En ese sentido, el jerarca subrayó que el aumento previsto se compone de 100 millones de dólares, aplazados en la pasada Rendición de Cuentas, y 72 millones extra.

Dentro de esos 72 millones, 62 irán para la Educación y los 10 restantes para cubrir una deuda del Estado con el Poder Judicial.

En total, el aumento para el sector educativo será de 108 millones de dólares, ya que se sumarán 62 millones previstos en esta Rendición de Cuentas y 46 millones que fueron aplazados en el presupuesto anterior.

Con este aumento, la inversión en Educación llegará al 5 % del producto interno bruto (PIB) durante 2018.

"Estamos en ese camino hacia el 6 % del PIB que es el que marca el programa" de gobierno, añadió Astori.

Según indicó el ministro, la nueva Rendición de Cuentas, que será únicamente para 2018, es "muy cautelosa" y fue definida a principios de este año por todo el Poder Ejecutivo.

La razón de la cautela es el escenario económico internacional, regional y nacional, ya que "no se puede ignorar" la situación preocupante de Brasil y Argentina.

Asimismo, Astori mencionó a la situación fiscal de Uruguay, cuyo déficit actualmente se ubica en 3,7 % del PIB.

"(El déficit fiscal) es nuestro principal motivo de preocupación y por eso es especialmente importante tener en cuenta las restricciones en materia de gastos e ingresos", señaló el jerarca.

En tanto, destacó que "lo fundamental" para el Gobierno es no seguir incrementando la carga tributaria sobre las personas y sobre la actividad productiva.

Astori explicó que el Gobierno necesitará "recursos adicionales" para financiar 112 millones de dólares del total del gasto previsto (172 millones de dólares) a incrementar en la próxima Rendición de Cuentas.

Para hacer frente a esta recaudación, el Poder Ejecutivo propondrá dos modificaciones impositivas.

Por un lado, gravará con un impuesto a los juegos de azar, que le otorgarán al Estado unos "17 millones de dólares".

Por otra parte, el Poder Ejecutivo prevé incrementar el arancel a las importaciones (tasa consular), algo que las autoridades hubiesen preferido "no hacer", según detalló Astori.

"En este momento, Uruguay tiene fijada esa tasa en dos puntos de las importaciones de bienes con algunas excepciones importantes, no pagan esa tasa los bienes de capital, las importaciones de petróleo y las de servicio (...) proponemos incrementarla en un punto a los países que integran el Mercosur y en tres puntos para los del resto del mundo", subrayó.

Además, expresó que esta medida es "absolutamente provisoria" y dará margen al Gobierno para negociar, tanto en la Organización Mundial de Comercio (OMC) como con los países con los que Uruguay tiene relaciones comerciales.

"(La medida) No nos gusta, pero es necesaria para mantener el equilibrio fiscal del país", concluyó.

El proyecto de ley de la Rendición de Cuentas fue entregado el pasado 13 de junio al FA por Astori, el secretario de la Presidencia, Miguel Ángel Toma, y el prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo.

Este miércoles, Astori expuso a la bancada de legisladores oficialistas el documento, que deberá ser enviado al Parlamento antes del 30 de junio para su posterior aprobación. EFE