R&0 Básicos, un ejemplo de que "se puede"
A los 10 años comenzó a tejer buscando una manera de sobrevivir. Hoy es propietaria de una firma que, en el marco de Endeavor, se ha consolidado y que da trabajo directo a 34 personas y ve posibilidades concretas de exportar. Rosario Peña se define como una soñadora y afirma que su experiencia demuestra que en Uruguay "se puede".
(Emitido a las 10.05)
EMILIANO COTELO:
¿La Expo Prado es sólo un encuentro de grandes productores rurales, de cabañeros que vienen a competir por unas cucardas?
Está claro que no.
Y esperemos que, ya sobre el cierre de esta transmisión especial de EN PERSPECTIVA desde la Rural, eso esté un poco más claro aún.
Pero además, un encuentro de este tipo trae consigo la acumulación, la superposición de una cantidad enorme de historias de vida, algunas de ellas realmente sorprendentes y al mismo tiempo aleccionantes.
Hoy quisimos ocuparnos de, al menos, una de ellas.
Y para eso estamos ahora en el stand de ENDEAVOR, para dialogar con Rosario Peña, directora de "R&O BASICOS", un emprendimiento novedoso, exitoso, pero además muy marcado por la impronta personal de su responsable.
R&O BASICOS se dedica al diseño, producción y venta de ropa elaborada con tejido de punto.
Cuenta con dos stands propios en Expo-Ferias del Centro de Montevideo y un local de producción en la ciudad de Libertad, desde donde fabrica para otras empresas como Tienda Inglesa y GEANT.
Y estoy aquí para dialogar con Rosario Peña, directora de "R&O Básicos", un emprendimiento novedoso, exitoso, pero además muy marcado por la impronta personal de su responsable.
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Les cuento a los oyentes que cuando llegué aquí Rosario estaba sacando a la puerta del pabellón algunas de sus prendas. Ha colocado aquí un maniquí, medio maniquí.
ROSARIO PEÑA:
Sí, un maniquí, medio porque le faltan las piernas, pero luce bien.
EC Es una costumbre que están adoptando ustedes en estos últimos días de la muestra: no quedarse dentro de los stands.
RP Justamente, buscamos que el público pase y vea lo que hacemos, de esa forma tentamos al público a que entre. Y nos está saliendo muy bien el objetivo de esa técnica.
EC Me gustaría que tú me ayudaras a describir lo que estamos viendo. ¿Ante qué estamos? Un saquito...
RP Un suéter de hilo para la temporada de verano, muy finamente bordado, muy lindo, muy bien elaborado, en un color rosa, bordado al tono, y un palazo bordado haciendo juego.
EC Un palazo marrón bordado con flores en la parte interior de las piernas.
Tú eres de la zona de Libertad, departamento de San José, hoy tienes algo más de 40 años...
RP 42.
EC No tiene problema en decir la edad.
RP ¡Por favor!
EC - ¿Cuándo y por qué empezaste a tejer?
RP Empecé a tejer a los 11 años de edad, dada una situación familiar muy precaria. Les cuento la historia: yo soy la número diez de una familia de once hermanos, mi padre biológico había muerto cuando yo tenía un año y medio y a los 5 años fui dada en adopción. Una situación familiar con mucha carencia, mucha miseria, mucha pobreza. Y a los 5 años una señora que hoy es mi madre de adopción, mi madre en todos los aspectos, apareció y me dijo: "La vida no me dio hijos, yo quiero tener un hijo, vos estás necesitando una madre; ¿qué te parece si hacemos un convenio?".
EC - ¡¿Un convenio?!
RP Sí. "Si vos me querés decir mamá yo voy a ser tu madre para toda la vida", y le dije: "Sí, cómo no, acepto ya ahí entré a negociar, yo te digo mamá". Ésa fue mi gran elección, de esa manera ella me llevó, soy su hija de adopción, no tengo su apellido pero es mi madre de alma.
EC - ¿Cómo empezó a crecer eso del tejido?
RP Empezó porque ellos también eran gente muy humilde, vivían en el medio del campo y cuando yo tenía 10 años el esposo de ella, mi padre de adopción, se empezó a padecer una enfermedad terminal, muy dura, y éramos los tres solos. Estábamos en el medio del campo, en el medio de la nada, también con mucha miseria, segunda vez que golpeaba la miseria, y yo decía "tengo que hacer algo ella me había enseñado a tejer a mano y yo ya tenía espíritu vendedor, era muy inquieta, algo hay que hacer, hay que ganarse, y yo no quiero quedarme en el medio del campo". Me gusta mucho la vida de campo pero no era una forma de vivir, yo quería hacer algo, hacer algo por la vida, pero hacer algo por la vida era emprender algo. Y veía unas vecinas que tejía y dije "yo quiero aprender a tejer, si me enseñan aprendo".
