El diputado del FA Alfredo Asti dijo a Efe que el acuerdo, que contó con el apoyo tanto de la coalición de izquierdas oficialistas, el Frente Amplio (FA), como de los partidos de la oposición, es "muy positivo", ya que Chile, además de asociado al Mercosur, es un país con el que Uruguay ya tiene una integración y otro TLC en materia de bienes.

"Esto lo que hace es ampliarlo al tema servicios y con la incorporación de algunas cláusulas que podríamos decir que son de última generación con respecto a derechos laborales, equidad de género y de la promoción de las pequeñas y medianas empresas, que no eran habituales en los TLC", señaló Asti.

Para el diputado oficialista, este tipo de elementos ayudarán a Uruguay, ya que en el sector de servicios el país tiene un "destacado impulso" con mucho crecimiento en los últimos años.

El TLC fue firmado por el presidente Tabaré Vázquez, y la entonces presidenta de Chile Michelle Bachelet, en octubre de 2016.

En abril de 2018, la Cámara de Diputados de Chile ratificó el TLC mientras que el Senado uruguayo hizo lo mismo a comienzos de julio.

"Es importante desde el punto de vista de una posición de Uruguay respecto a la inserción internacional, más allá de lo que es con Chile, con cualquier país del mundo y la disposición a negociar este tipo de tratados", afirmó el diputado.

Asimismo, consideró que es necesario "seguir esa tendencia" de insertarse en el mundo a través de acuerdos entre países o bloques, ya que de no tenerlos se pueden perder oportunidades de negocios y quedar relegados con respecto a los países que tienen producción similar a la uruguaya.

"Hay que poner este tratado en el marco de la inserción internacional del Uruguay y reconocer de que en estos momentos lo único permanente es el cambio. Hoy hablamos de la conveniencia que puede tener un tratado con Chile pero la puede tener mucho más si Chile firma este tipo de tratado con otros países de la región en donde quedaríamos desplazados", acotó el parlamentario.

Para Asti la ratificación de este acuerdo es oportuna "desde todo punto de vista" y confía en que el país trasandino hará lo propio próximamente.

El TLC estuvo en discusión hasta último momento porque algunos sectores del FA no estaban de acuerdo con su ratificación y consideraban que no había condiciones para llevarlo a cabo. Sin embargo, el plenario de la coalición decidió por mayoría que se siguiera adelante con él.

El diputado aseguró que si no se ratificaba el TLC se hubiese afectado la imagen de Uruguay como país y hubiera sido "una señal muy negativa" con respecto a la inserción internacional de la nación suramericana.

El legislador dijo que, si bien la unidad del FA se destaca por su diversidad de opiniones y la posibilidad de debatir y discutir los temas, la coalición tiene decidido pactar "una serie de normas" que regirán en próximas aprobaciones para que ayuden a concretar estos acuerdos en futuras negociaciones.

"(El TLC) cuida los intereses actuales y futuros del país con determinadas limitaciones o exclusiones", acotó Asti y explicó que con estas limitaciones que se pusieron en el Anexo del TLC se pudo subsanar las diferencias con las listas del FA que eran contrarias al acuerdo. EFE