Análisis de PwC: Programa de estímulo europeo cumple un mes, con buenos resultados
A mediados de marzo comenzó el programa de compra de deuda por parte del Banco Central Europeo, con el objetivo de combatir el estancamiento económico y la baja inflación. Análisis de PwC.
Daniel Castro: ¿Qué evaluación se tiene en el primer mes de implementación del plan? Qué dicen las autoridades europeas, ¿continuarán con estas medidas de estímulo?
Mercedes Comas: Todo indica que sí. Son 60.000 millones de euros que se estarían volcando al mercado cada mes, hasta setiembre de 2016 en principio según lo anunciado. Dos o tres impactos son los más visibles en este mes. Por un lado está la baja de las tasas de interés a las cuáles se endeudan los Estados de la Zona Euro, que permite mejorar las cuentas de países que en su mayoría están muy endeudados.
DC: Esto alivia entonces las preocupaciones por el lado del endeudamiento de los gobiernos…¿qué otro impacto se ha visto?
MC: Como el Banco Central compra títulos, se han valorizado también los bonos que tienen los bancos en su poder, mejoran sus balances y esto sienta las bases para que puedan expandir el crédito, justamente uno de los objetivos que buscan las autoridades para recuperar la actividad económica. El otro impacto visible es la pérdida de valor de la moneda única, y esto favorece las exportaciones de las región al volverlas más competitivas.
DC: El plan por lo tanto contribuye a mejorar las finanzas públicas, a hacer crecer el crédito y las exportaciones de la región.
MC: Eso son los resultados más visibles. Y esto ya se está reflejando en proyecciones más optimistas sobre la región. Hace algunos días comentábamos el último informe de proyecciones del FMI, donde el organismo había revisado al alza su pronóstico de crecimiento para 2015. La mejora fue leve, se espera un aumento de la economía de la zona euro de 1,5% este año, pero más allá de los pronósticos concretos lo que importa es la tendencia, y todo apunta a que hay más optimismo sobre el desempeño económico de la región en los próximos meses.
DC: Una buena noticia, en un contexto donde hemos comentado las perspectivas de un peor desempeño en otras regiones, como en China, o incluso aquí en América Latina.
MC: Es verdad. Y en este contexto de mayor optimismo, lo que persiste sin resolución a la vista es el problema de Grecia. Las negociaciones que se mantienen no han llegado a un acuerdo aún. Mañana está previsto una reunión del Eurogrupo, donde deberán llegar a un acuerdo si se otorga a Grecia un nuevo desembolso por el programa de rescate. Son 7.200 millones de euros.
DC: Sin "humo blanco"; a la vista.
MC: Por el momento sí. Todo lo que se informa por la prensa es que continúan las negociaciones, para ver si se aprueban las reformas estructurales que se le plantean a Grecia, y ver cómo se puede contemplar la flexibilización que pide el país. El gobierno de Alexis Tsipras se niega a recortar las pensiones o los salarios de los funcionarios, a introducir nuevos impuestos o nuevas ventas de bienes públicos.
DC: Puede darse una salida de Grecia del euro si no se llega a un acuerdo?
MC: Muchas autoridades de peso en distintos organismos ven esto como improbable. El propio vicepresidente del BCE opinó hace algunos días que el hecho que Grecia no atienda a alguno de sus compromisos de pago no tiene por qué significar su abandono de la moneda única. Esta posibilidad es la que está ganando peso entre algunos analistas, no solo por el peso de la deuda del país (180% del producto) que vuelve extremadamente difícil los pagos en una economía en recesión, sino por la prioridad comprometida por las nuevas autoridades griegas de responder al pago de salarios y pensiones en primer lugar.