¿Cómo se están comportando las principales variables del sistema bancario en el arranque de 2013?
Análisis de la economista Tamara Schandy, de la consultora Deloitte.
(emitido a las 8.43 Hs.)
ROMINA ANDRIOLI:
Según los últimos balances que publicó el Banco Central, los bancos uruguayos siguen ganando volumen de negocios pero registraron pérdidas en el primer mes de 2013.
Con estos nuevos datos sobre la mesa, les proponemos poner el foco del espacio de análisis económico de hoy en analizar cómo viene siendo la marcha de las principales variables del sistema bancario en los últimos meses y cuáles son los principales desafíos que están planteados para el resto del año. En los próximos minutos, conversamos sobre este tema con la economista Tamara Schandy, de la consultora Deloitte.
Quizás antes de entrar en los datos específicos de enero sea bueno comenzar dando un panorama general de las principales tendencias que hemos visto en los últimos años a nivel del sistema bancario uruguayo. Por ejemplo, ¿A qué ritmo viene creciendo el negocio? ¿Cómo han sido en general los resultados para los bancos?
TAMARA SCHANDY:
Cuando hablamos de volumen de negocios hablamos en general de créditos y depósitos. Considerando la suma de ambos y midiendo toda las cifras en millones de dólares, el crecimiento el año pasado fue de 13%. Hubo matices a nivel de bancos, pero en general todas las instituciones tuvieron expansiones relativamente importantes, de dos dígitos. Si miramos una perspectiva un poco más larga la verdad es que venimos en un ciclo de expansión bien importante: 2010 y 2011 también habían sido años de mucho crecimiento, con tasas que en el total del sistema habían sido del orden del 15%-20% en ambos años.
A nivel de resultados, sin embargo, han sido años más desparejos. En 2010 los bancos privados en conjunto ganaron 26 millones de dólares, lo cual supone una rentabilidad de menos de 1% sobre el volumen total de activos, es una rentabilidad bastante reducida. En 2011 algunas instituciones ganaron dinero pero en el total de bancos privados el número fue rojo, en 24 millones de dólares. El Banco República (BROU) uvo ganancias y así el global del sistema bancario tuvo una rentabilidad positiva, pero también relativamente chica, también menor a 1% en relación al volumen de activos. Y por último, el año pasado hubo ganancias por 314 millones de dólares repartidos en 116 millones en los bancos privados y apenas menos de 200 millones en el BROU. La rentabilidad sobre activos en ese caso fue 1,1% en el global.
En síntesis, hemos tenido años de mucho crecimiento del volumen de actividad pero no tanta rentabilidad, con años incluso en el que los bancos privados en su conjunto registraron pérdidas.
RA - ¿Cuáles dirías que son los destaques de las cifras de enero en ese marco que comentabas recién?
TS - Los balances muestran que el volumen de negocios siguió creciendo. Hay cierto matiz, sin embargo, entre la evolución de los créditos y la de los depósitos. El saldo de créditos vigentes cayó ligeramente (0,4% en el promedio de los bancos privados y 0,6% en el BROU), mientras que el saldo de depósitos del sistema bancario marcó un nuevo incremento. Concretamente, los depósitos en los bancos privados se ubicaron en algo más de 14.300 millones de dólares (subiendo 4% respecto al saldo de diciembre) y los del BROU sumaron unos 11.800 millones en enero (con un aumento algo mayor de 1%).
RA - ¿Y Cómo interpretan la caída del crédito en enero?
TS - No es demasiado significativa y la verdad es que los datos mensuales tienen bastante variabilidad. En diciembre habíamos visto un incremento muy importante, bastante excepcional, de hecho. Así que no sorprende demasiado ver un aflojamiento en estas cifras de enero. Seguimos pensando que el crédito este año va a seguir subiendo.
RA - ¿Podemos repasar brevemente a cuánto asciende y cómo se descompone el crédito bancario en Uruguay?
TS - Según los balances de enero, los créditos vigentes del sistema bancario eran unos 11.800 millones de dólares. El BROU tiene aproximadamente un 40% de ese total, mientras que el volumen que manejan los bancos privados es de unos 7.200 millones de dólares.
Lamentablemente los balances mensuales de los bancos no contienen una desagregación de esos montos por sectores, pero de otros datos consolidados que publica el Banco Central se puede ver que el crecimiento del crédito está siendo muy generalizado a nivel de ramas. El año pasado, por ejemplo, el aumento promedio del crédito estuvo en el entorno del 20% y cuando uno mira la apertura sectorial en todos los casos, salvo en el crédito al sector público, vemos tasas muy similares, en general todas de dos dígitos.
El crédito a las familias, que es casi el 40% del total, subió 18%, y los préstamos al agro, a la industria y al comercio, que son los que siguen en importancia relativa, mostraron tasas de 20%, 11% y 19% respectivamente.
Otro elemento que quizás vale la pena mencionar respecto a los préstamos es que la morosidad, que podemos mirarla como la proporción de créditos vencidos en el total de las carteras de los bancos, ha tendido a crecer un poco en forma reciente pero igual permanece en niveles muy reducidos en una perspectiva histórica: 1,1% para los bancos privados y 2,2% para el BROU.
RA - Volviendo a los depósitos, el Banco Central también publica datos respecto a la cantidad de clientes de cada banco. ¿Se observan cambios en esa variable? Porque es un dato bien interesante desde la perspectiva de cómo es el ahorro de los uruguayos, y cuánto se usa el sistema bancario.
TS - Es verdad, los datos oficiales incluyen información sobre el número de clientes. No son por supuesto sólo depositantes o ahorristas particulares, sino que el dato contempla además las cuentas de depósitos que tienen las empresas. Ahí hay una primera aclaración relevante para leer el número.
Los datos mostraban que en enero los bancos privados tenían casi 846.000 clientes y el BROU casi 980.000 depositantes, así que uno podría leer que el sistema tenía alrededor de 1.825.000 clientes en enero. Eso supondría un aumento de aproximadamente 10% respecto al mismo conteo un año atrás.
Pero a nosotros no nos gustan demasiado esas lecturas, porque lo que realmente se está computando es la suma de la cantidad de cuentas individuales que tienen los bancos, sin considerar si una misma persona o cliente tiene más de una cuenta, si trabaja con más de un banco. Por ejemplo, si yo tengo cuenta en Itaú y abro un depósito en Santander, el análisis anterior va a decir que el sistema ganó un cliente, cuando no es así. Yo ya estaba en el sistema.
La información también está abierta por montos, y eso permite sacar conclusiones como que el 80% de los depositantes tiene menos de 5.000 dólares en sus cuentas, o que el cliente promedio tiene poco más de 13.000 dólares. Pero reitero, hay que ser cautos en no sobreleer los números, porque en realidad estamos hablando de cuentas promedio, no de ahorro promedio o depósitos promedio de las personas.
RA - ¿Qué perspectivas están viendo para el resto del año?
TS - Como decía hace unos minutos, pensamos que los bancos van a seguir buscando expandir el crédito este año. Como en los últimos años, seguimos en un escenario en que las tasas de interés en el mundo están en niveles mínimos y eso hace que los bancos no puedan encontrar niveles de rentabilidad atractivos simplemente colocando el dinero en inversiones financieras. Por otro lado, los costos de los bancos van a seguir siendo altos, sobre todo medidos en dólares si es que el tipo de cambio se mantiene en niveles tan reducidos... Por estas dos razones, los bancos siguen teniendo un imperativo bastante fuerte de aumentar su cartera de créditos para lograr resultados positivos.
Desde el punto de vista de la economía en su conjunto el crédito total sigue siendo relativamente reducido, en torno del 20% del PBI, así que parece haber cierto espacio todavía para que eso suceda a pesar de que ya venimos de varios años de crecimiento fuerte.
De todas formas, también es importante precisar que se espera que este año y el próximo veamos una moderación en la expansión del PBI y que hay varios riesgos internacionales, regionales e incluso locales en el horizonte. Así, aún sin esperar un escenario recesivo ni mucho menos, es probable que los bancos puedan enfrentar nuevos desafíos en materia de cómo gestionar el riesgo de crédito y quizás también una mayor probabilidad de mora.
***