Entrevistas

Botnia compromete "el máximo de trabajo a los uruguayos"

En el marco de la instalación de Botnia en Uruguay el PIT-CNT exige que efectivamente "se contrate con alta intensidad trabajadores uruguayos". El dirigente Marcelo Abdala denunció movimientos de empresas extranjeras ofreciendo maquinaria y personal. Carlos Faroppa, de Botnia, aclaró que la empresa financiará la capacitación de trabajadores uruguayos. "Hay un tema de responsabilidad social y de impacto local que queremos maximizar", afirmó.

(Emitido a las 7.35)

EMILIANO COTELO:
Vamos a ocuparnos del proyecto de instalar en las proximidades de Fray Bentos una planta de celulosa perteneciente al grupo Botnia, de origen finlandés. El PIT-CNT le exige a Botnia que contrate 99 por ciento de mano de obra nacional.

La noticia está en el diario El País de hoy, que dice que con la polémica ambiental como sonido de fondo, la central de trabajadores y la empresa Botnia iniciaron contactos para analizar las condiciones de contratos laborales para el emprendimiento que se concretará en el departamento de Río Negro. El énfasis está puesto en las condiciones de trabajo y el porcentaje de empleados uruguayos que efectivamente serán contratados. "Si nuestra posición fuera de pureza ambientalista, habría que cerrar todos los lugares de trabajo", dijo el dirigente del PIT-CNT Marcelo Abdala.

Vamos a tratar de conversar con las dos partes. Comenzamos con Abdala, que integra el Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT y que es a su vez dirigente del sindicato de metalúrgicos.

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Abdala, algo usted ya nos había comentado sobre esto después del acto del Primero de Mayo en cuanto a que la posición del PIT-CNT no era ir al extremo en el reclamo ambientalista; es más, consideraban exageradas varias de las protestas y de las manifestaciones que se han hecho en ese punto.

MARCELO ABDALA:
Es verdad, conversamos de eso después del 1 de mayo.

EC - Lo que ustedes por supuesto sostienen es que deben desarrollarse los controles correspondientes por los organismos del Poder Ejecutivo. Pero lo que les preocupa sobre todo es el tema del empleo.

MA - Las dos cosas. Quisiéramos el estándar mayor de minimización de impacto ambiental, esto es los niveles europeos de exigencia, y los niveles uruguayos de participación social en el monitoreo de eso. Esto es que la empresa básicamente financie todas las herramientas que permitan monitorear que el impacto ambiental efectivamente, en función de un acuerdo de mejora continua e innovación tecnológica permanente, se vaya reduciendo cada vez más, que la empresa financie todas las condiciones para que el impacto ambiental se pueda medir, controlar y para asegurar que los estudios desarrollados se construyen en la práctica en la instalación de la planta. Eso por un lado; por otro lado que se minimice el impacto ambiental negativo que pueda tener la planta y que se maximice el valor agregado nacional, la mano de obra nacional en la fase de construcción de la planta y posterior operación.

EC - Esto último, la exigencia con respecto a la participación de mano de obra nacional, ¿por qué viene? ¿Qué datos o inquietudes han surgido en el PIT-CNT?

MA - Hemos tenido contactos, conversaciones y el país debe prepararse para que la inversión prevista efectivamente se convierta en la mayor cantidad de puestos de trabajo posible. Esto tiene que ver con la forma de contratación desde los primeros trabajos que aseguren trabajo nacional, hasta los mecanismos que aceleren procesos de formación profesional y recalificación de trabajadores que permitan que en el proceso de construcción por un lado, toda una fase, y luego en el proceso de operación de la planta, efectivamente se contraten con alta densidad trabajadores uruguayos.

EC - ¿Ustedes tenían indicios de que esto podía no ocurrir?

MA - Sí, sí.

EC - ¿Concretamente cuáles?

MA - En el Movimiento de Tierras teníamos información de que una empresa brasileña estaba averiguando si podía participar y venir con mano de obra extranjera, con maquinaria extranjera y hasta con el combustible para mover tal maquinaria de carácter extranjero. Esa información fue confirmada por la propia empresa, por lo tanto si estas averiguaciones se estaban haciendo por parte de una empresa brasileña estuvimos bien en abrir el paraguas.

EC - ¿Ese fue el único elemento o había otros?

MA - No, la información que nosotros teníamos era esa. Además de una cuestión complicada que hace a un necesario cambio cultural en nuestro país, que tiene que ver con cómo las empresas nacionales se paran ante la cuestión de la inversión, ante la cuestión de las licitaciones y muchas veces arrancan muy alto y finalmente terminan trabajando para otros.

EC - ¿Cómo? No entendí nada.

