El gobierno kirchnerista salió al cruce en las últimas horas del voto de censura decidido por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y pidió una reunión "extraordinaria" de la Junta de Gobernadores para que "examinar la política del organismo" hacia ese país y su actuación en el origen de la crisis financiera y económica mundial.

En un comunicado del Ministerio de Economía argentino se señaló que la decisión del FMI tiene un claro objetivo "ejemplificador" y pone de manifiesto un "trato desigual y de doble stándard en su relación con ciertos países miembros"•.

El viernes pasado el FMI censuró por primera vez en su historia a uno de sus integrantes – Argentina – y le dio plazo para que reforme sus estadísticas de inflación y de Producto Bruto Interno antes del 29 de setiembre.

Es que tras saldar cuentas por más de US$ 9500 millones en 2006,  Argentina rechaza someterse a cualquier evaluación por parte del fono y prometió nunca más requerir su apoyo financiero.

Según el gobierno de Fernández, el organismo está "castigando" a su país, que con su política ha sido un "mal ejemplo" para el sistema.

De todas formas Argentina anunció en las últimas horas que medirá la inflación con un nuevo índice a nivel nacional.

El ministro de Economía Hernán Lorenzino señaló en ese sentido que "ni las provincias ni ninguna consultora privada " tienen los medios para hacer una medición sustentada científicamente".

Mientras que en 2012 la inflación oficial fue de 10,8%, analistas privados aseguran que el IPC por lo menos duplica esa cifra.

Fuente: El Cronista