UE planea shock de â¬315.000 millones para sanear su economía
En lo que fue calificado como un "nuevo Plan Marshall", la Unión Europea pretende movilizar 315.000 millones de euros para "sacar del coma" a la economía comunitaria.
La iniciativa del presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, prevé una inversión real de 21.000 millones, pero la aplicación de un "efecto multiplicador" haría que cada euro se convierta en 15.
La urgencia por este plan es de máxima prioridad para las autoridades de la UE, si se tiene que en cuenta que la inversión cayó un promedio de 15% desde que estalló la crisis en 2007, una caída que tiene sus picos máximos en Grecia 64%, Irlanda 39% o España 38%.
El País de Madrid apunta este domingo que el sector inmobiliario residencial es el que más ha sufrido (43%). Algunos jefes de Estado ya reconocen que la situación es "dramática" y que se necesitan estímulos, ya que el 90% del empleo mundial ya se genera fuera de la UE.
El plan de Juncker apuesta a fondos públicos, una generosa inversión privada y esperar un "efecto multiplicador" en los próximos 15 años. La nota del plan es el llamado "Fondo Europeo para las Inversiones Estratégicas", que contará con 21.000 millones de euros. Deberá estar listo en junio de 2015 y no inyectará fondos directamente a los proyectos que necesitan financiación, sino que actuará como una red de seguridad que ofrecerá garantías en última instancia a los inversores privados que participen en proyectos estratégicos, cubriendo así posibles pérdidas. El objetivo es recuperar la confianza y desatascar el crédito hacia la economía real.
Se espera que el impacto del plan se multiplique a medida que vayan sumándose a él otras partes interesadas. Esas partes interesadas son los Estados miembros (en plena crisis presupuestaria), los bancos nacionales de fomento, autoridades regionales (muchas de ellas deficitarias) e inversores privados (más inclinados a refugiar su capital en bonos del Estado).
De esta forma, los 16.000 millones de euros que pone la Comisión Europea se transformarán en 240.000 millones y los 5.000 millones del BEI en 75.000.
Según la Comisión Europea, estos cálculos se basan en «la experiencia histórica de los programas comunitarios";.
La Comisión estima que la ofensiva puede crear entre un millón y 1.300.000 puestos de trabajo como mínimo y llegar incluso hasta los tres si se cumplen todas las previsiones. El impacto sobre el producto interior bruto (PIB) alcanzaría el 3% (entre 330.000 y 410.000 millones de euros en tres años). De todas formas, el plan Juncker solo daría para cubrir las necesidades de trabajo de 12 de cada 100 desempleados europeos.