Porteiro recordó los dos objetivos centrales, uno en el marco general de competencia de la industria bancaria y otro basado en la voluntad del accionista.

"Desde el punto de vista de la gestión ordinaria, lograr para el Nuevo Banco Comercial la mejor posición que se pueda en el mercado. También, hay en proceso una negociación de venta del paquete accionario y la responsabilidad del Banco es brindar la información solicitada para que los que están negociando –que son los accionistas- tengan la información que requieren los potenciales interesados en la operación", explicó.

Según el ministro de Economía, Danilo Astori, hay tres interesados en la adquisición pero no dio nombres. "Hay tres interesados importantes. No puedo agregar más por razones de confidencialidad que se exigen en todo este proceso. Pero también aseguro transparencia. A medida que vaya avanzando este proceso de discusión -que será un proceso competitivo, sobre todo porque hay varios interesados- vamos a ir compartiendo toda la información (en la medida que sea posible) con la sociedad uruguaya", dijo.

El banco fue creado tras la crisis del 2002 con las mejores carteras de los quebrados Comercial, Caja Obrera y Montevideo. Su único accionista es el Estado, está regido por el derecho comercial privado y tiene un patrimonio superior a 150 millones de dólares.

Astori resaltó los objetivos del nuevo Directorio: "A pesar de que el único accionista del Nuevo Banco Comercial es el Estado y, en particular, el Ministerio de Economía y Finanzas, el banco ya funciona con un régimen de derecho privado. Ahora se trata de retornarlo por completo al sector privado. Por supuesto que para ello hay que realizar diferentes tareas preparatorias entre las cuales, como dijo su nuevo presidente, se encuentra la de transformar (al banco) en una institución competitiva con buena presencia en el mercado".

Otro aspecto a destacar es que el banco tiene unos 850 funcionarios y el gremio está dispuesto a defenderlos pase lo que pase con la institución, según aseguró Juan José Ramos, del sector banca privada.

"Nuestro deseo absoluto es que se mantengan los puestos de trabajo de los compañeros después de un proceso de reestructura que se llevó 1.120 puestos entre los tres bancos", contó Ramos.