Un comunicado, la Cancillería de ese país informó que la administración de Cristina Fernández inició un "proceso acusatorio" contra el bloque comunitario, en donde denuncia que "el proteccionismo contra el biodiesel que se ha venido implementando en los mercados europeos se vio seriamente agravado el 21 de abril de 2012", fecha en que España  "prohibió de hecho la importación extracomunitaria" de este combustible.


El escrito de la oficina dirigida por Héctor Timerman señaló que la decisión del bloque "deja al producto de origen argentino, líder mundial por eficiencia y costos, fuera del mercado".

Llamó la atención sobre que "los principales proveedores de biocombustibles a España y a la UE son países en desarrollo".

Para el Gobierno argentino "se trata de una medida que, como otras tomadas por décadas en el ámbito de la UE y los países desarrollados, tienen por efecto impedir o limitar el ascenso en la cadena de valor de nuestras industrias, limitando el rol de los países en desarrollo a proveedores de materias primas".

Las mencionadas trabas al ingreso de productos argentinos a la UE fueron denunciadas tiempo atrás en otros organismos, como la FAO, en el sentido que "los países más poderosos abusan de su posición dominante en perjuicio de los países en desarrollo".

El comunicado agregó que la decisión de la UE se suma a otros hechos por parte de algunos países "que han liderado una ofensiva contra la política comercial externa argentina".