¿Cómo se ven las cifras?

A nivel general no se ven grandes novedades, sino que más o menos se mantienen las tendencias que hemos venido comentando en meses anteriores. En mayo, la tasa de empleo promedio para el total del país fue de 57,8%, medio punto abajo del registro de mayo del año pasado. Esto implica una leve reducción en la demanda de empleo por parte de las empresas.

En materia de actividad laboral, es decir, en lo que tiene que ver con la oferta de mano de obra en el mercado, también se dio una caída de casi medio punto en comparación con mayo del año pasado.

¿Y el desempleo en cuánto está?

7,9% es la tasa de desempleo promedio para todo el país, que se mantuvo incambiada en comparación con mayo del año pasado, justamente porque oferta y demanda de empleo cayeron prácticamente en la misma magnitud.

Entonces, yendo a las tendencias, seguimos viendo una caída en los niveles de ocupación…

Sí, esta es una tendencia que se está dando ya hace algo más de dos años. Luego del aumento del empleo que se registró en 2014, el nivel de empleo volvió a caer desde comienzos de 2015 y si bien todavía no vemos un repunte del empleo, el ritmo de caída se ha moderado.

Si vamos a los datos anuales por ejemplo, en 2015 se registraron, en términos netos, 28.000 personas ocupadas menos que el año anterior, pero en 2016 esa caída se redujo a algo menos de 5.000 personas.

Pasando en limpio entonces, sigue cayendo el empleo pero de forma más moderada…Esto a nivel nacional, ¿qué pasa cuando desgranamos estas cifras, por ejemplo, a nivel de las distintas regiones?

La caída en el nivel de empleo responde a reducciones tanto en Montevideo, como en el Interior del país, aunque en el Interior la baja es algo más pronunciada.

Tomando por ejemplo el promedio enero-mayo, la tasa de empleo en Montevideo se mantiene casi igual a la del mismo período del año pasado, mientras que en el Interior del país se registra una caída de un punto porcentual.

¿Y en materia de la calidad del empleo? ¿Qué está pasando?

El INE publica dos indicadores que reflejan algunos aspectos de la calidad del empleo. Uno es el subempleo, que es la proporción de personas ocupadas que quisieran y tienen disponibilidad para trabajar más horas de las que trabajan. En este caso estamos hablando de casi un 9% de la población ocupada. Y el otro indicador es el porcentaje de empleos no registrados en la seguridad social, que actualmente son el 24% de los puestos de trabajo.

Y en cuanto a la tendencia, el año pasado se dieron aumentos en ambos indicadores, lo que indica un deterioro en la calidad del empleo, pero en los primeros cinco meses de este año, en promedio, se han mantenido relativamente estables en comparación con enero-mayo del año pasado.

¿Qué podemos esperar para este año en materia de empleo?

En términos generales, el escenario es más favorable porque, por un lado, para este año se espera un crecimiento económico más importante en comparación con los dos años anteriores; pero además, porque algunos sectores puntuales, que son más intensivos en mano de obra, como por ejemplo el comercio, ya están teniendo una mejora.

Entonces, en materia de empleo, si bien no descartamos que 2017 pueda cerrar con una nueva caída, lo que podemos esperar es que al menos esa caída no se profundice.