El semanario Búsqueda publicó, citando diplomáticos brasileños, que hubo "algún problema de interpretación" de parte del presidente, Tabaré Vázquez, que entendió tras su reciente reunión con su colega de Brasil, Michel Temer, que ese país se avendría a que Uruguay negociara de manera unilateral.

Desde Paraguay el Gobierno dio señales de mayor comprensión, aunque reconoce que la pretensión uruguaya obligaría a un cambio de las reglas de juego en el bloque.

El vicecanciller, Rigoberto Gauto, dijo a El País que el Tratado de Asunción establece la existencia de un Arancel Externo Común (AEC) y que la resolución 32 es consecuencia del mismo, por lo que se establece que el bloque debe negociar en conjunto eventuales acuerdos con otros actores del comercio mundial.

De todas maneras, Gauto señaló que "en el Mercosur hemos sabido acomodar los intereses de los socios" y que la posición uruguaya es "atendible y harto razonable. No nos tomó por sorpresa", aseguró.

Vázquez informará al Consejo de Ministros sobre los resultados de su visita oficial a China.