El titular de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), Gastón Silbermann, explicó al portal de la Presidencia uruguaya que la empresa belga comenzó en los últimos días las tareas de "batimetría", es decir, la medición de la profundidad.

La próxima semana, en tanto, se emprenderán los "trabajos de dragado y balizamiento" del río Uruguay, frontera natural entre ese país y Argentina.

"Cumplida esta etapa, antes de finalizar el 2018, podrán arribar al puerto de Fray Bentos buques de ultramar, de transporte marítimo, con un calado de 23 pies (unos siete metros)", señaló Silbermann.

Esto último "incrementará la capacidad de carga y operativa del puerto", así como la disminución en el "costo de los fletes marítimos, beneficiando la cadena de valor", agregó el titular de la CARU.

El río Uruguay es gestionado por la CARU, un organismo binacional integrado por representantes argentinos y uruguayos, por lo que la obra fue "encomendada" por ambas naciones, detalló la Presidencia.

El representante de Argentina ante la CARU, Mauro Vazón, explicó que se trata de una obra "trascendental" para el "desarrollo regional".

Asimismo, señaló que el transporte será "más económico" y que tendrá un "menor impacto ambiental", para así "convertir al río Uruguay en una hidrovía navegada comercialmente".

En octubre de 2016, la CARU adjudicó a la empresa belga el dragado de dos tramos del río Uruguay, lo que implicará una inversión de 40 millones de dólares entre apertura, profundización y mantenimiento de la obra. EFE