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Diputado nacionalista propone respuesta proteccionista

El diputado del Partido Nacional, Álvaro Delgado, del sector Aire Fresco, dijo a El Espectador que planteará a la Cancillería que Uruguay responda con medidas de licencias automáticas a importaciones de Argentina.


Las empresas industriales que exportan al Mercosur enfrentan problemas crecientes para concretar negocios con Argentina y con Brasil. Reclaman al Gobierno una acción más firme para exigir que se respeten los acuerdos de libre comercio mientras mantienen detenida su producción.

Este lunes se realizaron varias reuniones entre empresarios y dirigentes políticos para recopilar información sobre la situación de las fábricas afectadas.

El ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman, declaró que una misión de su cartera, junto a representación de Cancillería y de Economía y Finanzas, dialogará con Argentina a efectos de poder destrabar las barreras a las exportaciones uruguayas.
 "Estamos ultimando los detalles, incluso con consultas que le haremos a los sectores privados, como para tener el panorama completo y para ver cómo es este nuevo esquema que comienza el 1° de febrero", dijo el jerarca.

El diputado Álvaro Delgado, del sector Aire Fresco, se reunió con industriales y dijo a El Espectador que planteará a la Cancillería que, entre otras acciones, que Uruguay responda con medidas de licencias automáticas a las importaciones que llegan desde la vecina orilla.

"En algunos sentidos sensibles activar licencias automáticas de importación, cosa que Uruguay puede hacer porque está dentro de la legalidad del Mercosur".

Y agregó: "Tenemos que actuar más proactivamente. No sólo reclamar la institucionalidad del Mercosur, sino buscar algunas acciones concretas: plantear una misión comercial de alto nivel en Argentina para tratar el tema comercial; pero esto debe hacerse incorporando a otros ministros. Que no esté solamente el ministerio de Industria, sino la Cancillería y el Ministerio de Economía".

Delgado dijo que este planteo más firme debe estar acompañado por sector privado y trabajadores.

El diputado indicó que coincidía con el presidente Mujica en que "no es segura la institucionalidad del Mercosur, no está garantizada".

 "Creo que aquí hay que poner pausa y revisión de toda la institucionalidad, generar un planteamiento firme de solución de controversias, pero además hay que proponer cosas concretas. Hoy en Argentina hay varios jugando con la patente Moreno, que tiene que ver con el nuevo régimen que empieza a regir este miércoles 1º de febrero, el permiso de autorización previo a importación, que nadie sabe en el Gobierno cómo va a funcionar".


Además el atraso de licencias no automáticas de importación, "hay 147 licencias atrasadas –son 9 millones de dólares- sin contar los negocios que ya no se hicieron porque eran de zafra o porque el cliente ante las trabas ya decidió no hacerlos. A eso le sumamos el anuncio del viernes de Argentina de que van a incluir más productos en licencias no automáticas".

Problemas son tanto con Argentina como con Brasil.

Delgado recibió en su despacho del Palacio Legislativo a Fernando Yannuzzi, dirigente de la cámara de industrias que reúne a las empresas de ropa de cama, mesa y baño (Cameba).

Yannuzzi dijo a El Espectador que los problemas del sector son tanto con Argentina como con Brasil.

"Empresas que integran nuestra cámara y que en 2009 exportaban dos millones de dólares, pasaron a exportar 50.000 dólares en 2011 y en 2012 ya están cancelando los negocios", contó Yannuzzi.

El dirigente sostuvo que no hay argumentos para decir que los productos exportados desde Uruguay incumplen con los requisitos de origen de Mercosur.

"El órgano del Estado que controla que se cumplan los requisitos del origen del Mercosur es el Ministerio de Economía a través de la Secretaría de Comercio, y ellos aseguran que cumplimos perfectamente con el régimen de origen", aseguró.

Como ejemplo, Yanuzzi citó el caso de una compañía que estira el seguro de
paro para sus trabajadores pero que la incertidumbre generada por las barreras regionales impide saber si podrán retomarlos.

"Una empresa de 110 empleados hoy está con 30, de los cuales la mayoría está en el seguro de paro. Todos estamos en esa incertidumbre de nuestro futuro. Si nos cierran el mercado argentino y brasilero, no hay motivo para que existan tantas fábricas en Uruguay", expresó.