Economía y finanzas

22 de setiembre, 2014

En el mercado local, el dólar operó sin cambios el viernes, tras dos subas consecutivas. El interbancario fondo se negoció en promedio a $ 24,309.

En la semana, es decir al comparar el cierre del viernes frente al del viernes previo, la moneda estadounidense subió 0,1%.

En pizarras del Banco República el dólar también cerró estable el viernes en $ 24 a la compra y $ 24,60 a la venta. El euro cotizó a $ 30,45 y $ 31,95; el peso argentino a $ 1,30 y $ 2,30 y el real a $ 9,35 y $ 10,75 respectivamente.

En tanto, el riesgo país subió 6,2% en la semana para cerrar el viernes en 154 puntos básicos según la medición de República AFAP.

REGION
En la región, el dólar operó en todas direcciones el viernes. En Brasil, la moneda estadounidense subió 0,2% y cerró en 2,367 reales. En Chile el dólar bajó 0,2% y finalizó en 596 pesos chilenos. En Argentina, el dólar oficial se incrementó 0,1% y cerró en 8,44 pesos argentinos. Por su parte, el dólar blue finalizó estable en 15 pesos argentinos.

MERCADO INTERNACIONAL
En el Mercado Internacional el balance en lo que va del año es para las Bolsas.

Los principales mercados bursátiles muestran números positivos en lo que va del año, es decir al comparar los cierres del viernes con los de fin de 2013.

Los mercados que más resaltan son: la Bolsa de Buenos Aires con un aumento de 114,8% en lo que va del año, la de la India que sube 28,1%, la Bolsa de San Pablo que se incrementa 12,2% y la de Madrid que sube 11,1%.

NOTICIA PARA DESTACAR
El ministro portavoz de Gobierno, Alvaro Elizalde, informó que en los próximos días será promulgada la ley que establece cambios en el sistema tributario chileno, uno de los proyectos emblemáticos de la actual administración de Michelle Bachelet.

La reforma tributaria, que sustancialmente eleva los impuestos de las empresas de 20% a 27%, pretende recaudar unos 8.300 millones de dólares adicionales para financiar cambios a la educación.

La reforma tributaria, el mayor cambio al sistema impositivo chileno desde principios de la década de 1990, es el pilar para hacer realidad una de las principales promesas de Bachelet, mejorar la calidad de la educación y garantizar su gratuidad en todos sus niveles.

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