De esa manera salí, cruzaba unos cuantos kilómetros a pie y me empezaron a enseñar. Surgió comprar una máquina de tejer con la venta de una desgranadora de maíz porque no había un mango, por supuesto; tampoco alcanzaba con la desgranadora de maíz, faltaba algo de dinero; pedimos apoyo a una parte de la familia y de esa manera vendí la desgranadora vieja y destartalada por 900 pesos para la máquina de tejer.
EC Y empezaste a vender algo.
RP Empecé a tejer, con esas vecinas empecé a trabajar, ellas me fueron perfeccionando en la materia y me dieron una mano tremenda; mi cuñada también me enseñó a tejer muchísimo, y ahí surgió.
EC - ¿A dónde iba a parar tu trabajo, a dónde iban a parar tus prendas?
RP A una exportación de una gente Lindsay, en Montevideo; iba a parar a Inglaterra, al Reino Unido.
EC A los 12 años, un año después de haber empezado, resolviste venirte a Montevideo con la idea de darle todo un giro al negocio. ¿Cuáles eran los problemas? ¿Por qué tuviste que tomar esa decisión?
RP Yo veía que era un poco esporádico el tema del tejido, que de repente se tejía sólo en invierno, en verano no, y se come durante todo el año, esa siempre fue de las cosas que me inquietaban mucho, entonces dije "me voy a largar a Montevideo a buscar trabajo". "Estás loca, cómo vas a ir a Montevideo si no conocés", me decía. "Yo me largo a Montevideo con la plata del pasaje de ida y vuelta y punto".
La primera vez ida y vuelta, era todo un sacrificio. Me largué y una de las anécdotas es que me perdí era un piojo, chiquitita, siempre fui bajita y en ese momento con 12 años no era muy alta que se diga en Colonia y Río Negro, a una cuadra de 18 de Julio, a una cuadra de la Galería de London. Mi objetivo era llegar a la Galería de London porque ella, mi mamá, había traído a su esposo al médico y había pasado por una galería y había preguntado si no necesitaban tejedoras. Y me dijo y por supuesto que se me abrió un camino para mí. Me presenté en ese lugar después de recorrer medio día buscando y empecé a trabajar con ellos.
EC - ¿Cómo fue? ¿Qué fue lo que te ofrecieron?
RP Nunca me voy a olvidar, me ofrecieron prendas muy elaboradas, todas tejidas con calado de hoja. Empecé a tejer con ellos y surgió un montón de cosas, después fui a otra gente, trabajé muchos años a façon, ellos me otorgaban el hilado, de esa manera yo cambiaba la mano de obra por dinero, y con el correr de los años ya empecé con mi propia venta.
EC Al comienzo el proyecto era algo básicamente artesanal. ¿Cuándo pudiste consolidarlo en una empresa propiamente dicha? Para empezar, ¿eso era un objetivo?
RP Sí, por supuesto, era un sueño muy guardado, que no se llegaba a visualizar pero estaba, salía, florecía. A los 16 años yo ya estaba dando trabajo a la gente, con 16 años no imponía respeto pero me lo ganaba, le daba trabajo a gente de 40 y 50 años. Llevaba trabajo para 100, 200 piezas semanales, lo repartía, enseñaba cómo se hacía y tenía una comisión de transacción. Ya llevaba trabajo para el campo.
EC Después de hacer un poco de historia y de repasar todos esos episodios de esa carrera. ¿Una carrera de cuántos años?
RP Ya perdí la cuenta, ya lleva 31, 32 años.
EC Vamos a ver la actualidad, vamos a tratar de situarnos en lo que es hoy R&O Básicos. Tienes dos locales propios...
RP En la Expo Roxlo, 18 de Julio y Roxlo, al fondo, locales 35 al 38, y en la Expo Yí los locales 2 y 3.
EC Además tienes un centro de producción en la ciudad de Libertad, donde fabrican... ¿para qué firmas, por ejemplo?
RP Le estamos trabajando al Géant, al Disco, estamos trabajando para el exterior, sacamos unas pequeñas exportaciones nuestro objetivo muy marcado es exportar y estamos trabajando para todo el interior.
EC - ¿Cuánta gente está trabajando hoy en R&O Básicos?
RP 34 personas.
EC - ¿Qué tipo de gente es la que empleas?
RP La mayoría mujeres jefas de familia y están trabajando cuatro hombres en la parte de tejeduría, mecánica y remallado. La mayoría son mujeres de todas las edades, oportunidades a todo el mundo.
EC - ¿En qué nivel se encuentra la producción? ¿Qué dato podemos dar a propósito del volumen que ha alcanzado ahora tu trabajo?
