(Emitido a las 8:25)

EMILIANO COTELO:
En las últimas semanas hemos destacado el crecimiento que está experimentando la economía uruguaya, que podría superar el 12% en el conjunto del año que estamos terminando. Todo un récord y también una grata sorpresa, porque no estamos acostumbrados a ver en nuestro país tasas tan altas, que en este caso son de recuperación después de la crisis.

Todos sabemos que la región tiene una influencia preponderante en el desempeño de Uruguay, entonces uno ya puede adivinar que el 2004 ha sido un año bueno en Argentina y Brasil. Para comenzar a confirmar esto, hoy hemos decidido en este espacio analizar la marcha de la economía argentina, ver qué dicen los últimos números en materia de producción y cuáles son las perspectivas. Enseguida el diálogo será con el economista Pablo Rosselli, de Tea Deloitte & Touche.

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Pablo, ¿cómo está marchando la economía argentina en materia productiva?

PABLO ROSSELLI:
La economía argentina mostró en 2004 un comportamiento muy bueno en materia de actividad económica, consolidando el proceso de recuperación que comenzó en el segundo semestre de 2002.

Y el segundo semestre del año ha sido muy bueno, mejor que el primer semestre. Porque en los meses de abril y mayo tenemos que recordar que se vivieron los momentos de mayor incertidumbre debido al estallido de la crisis energética. Estoy seguro que muchos oyentes recordarán la preocupación que había en relación con este tema.

EC - ¿Estás sugiriendo que el problema energético finalmente no afectó a la producción?

PR - La afectó durante algunas semanas, particularmente durante el mes de abril, ahí se notó un efecto negativo en particular sobre la producción industrial. Pero con el paso de los meses quedó en claro que el efecto de la crisis energética fue transitorio, de corta duración.

Esto no significa que este problema haya sido solucionado definitivamente. Argentina sigue enfrentando problemas estructurales en esta materia debido a la baja inversión que están haciendo las empresas energéticas, ya que todavía no se readecuado el marco tarifario.

Pero lo cierto, volviendo al terreno productivo, es que los datos del tercer trimestre fueron muy buenos. La economía argentina está culminando el año con un importante dinamismo.

EC - ¿Cuánto creció la economía en el tercer trimestre?

PR - En el tercer trimestre y en términos desestacionalizados, el Producto Bruto Interno (PBI) creció 2,9% con respecto al segundo trimestre. Una tasa trimestral de 2,9% es equivalente a un ritmo de expansión anual de más de 12%, un ritmo muy elevado por cierto.

Y cuando miramos para atrás, se concluye que el tercero fue el mejor trimestre del año, y marcó una significativa aceleración del crecimiento, ya que las tasas de expansión trimestrales habían sido de 1,5% y 0,5% en el primer y segundo trimestre respectivamente.

EC - ¿Y cuánto va a crecer entonces el PBI en el conjunto de 2004?

PR - El crecimiento acumulado hasta setiembre se ubica en el orden del 9%. Por lo tanto, no es sorpresa decir hoy que la mayoría de los analistas de la vecina orilla prevén que en el conjunto de 2004 el PBI alcance un crecimiento superior al 8%, y que a lo mejor se acerque al 9%.

Algunos indicadores sectoriales adelantan que en el cuarto trimestre la economía argentina mantuvo un importante dinamismo. Por eso se prevé que el crecimiento pueda superar el 8% en todo el año. Por ejemplo, la industria manufacturera siguió creciendo en octubre y noviembre, con sectores que están empujando fuerte como la industria automotriz, la frigorífica, las ramas que producen materiales para la construcción y los lácteos.

Y también hay datos de otros sectores que siguieron creciendo, aunque en la mayoría de los casos los datos llegan sólo hasta octubre: sube la construcción, los supermercados venden más y sube el consumo de los servicios públicos por ejemplo.

EC - Con este panorama, al menos el comienzo de 2005 es auspicioso. ¿Es así?

PR - Sí. Las perspectivas para 2005 son buenas y la mayoría de los analistas argentinos ven como posible que el PBI suba 5% el año que viene. Si estas perspectivas se concretaran, a fin de 2005 la economía argentina habría recuperado toda la caída que sufrió durante los cuatro años de recesión, de 1999 a 2002 inclusive.

EC - Por lo tanto, este comportamiento previsto de la economía argentina es una buena noticia para Uruguay y respaldaría la visión optimista que existe en nuestro país.

PR - Así es. De todas formas y pensando también más allá del 2005, nos gustaría mencionar algunos temas que son clave para el futuro de Argentina. Temas que si tuvieran un desenlace favorable, podrían fortalecer el proceso actual de crecimiento. Pero si la resolución de esos temas no prosperara exitosamente, serían seguramente un escollo para que la economía argentina siguiera creciendo.

EC - ¿Cuáles son esos temas, Pablo?

PR - Son varios, pero podemos citar los más relevantes. En primer lugar, el tema de la reestructura de la deuda pública, que no ha podido ser resuelto en 2004 y se están cumpliendo por estos días tres años de la declaración del default, de la cesación de pagos. Este tema es importante y en los próximos meses Argentina tiene una muy buena oportunidad para avanzar en este problema, ya que el contexto financiero internacional es muy bueno, muy propicio para los mercados emergentes.

Si el canje de deuda que se lanzaría en enero tuviese éxito, seguramente la economía recibirá un nuevo impulso a través de la mejora de las expectativas. Pero si el canje fracasara, los resultados serían los opuestos, lógicamente.

Otro tema que preocupa mucho, y con esto termino, es el de la inversión. La inversión en los sectores que proveen servicios públicos, que como ya mencionamos arrastran una situación conflictiva con el gobierno por la readecuación de sus tarifas. Hasta que no se logre un acuerdo que permita aumentar las tarifas, la inversión seguramente será insuficientes en sectores claves como el energético, el de telefonía, el de servicios de agua y otros. La inversión también preocupa en relación con la industria, ya que algunos sectores muestran un uso casi pleno de la capacidad instalada.

Y una última preocupación en relación con las exportaciones.

EC - ¿No están creciendo las exportaciones?

PR - Sí, están creciendo, pero hay motivos para estar preocupados. En dólares, este año las exportaciones están subiendo un 16%, pero suben porque los precios de venta han sido este año considerablemente superiores. Doce de los dieciséis puntos obedecen a este factor precio, y las cantidades aumentan sólo un 4%. Es realmente un incremento muy pero muy pobre cuando se tienen en cuenta las excepcionales condiciones de competitividad que tiene hoy Argentina fruto de la fuerte devaluación de 2002.

Bueno, es clave entonces que en algún momento de 2005 las exportaciones, medidas en volumen físico, reaccionen. Si con estos niveles de competitividad Argentina no logra crear una corriente exportadora firme, será difícil que la economía pueda seguir creciendo mucho más sobre la base del aumento de la demanda interna.     

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Transcripción: TD&T