MA - Muchas veces las empresas uruguayas –nos pasó en la ampliación y remodelación de la refinería de La Teja– se presentan a licitaciones, sean públicas o privadas, con determinado precio, y no tiene ningún sentido que en función de una avivada del precio presentado esas empresas queden afuera de las licitaciones y luego terminen siendo subcontratistas de las empresas que ganan. Es decir que tenían desde el principio condiciones para otro precio y sin embargo se presentaban en las licitaciones con esas condiciones.

EC - Pero eso no es algo que pueda resolver Botnia con los contratos a los que está convocando.

MA - No, es un problema que hace a la cultura productiva general de este país que tiene mucha cosa para cambiar. Ayer se planteaba toda una serie de restricciones que tiene este país para desarrollarse, yo creo que la principal es de carácter cultural.

EC - En línea también está el ingeniero agrónomo Carlos Faroppa, que es asesor estratégico de Botnia.

Ingeniero Faroppa, ¿cómo ha visto usted este tipo de reclamos, este tipo de condiciones que se ponen desde el PIT-CNT?

CARLOS FAROPPA:
Con respecto a los parámetros ambientales, estamos de acuerdo, Botnia está haciendo el mejor proyecto y eso significa hacerlo con los parámetros que nos exige nuestra Dirección de Medio Ambiente (Dinama) pero con los mejores parámetros europeos, los más exigentes. Así que como bien citaba Abdala, el proyecto va a estar dentro de esos parámetros, se van a hacer los monitoreos de acuerdo a esos parámetros; no sólo las emisiones y los efluentes del proyecto van a ser así, sino también los monitoreos. Y por supuesto, si no hay equipos acá, tendrá que suministrarlos. Pero siempre tiene que haber un tercero auditando; nosotros siempre pensamos en la Dinama, la Intendencia de Río Negro, con la ayuda eventualmente de la Universidad de la República. En un sistema de participación, la información tiene que circular, y no va a haber problema en que la información circule.

EC - Yendo al otro tema, más nuevo en estas discusiones, que es el del empleo. Desde el momento en que se anunció este proyecto de la planta de celulosa, que implica una inversión de 1.200 millones de dólares, una inversión enorme, ustedes enfatizaron fuertemente lo que implicaba desde el punto de vista del trabajo. Y ahora desde los sindicatos surge la preocupación de si efectivamente esos puestos de trabajo van a ser para uruguayos o se corre el riesgo de que se termine contratando afuera, por ejemplo en Brasil. ¿Qué han respondido ustedes?

CF - No, ante ese lógico temor la empresa está respondiendo en la mejor de las condiciones, que es el máximo de trabajo a los uruguayos. Algo hemos hablado y ha estado en los diálogos con el PIT-CNT durante tiempo, en un buen diálogo desarrollado como debemos entendernos.

EC - Ah, estos contactos no son nuevos.

CF - No, el proyecto cuando llega es demasiado grande como para no tener contacto con toda la gente, con todos los decisores del país, sean sociales, sindicales o políticos. En esa forma de informar que tuvo el proyecto siempre se habló de los puestos generados. En este caso hay una empresa que si bien está en Uruguay es de origen brasileño en la parte de excavaciones, pero hay empresas uruguayas subcontratadas. Lo que se va a hacer será acordar algunos cargos que se van a ser necesarios, no en la operación, la operación de la planta es un tema de entrenamiento y va a ser operada por uruguayos, pero en la fase de construcción va a haber algunas especializaciones que probablemente tengan que venir de afuera, más que en nada en el caso de estructuras y la parte metalmecánica y soldaduras, por el alto nivel de exigencia de la planta que los contratistas, las empresas proveedoras, se van a sumar a eso y van a ser fuertemente exigidas en su nivel de calidad.

EC - ¿Qué porcentaje del empleo terminaría entonces recayendo en gente de afuera? El PIT-CNT dice que el 99 por ciento tiene que ser nacional.

CF - Eso es un deseo, pero va a ser un porcentaje alto. No lo sé, estamos elaborando primero las necesidades de gente que vamos a tener para cada etapa con nuestros ingenieros, las distintas especializaciones, los distintos contratos que van ingresando y así ir armándonos. Por otro lado, abrimos un registro en Fray Bentos y ya tenemos más de 1.600 solicitudes o registros de gente que se empieza a inscribir, más unos registros muy importantes que tiene el PIT-CNT en Mercedes, que son unos 1.800 más.

EC - ¿Cuántas personas van a trabajar en la etapa de la construcción?

CF - En los puntos máximos estamos hablando de hasta casi 4.500 personas. Eso va a ser el año que viene.

EC - Abdala, sobre estas aclaraciones que hacía el ingeniero Faroppa en cuanto a que determinados puestos técnicos de especialización no pueden cubrirse dentro del país, ¿ustedes lo admiten?

