La banca electrónica avanza en el Banco República
En noviembre, el Banco República (BROU) anunció el cierre parcial de 14 de sus 90 sucursales en el interior del país, a partir de enero del año entrante, las cuales se suman a otras siete que habían cambiado su régimen de atención en 2015. Esta decisión, que fue postergada en julio por el rechazo por parte del sindicato bancario (AEBU), implica el cierre de las cajas dos veces a la semana en estas dependencias.
Por Carolina Balian
El presidente del BROU, Jorge Polgar, contactado por La Mañana de El Espectador, indicó que el objetivo principal de este cambio de régimen en las 21 sucursales es la racionalización de los servicios ofrecidos por las mismas. El mandatario aclaró que con esta medida no se busca estrictamente reducir los costos, ya que no hubo y no va a haber disminución de personal: "lo necesitamos y además el marco legal no lo permitiría", sostuvo.
Esto es reflejo del avance de la tecnología en todos los campos, del cual no está exento el sistema bancario. En este caso, se traduce en la digitalización de muchos de los servicios, desplazando la tradicional atención personalizada en los mostradores de las sucursales. Los cajeros automáticos y buzoneras, la plataforma web e-BROU y la aplicación móvil brindan la posibilidad de acceder a cerca de un 80% de los servicios que se prestan en una sucursal tradicional.
Con respecto a los factores que motivan estos cambios, el presidente del BROU señaló que la automatización de servicios es una demanda de los clientes.
Escuche a Polgar:
Además, Polgar resaltó que la banca electrónica es también una oportunidad para el Banco República de llegar a otros clientes, en particular, expandir la atención a pequeñas y medianas empresas. Esto se da porque se "libera" personal de tareas transaccionales (típicamente retiros y depósitos de efectivo) sustituibles por los cajeros automáticos, y el mismo puede dedicarse a la atención personalizada a estas empresas rezagadas, que en general no pueden disponer de un funcionario dedicado a gestionar las relaciones de las mismas con el banco en el horario de atención al público.
Escuche a Polgar:
Con respecto a esto último, el presidente del BROU señaló que durante los dos días que las sucursales no estarán abiertas al público en general, se podrán agendar consultas con algunos clientes e incluso el personal bancario podrá realizar visitas a empresas.
En cuanto a la implementación del régimen de cierre parcial en las sucursales que lo incorporaron en 2015, Polgar señaló que la misma fue exitosa y logró su objetivo. En estas dependencias, la proporción de transacciones que se hacían en forma presencial era del 80% y solamente el 20% se realizaba por canales digitales.
Luego de un año de puesta en marcha del régimen, según indicó el mandatario, se observa un cambio de comportamiento de los clientes, que llevó a que se invirtiera la anterior relación: ahora el 70% de las transacciones se realizan a través de los cajeros automáticos y el 30% en forma presencial, como resultado de la política de difusión y promoción de estos medios electrónicos.
Por otra parte, La Mañana de El Espectador contactó a la Asociación de Empleados Bancarios del Uruguay (AEBU) para conocer su postura frente a estos cambios. El presidente del Consejo del Sector Financiero Oficial de AEBU, Gonzalo Pérez, indicó que el sindicato no espera que se profundice a futuro el cierre parcial de sucursales, ya que este fue el compromiso que asumió el directorio del BROU en la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, producto de la movilización de AEBU contra esta medida.
Además, señaló que en el interior del país no están dadas las condiciones para profundizar el cierre parcial o total de dependencias, ya que el uso de medios electrónicos avanza un tanto más lento en el interior que en Montevideo.
Además, Pérez se refirió a que la banca privada también viene realizando desde hace un tiempo la readecuación de sus sucursales en este sentido (priorizando los medios electrónicos), pero esta medida no tiene mayor impacto en muchas localidades, dado que las sucursales privadas no cubren la totalidad del territorio nacional, a diferencia del banco oficial.
También, el representante del sindicato bancario analizó que, si bien en principio no ha tenido un impacto en las fuentes de trabajo, en la medida que el sistema electrónico avance, va a tenerlo. Dada su preocupación por esta cuestión, AEBU resolvió solicitar un ámbito con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y delegados de los bancos oficiales y privados, para analizar la introducción de tecnología en el sistema financiero y su potencial impacto sobre los puestos de trabajo.
Escuche a Pérez:
Por último, Pérez se refirió a la aparición de nuevos agentes financieros, que se agrega a la digitalización de transacciones para impactar sobre el empleo, reasignando tareas y potencialmente desplazando trabajadores.
La banca electrónica a nivel internacional
El uso de medios electrónicos está avanzando a un ritmo acelerado a nivel internacional. Reflejo de esto es el anuncio realizado por uno de los principales bancos privados, a mediados de este mes, de que cerrará más de 130 oficinas en España en febrero de 2017, ante el creciente uso de los canales digitales y remotos por parte de los clientes, que acuden cada vez menos a las oficinas.