Argentina, el Mercosur y la Alianza del Pacífico
La decisión de Argentina de sumarse como observador a la Alianza del Pacífico sintoniza plenamente con la estrategia de Chile de aproximar este bloque comercial al Mercosur, asegura el alto responsable de comercio internacional, Andrés Rebolledo.
Ésta será una de las acciones que impulsará el Gobierno de Michelle Bachelet cuando el próximo 1 de julio asuma la presidencia pro tempore del bloque subregional nacido hace cinco años con la participación de México, Colombia, Chile y Perú, señala en entrevista el director general de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon).
Chile se hará cargo de la Alianza en la Cumbre Presidencial que tendrá lugar ese día en la ciudad sureña de Frutillar y que estará precedida de una reunión empresarial en la que participará el mandatario argentino, Mauricio Macri.
"La Alianza del Pacífico es un proyecto de integración prioritario en nuestra política comercial. Con apenas cinco años de construcción, ya registra muchos avances y tiene un gran potencial", subraya Rebolledo.
Durante su presidencia, Chile se concentrará en el seguimiento de los mandatos que hereda en materias como comercio de bienes, servicios, y movimiento de personas y de capital.
Además, el Gobierno de Michelle Bachelet desea que se aproveche al máximo el Protocolo Comercial que entró en vigor el pasado 1 de mayo y que supone aperturas arancelarias y la posibilidad de acumular en origen lo que producen los cuatro socios de la Alianza.
Y lo mas importante, que el bloque subregional se siga proyectando hacia los mercados del Asia Pacifico, de los 49 países observadores y del resto de América Latina.
Argentina ha anunciado recientemente su deseo de sumarse al medio centenar de observadores y de hecho, el presidente Mauricio Macri acudirá como invitado a la próxima cumbre de la Alianza, junto con Luis Guillermo Solís, de Costa Rica, país que está a las puertas de su ingreso.
"La posibilidad de tener a Argentina como observador enriquece sin duda este proyecto de integración", enfatiza Rebolledo.
Supone, además, "la posibilidad de generar el diálogo en América del Sur a partir del planteamiento que hizo la presidenta Bachelet" en el sentido de "que converjan países que tienen proyectos de integración con concepciones diferentes".
"Es una buena noticia que el presidente Macri nos acompañe en la Cumbre Empresarial que tendrá lugar el día próximo día 30", en víspera de la cita de los mandatarios de México, Colombia, Perú y Chile, señala el responsable de la Direcon.
Además, la participación de Macri será una "interesante oportunidad" para que los empresarios de la región tengan la visión del nuevo Gobierno de Argentina e intercambiar opiniones con el presidente Maacri", agrega Rebolledo.
A juicio de Chile, integrarse como observador es una señal del interés de Argentina por conocer y vincularse con el proyecto.
"Pero de ahí a una membresía plena, hay un espacio importante", puntualiza el director general de Relaciones Económicas Internacionales.
En efecto, cuando Bachelet inició su segundo mandato, anunció su deseo de que la Alianza del Pacífico y el Mercosur se aproximaran.
Desde entonces, ambos bloques subregionales han mantenido varios encuentros, entre ellos uno a nivel de vicecancilleres celebrado hace apenas dos semanas en el que se fijó una agenda en áreas muy concretas relacionadas con facilitación del comercio, vínculos en el sector privado y movimiento de personas.
"Hemos tenido grandes avances hasta llegar a la situación actual, en la que ya tenemos una agenda de trabajo muy pragmática y vinculada a los negocios", asegura Andrés Rebolledo.
Pero a pesar de lo logrado, Chile reconoce que la Alianza del Pacífico adolece de una "institucionalidad muy básica".
Uno de sus escasos soportes tiene que ver con el mundo empresarial. Sin embargo, no existe como contrapartida un Consejo Social.
"La Alianza del Pacífico tiene una gran particularidad y es que al ser un proyecto que se ha construido progresivamente a lo largo de cinco años es flexible para acoger una nueva temática", subraya Rebolledo.
En ese sentido se han ido incorporando temas de mayor calado social, como los temas laborales. "Hay posibilidad de integrar actores de la sociedad civil que tengan interés en poder participar en el proyecto", asegura. Manuel Fuentes/EFE