MA - Nosotros consideramos que a los efectos de que haya el máximo porcentaje de mano de obra nacional implicado en la etapa de construcción lo que hay que hacer es organizar las condiciones sociales para que eso sea posible. Eso tiene que ver muy concretamente con lo siguiente: la empresa tiene que hacer transparente el listado de calificaciones necesarias en el proceso que va a irse desarrollando, tales calificaciones en la etapa de construcción, y deben desarrollarse dos cuestiones, la primera es un plan de formación profesional previo a la construcción de la planta que permita que todos los trabajadores que tengan cierta calificación para poder participar la eleven a los efectos de cubrir tales puestos de trabajo. Y la segunda es en el momento en que se está construyendo el montaje de una escuela de formación profesional que permita que los trabajadores vayan pudiendo acceder a las calificaciones necesarias a los efectos de que eso se desarrolle así. Eso no se hace espontáneamente, hay que hacer un plan concreto de formación profesional.

Lamentablemente en la ampliación y remodelación de la refinería no pudimos hacer esto, pero aspiramos a que efectivamente se comience a desarrollar desde ahora.

EC - Faroppa, ¿Botnia está dispuesta a cumplir con esas condiciones, o sea a facilitar la formación, etcétera, de modo que realmente lo que haya que contratar afuera sea lo mínimo?

CF - Sí, sí, eso le corresponde a la empresa como responsabilidad social. El problema es que la empresa tiene que llegar en tiempo, calidad y costos a la fecha de inauguración; ese es un parámetro. El siguiente parámetro es que por supuesto, considerando eso, ya estamos registrando gente, haciendo entrevistas profundas a cada persona, sus habilidades reales y teniendo una base de datos de qué gente tiene capacidades, qué gente no las tiene y hasta dónde puede llegar o qué cursos complementarios podemos hacer. Por supuesto que tenemos que implementar esos cursos lo antes posible, en el mes que viene empezarán los primeros, para a partir de ahí ir llenando las necesidades para las empresas contratistas –ahí hay un factor importante, que es que son empresas contratistas que trabajan para Botnia– e ir tratando con estos cursos de ir maximizando la participación de uruguayos y a partir de ahí y con esa lista de gente y de requerimientos ver cuáles son los lugares que quedarían sin completar y que requerirían gente experiente de otros lados.

EC - ¿Ustedes les van a imponer requisitos de este tipo a las empresas contratistas?

CF - De alguna forma sí, el máximo de competencia uruguaya sí; lo que no quiere decir que estén cien por ciento obligadas, si tienen compromisos de entrega y de calidad y no consiguen la gente, obviamente van a tener que responder con su gente, pero es parte de los requisitos.

EC - Y en el caso de esta empresa que está haciendo los trabajos de excavaciones, ¿efectivamente está empleando personal brasileño?

CF - En este momento hay todo personal uruguayo haciendo excavaciones. Lo que no quiere decir que en el futuro no tenga que traer una máquina y venga algún maquinista especializado para esa máquina en particular.

EC - Abdala, ¿ustedes van a seguir en este ritmo de reuniones por estos asuntos con la empresa?

MA - Sí, absolutamente, esto tiene que ver con que las necesidades de inversión del país, que son muchas, y su relación con la inversión extranjera directa estén absolutamente negociadas por parte del Estado y por parte de los sectores sociales, entre los cuales está el movimiento sindical, a los efectos de que los requerimiento al alza en condiciones de calidad, plazos de entrega y precios estén compartidos con un proceso de construcción, de saber hacer uruguayo, y compartidos con metas muy específicas de desarrollo local y nacional. De lo contrario toda la discusión que fundamenta por parte del Estado, por parte de todos los actores, la inversión, no estaría siendo cierta si efectivamente no se construye un esfuerzo a esos efectos. Esperamos que en todos los aspectos de la negociación esto sea tenido en cuenta.

EC - Cerramos con una última pregunta que viene de la audiencia. Rodolfo, de la Unión, entiende que no están dadas las condiciones para exigirle a una empresa que prepare gente para tareas relacionadas con la alta tecnología, "no va a andar gastando dinero en la preparación de un personal cuando ya hay eventualmente afuera personal capacitado, eso es inviable". ¿Ustedes lo ven como una imposición excesiva?

CF - Vamos a hacer los cursos de capacitación y cursos de nivelación. Lo primero que vamos a hacer son los cursos de nivelación para que los contratistas cuando ingresen tengan conozcan las capacidades de cada persona que ingresa. Si tenemos los cursos de nivelación, los siguientes son cursos de especialización. Si no se llega en las cantidades se contratará o traerá gente de afuera, pero haremos el máximo esfuerzo por entrenar a la gente de Uruguay, obviamente. Hay un tema de responsabilidad social y de impacto local, como decía Abdala, que queremos maximizar. Si no se llegara en los tiempos lo que importa es lo que residualmente queda para la persona que hace el curso: una capacitación adicional. Eso es lo importante en este tipo de cosas.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe