Se trata de un consorcio de Bélgica, uno de Noruega, otro de Corea y España. 

"A fines del año pasado se realizó en primer lugar un llamado abierto internacional a empresas interesadas para construir la planta. Se seleccionó a los cuatro consorcios que presentaban mejores antecedentes, mejor experiencia técnica y mejor respaldo financiero. Luego a esos cuatro preseleccionados se les dio aproximadamente cuatro meses y medio para que construyeran sus ofertas", recordó.

Méndez señaló que las propuestas serán analizadas "por un equipo conformado por 40 técnicos de altísimo nivel de varios organismos públicos que van a analizar con lujo de detalles todos los aspectos técnicos, jurídicos y comerciales". Estimó que, según el cronograma, eso abarque un par de semanas. 

Consultado por la inversión que implica el proyecto, el director nacional de Energía sostuvo que es un aspecto "sensible" el cual "luego de analizar las ofertas se discutirá con las empresas en función de los costos presentados para tomar una definición que sea la mejor posible para nuestro país".

Respecto a cuándo estaría operativa la planta, las obras se extenderían durante dos años, Méndez dijo: "Mientras más rápido este la planta mejor será para Uruguay y su economía".