero es lo mismo, estamos tratando de construir competitividad. Cuando empezamos en 2006 estos productores normalmente tenían un emprendimiento de 10.000 quilos por hectárea, el año pasado fue 45.000 quilos por hectárea y este año nos planteamos que vamos a pasar los 50.000 quilos.

Los tomates son tres meses, el resto del año hay una serie de cosas que se pueden hacer con unos cuantos excedentes de la granja. No digo todos los excedentes porque no tiene la capacidad para eso pero, por ejemplo, de la manzana que se tira se puede concentrar la pulpa y envasarla aséptica. Es la forma en que se admite para exportar, de otra manera no se puede exportar. Lo mismo el membrillo, los arándanos. Productores de arándanos nos han estado planteando...

JAE - ...¿Y eso por qué no ocurre?

DPL - Porque estamos empezando, porque fue la primera zafra, esta que viene va a ser la primera en que se va a poder trabajar bien. Por otro lado, como somos productores chicos, en una cooperativa no entramos dentro de la ley de inversiones para que se nos subsidie. A Agronegocios del Plata, que viene a plantar soja, el ministro de Ganadería decía hace un año que se le había dado un subsidio de ocho millones de dólares.

JAE – Por último, ¿cómo evalúan ustedes la movilización de ayer? La crónica de La Diaria hace referencia a la movilización que ustedes llevaron adelante pero también a la demanda de gente que directamente se acercó con cajones a llevarse tomates sin importar lo que estaba en el fondo de la cuestión.

DPL - Hay gente con necesidad y todos sabemos que esas cosas pueden pasar. Lo que se entregaba era en una bolsita, a alguna gente se le dijo que sacara del cajón y sacó diez quilos o más. Eso pasa siempre. Lo que sí hubo fue gente que vive en la zona, que apoya esto y que vino a retirar tomate. Esas cosas pasan en cualquier momento.

Lo que hicimos posteriormente fue ir a Presidencia y dejar una nota que ya habíamos mandado por mail hacía unos cuantos días. Esta vez la entregamos en mano a la gente de Secretaría pidiendo una entrevista con Mujica para explicar bien qué es lo que está pasando.


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