Análisis de PwC: Peso uruguayo y peso chileno: las monedas más depreciadas de América Latina en lo que va de 2015
Después de lo que ocurrió a fines de enero con el peso argentino y lo que ha ocurrido en Venezuela, en lo que va del año el peso uruguayo y el peso chileno han sido las dos monedas de América Latina que más valor han perdido frente al dólar. Análisis de PwC.
Mauricio Almada: ¿Qué explica esta evolución? ¿Por qué la evolución del dólar en Chile y en Uruguay se "despegan"; de lo que ocurre en otros países de la región?
Mercedes Comas: Saquemos de la comparación lo que ocurre en Argentina que tiene causas particulares; allí en enero el dólar pasó de 6,5 pesos a 8 pesos, el valor que se ha mantenido desde entonces, y por esto en el acumulado en el año el dólar aumentó 23%. También en Venezuela la situación del mercado de cambios es compleja, y en marzo se estableció un desdoblamiento del mercado con una cotización muy superior a la que regía hasta el momento para algunas transacciones. Pero sacando estos casos particulares, como comentabas el peso uruguayo y el chileno, en ese orden, son las únicas monedas de América Latina que han perdido valor respecto al dólar, ya que las monedas locales de Brasil, Colombia, Perú, Paraguay y México ganaron valor frente a la divisa estadounidense en los últimos meses.
MA: Repasemos el aumento del dólar en Uruguay y en Chile.
MC: En estos primeros meses del año el dólar en Uruguay acumuló un aumento de 7.3%, pasando de 21,4 pesos a casi 23 pesos en la actualidad. En Chile la cotización de 524 pesos a 556, aumentando 6,1% en el mismo período. En contraste, en lo que va del año el dólar acumula una baja en Brasil del orden del 5%, de 4% en Paraguay, y del orden del 1% en Colombia, México y Perú.
MA: ¿Y qué explican la evolución diferente del dólar en Uruguay y en Chile?
MC: A diferencia de otros países de la región como Brasil, México y Perú, que han mantenido o incrementado sus tasas de interés de referencia o de política monetaria (y eso ha otorgado más valor a sus monedas locales al volverse más atractivas las inversiones en moneda nacional), en Chile las autoridades no han efectuado intervenciones en el mercado de cambios y han efectuado recortes en la tasa de política monetaria desde octubre del año pasado para impulsar la actividad económica que sufre una marcada desaceleración.
MA: Bajan entonces las tasas de las inversiones financieras en pesos chilenos, y esto hace perder valor a la moneda de ese país frente al dólar.
MC: En términos resumidos es lo que está pasando, y si las perspectivas en materia económica no son muy favorables, esto tiende a afectar el valor de la moneda local. En Uruguay desde mediados del año pasado ya no tenemos un régimen basado en tasas de interés como lo tiene Chile, Brasil y otros países. Pero en estos últimos meses hemos visto un mercado en pesos más líquido y parte de esta liquidez puede estarse canalizando a la compra de dólares. También hemos visto a las autoridades combatir la suba del IPC con rebajas de tarifas o de precios administrados, dejando que el dólar se fortalezca.
MA: Esto por el problema de la competitividad.
MC: Así es. La suba que está teniendo el dólar contribuye a recuperar parte de la competitividad que se ha perdido en estos años, y en nuestra opinión esto también busca objetivos de impulsar la actividad económica por la vía de las exportaciones, tanto de bienes como de servicios y en particular hacemos referencia a lo que ha venido pasando con el turismo.
MA: ¿Y qué perspectivas se tienen para los próximos meses? ¿Seguirá valorizándose el dólar en Chile y en Uruguay?
MC: Eso es lo que marcan las expectativas actuales. De acuerdo a las expectativas de los analistas en Chile relevadas por el Banco Central de ese país, se espera que la cotización del dólar en este país siga una tendencia al alza cerrando el 2014 a 565 pesos chileno/USD, lo que marcaría expectativas de un 8% de aumento en el año. Para Uruguay prevemos que el aumento que ha tenido el dólar en estos primeros meses del año se modere en los próximos años, pero la tendencia es que siga valorizándose en forma moderada pero sostenida, pudiéndose ubicar entre 23,5 y 24 pesos sobre el cierre del año.