¿En qué afecta esta medida? ¿Cómo viene la marcha de la economía brasileña, el segundo mercado destino de las exportaciones de nuestro país?

Empecemos por la decisión que adoptó el Banco Central de Brasil.

En octubre la tasa de referencia en Brasil se ubicaba en 14,25%, y en ese momento se decidió un recorte de cuarto punto porcentual, algo que no pasaba desde el año 2012.

Luego en noviembre volvió a adoptarse la misma decisión, y en la reunión de la semana pasada se decidió un recorte más agresivo de 75 puntos, llevando la tasa a 13% anual.

Se refuerza entonces la política.

Así es. Según el comunicado oficial, la decisión se fundamenta en que el desempeño de la actividad económica se encuentra por debajo de las expectativas.

Las autoridades brasileñas están viendo que la recuperación económica está siendo más "lenta y gradual"; de lo que opinaban hace algunos meses, mientras que la inflación está siendo más favorable: se ubicó en 6,3% a fin de año, mientras que un año atrás llegó a superar el 10%. 

Y como la inflación se reduce, hay menos riesgo que con tasas de interés más bajas se fomente la suba de precios.

Lo que se está buscando ahora, con tasas más bajas de interés, es impulsar el crecimiento de la actividad.

Brasil está en recesión. Con tasas más bajas, se abarata el crédito, para el consumo, para la inversión.
Antes, con niveles de inflación cercanos al 11%, las autoridades priorizaban el control de los precios, pero ahora, con una inflación en 6%, cambia el objetivo, y se prioriza que se recupere la actividad, aunque hay algunos datos mejores.

¿Qué datos tenemos para comentar?

El indicador mensual de actividad económica registró en noviembre un aumento desestacionalizado de 0,2% con respecto a octubre.

Si lo comparamos con noviembre de 2015, si bien el indicador continúa en terreno negativo (descendió 2%), el ritmo de caída fue el más bajo desde junio de 2015.

Sigue cayendo la economía, pero a ritmo más lento.

Así es. Las previsiones de los analistas brasileños están proyectando en la actualidad un aumento de 0,5% del PIB para este año.

No es un aumento importante, pero marca la salida de Brasil, después de dos años de caída, la recesión más grande que han tenido en su historia.

Y esta recuperación incipiente que se ve en algunos sectores, con cierta mejora de la competitividad nuestra en los últimos meses, se refleja ya en nuestro comercio exterior.

Crecen las exportaciones a Brasil.

Tenemos aumentos desde el mes de mayo. En ese período, entre mayo y noviembre que son los últimos datos del BCU, en siete meses exportamos USD 800 millones, lo que representa un 27% más que en igual período de 2015.

No tenemos las cifras de turismo, pero por operadores que hemos consultado también se ha incrementado de forma importante la llegada de brasileños al país.

Así que en resumen, hay mejores perspectivas de crecimiento para Brasil, que ya se notan en un Uruguay, y es uno de los factores que va a contribuir al crecimiento de nuestro país este año.