Los continuos aportes del Gobierno de ese país son indispensables para evitar la quiebra.

Desde que fue renacionalizada en 2008, AA recibió por parte del Estado argentino subsidios por 18100 millones de pesos argentinos para poder funcionar. Los datos se desprenden del propio balance oficial publicado por la empresa y coinciden casi exactamente con las pérdidas declaradas.

Al igual que Austral – otra aerolínea renacionalizada – AA es gestionada por Mariano Recalde, notorio dirigente de La Cámpora, que tiempo atrás aseguraba que los subsidios estatales era para inversiones y sólo una parte para cubrir pérdidas.

En una nota publicada este domingo Clarín afirma que en 2013 el directivo había declarado un déficit de 247 millones de dólares, pero el propio balance de Aerolíneas indicaba un monto dos veces y medio mayor.

Un tercio de la flota actual fue adquirida por la gestión estatal. Los viejos aviones heredados de la gestión Marsans fueron reemplazados por una flota más moderna, que al 31 de diciembre sumaba 66 aeronaves en operación. Además, la antigüedad promedio de la flota, que superaba los 20 años en 2008, bajó a 11 años.