La Audiencia Opina

Sobre la crisis energética

(Mensaje recibido el 13 de enero)

Estimados conductores de En perspectiva:

Estos párrafos sólo pretenden ser un pequeño aporte en un debate que debe ser abordado con mucha rigurosidad y evitando el "talenteo".

La definición de roles y el cumplimiento de los mismos resulta sumamente importante:

  • El Ministerio de Industria Energía y Minería debería definir la política energética y los lineamientos en los cuales deberían actuar los agentes públicos y privados. Además, debe realizar análisis de prospectiva y planificar (en el sentido de dar orientaciones y un marco de actuación a los agentes) el desarrollo futuro del sector. Esa función, sin duda, que deberá estar subordinada a la posición del Poder Ejecutivo y de las leyes que apruebe el Parlamento.
  • El organismo regulador debe circunscribirse a la actividad regulatoria (elaboración de normas de menor rango sobre calidad de los servicios, contralor y fiscalización del cumplimiento de la normativa vigente por parte de los operadores, asesoramiento al Poder Ejecutivo en aquellos temas que así lo solicite)
  • Las empresas (públicas o privadas) deben cumplir su actividad empresarial.
  • Por último, no hay que olvidarse que los beneficiarios de esas tres actividades (más allá de las justas remuneración al trabajo y al capital) son los consumidores (actuales y las futuras generaciones)... No es bueno que una sociedad defina su política energética sólo en base a objetivos de corto plazo.

Esto no quiere decir que no exista una fuerte y sana interacción entre todos los actores en cada uno de los temas. Por ejemplo, la política energética, a definirse por el MIEM, debería ser elaborada en consulta y con participación de toda la sociedad, o al menos de los principales actores.

Las normas sobre calidad (que condicionan el precio) también deben ser elaboradas en consulta entre todos los actores y, también se debería lograr captar la expectativa de quienes recibirán y pagarán el servicio: los consumidores.

Por último, una vez definidas las reglas, hay que hacer el esfuerzo de cumplirlas y hacerlas cumplir. Muchos recursos se invirtieron para definir el marco regulatorio del sector eléctrico que se concretó en normas del derecho positivo. No obstante, la puesta en vigencia plena del mismo ha sido postergada en diversas ocasiones.

Esa "inestabilidad" en las reglas de juego ha sido una mala señal para cualquier agente (público o privado) que tenga expectativas de invertir en el sector.

Es más fácil buscar las explicaciones de las crisis en agentes externos (el clima, las lluvias, la situación en los países vecinos). Es tiempo de que aceptemos que esas condiciones existen, son aleatorias y que una de las principales causas de las crisis es que no hemos logrado como país definir una estrategia coherente para que aumente la oferta mediante la inversión (pública o privada).

Las soluciones de corto plazo serán: reflejar los costos en el precio de la electricidad, bregar por un aumento del suministro de electricidad más barata desde la región y, en última instancia recurrir a cortes de suministro.

En el mediano plazo: poner en funcionamiento los diferentes instrumentos existentes en el marco regulatorio vigente para aumentar el respaldo (contratos de mediano y largo plazo), mediante la garantía de suministro o contratos de reserva.

En el largo plazo: definir una estrategia coherente en función de los intereses de los consumidores (actuales y futuros) y, una vez definidas las reglas de juego, cumplirlas y hacerlas cumplir.

Tengo expectativas en que el cambio de autoridades que se está procesando en el país es una oportunidad muy buena para que las decisiones del Estado (y los agentes) sean consistentes con las necesidades de la sociedad.

Felicitaciones por el programa

Oscar de la Aguada, un escucha asiduo