RP El volumen diario está entre 100 y 120 prendas. Por supuesto que hay que seguir con un trabajo siempre ascendente, se puede llegar a 150 o más. También les doy trabajo a grupos de mujeres de Canelones; subgrupos, por ejemplo hay una persona que dirige un grupo de 20 o 30 personas. Estoy volviendo a lo que hicieron por mí en su momento.
EC Vamos a movernos un poquito, vamos a entrar al pabellón, cuarto stand a mano derecha. ¿En qué se diferencian las prendas de R&O Básicos? ¿Dónde está su característica propia, dónde está su personalidad?
RP Se diferencian en primer lugar en que trabajamos todos los talles, de un talle 44 a un 56, no dejo a nadie afuera. Por ser gordita siempre me encontraba con faltante de talle, y me gusta que sea extenso el tema de poder ponerse una prenda y que no sea chica y quede embutida. Eso por un lado. Después los colores, una de las características nuestras es el diseño y otra los colores, nuestras prendas son muy coloridas y muy ponibles, una prenda para la mujer moderna, para estar coqueta para ir a trabajar, para todo. Que va a la lavadora, que no se friza. Son tejidos muy ponibles. Prendas bordadas, rayadas, con puntos, con diseños, con puntillas, ahora estamos trabajando mucho el calado para el hilo, con crochet en el trabajo artesanal de mano, que lleva mucha mano de obra. Se pone de todo un poquito con el sello de la distinción que podamos. El tema del diseño es algo que me nace un poco.
EC - ¿Cómo resuelves el tema del diseño?
RP Lo hago yo, es mío, netamente mío. Me apoyo mucho en desfiles, viajo al exterior, trabajo con folletos, veo mucho por Internet, y de ahí sale todo.
EC La variedad de prendas es enorme, veo gorros, bufandas... ¿Qué más?
RP Gorros, bufandas, pantalones, pareos, palazos, suéteres en toda su extensión, cárdigans, camperas, mixto, prendas de niño, hay una colección hermosa de niños con un colorido espectacular, las nenas están refelices porque se parecen a las madres cuando se visten y están recoquetas. Hemos ampliado un mercado que estaba un poco abandonado. A mi juego me han llamado, me encanta lo que hago.
EC Y este stand de R&O Básicos está en el pabellón de Endeavor en la Expo Prado. ¿Cuál fue tu relación con Endeavor? ¿Qué fue lo que te proveyó Endeavor?
RP Mi relación con Endeavor surgió a través de una amiga que ya estaba relacionada y me decía: "somos un grupo que estamos vinculándonos con Endeavor, Endeavor apoya al pequeño y mediano empresario, a los emprendedores que están luchando por salir adelante en este país tan castigado últimamente, creo que tú sos una emprendedora". "¿Te parece?" Nadie da nada a cambio, nadie apoya a gente que trabaja, era tan grande lo que me estaban dando que me parecía mentira. Me vinculé con Endeavor, no salí en la primera selección, salí en la segunda. Lo que me ha dando Endeavor es fabuloso.
EC - ¿Por ejemplo?
RP Nos han profesionalizado, nos dan pasantes, nos dan el lugar para esos eventos, tenemos reuniones mensuales o quincenales con técnicos en la materia, por supuesto; cada uno en su área, yo ahora estoy trabajando con una súper profesional en lo que es marketing. Te abre la cabeza, te ayuda a mejorar tu empresa, relacionamiento con el personal...
[Se interrumpe.]
EC Nos estabas contando cuál fue el aporte de Endeavor. Me pregunto por ejemplo: en la imagen de marca, ¿también han recibido asesoramiento?
RP Sí, por supuesto, [...] ahí lo ves, es mano de obra uruguaya, que es algo muy importante para resaltar. Mirá las fotos, ahí está el alma de mi taller, cada vez que lo veo lagrimeo un poco. Ha sido una mejora constante, lo de Endeavor ha sido fabuloso.
EC En cuanto a planes, ¿qué es lo que ustedes están proyectando? ¿Cómo viene R&O Básicos de aquí en adelante?
RP Con mucha fuerza, con muchas ganas de exportar, buscando mercados. Estamos reforzando el interior, estamos muy fuerte en los locales, la Expo Prado nos ha abierto unas puertas enormes, la gente nos conoce, nos felicita, nos sentimos muy orgullosos de lo que hacemos, nos sentimos respaldados, queremos que la gente vea que la mano de obra uruguaya es lo que va a sacar al país adelante, nos sentimos respaldados por Endeavor y por el grupo. El trabajo en grupo, estar todos juntos, decir no soy una soñadora, una loca sola que quiso crear y reformar el tejido. Somos un montón de emprendedores y soñadores que estamos sacando buena parte del país adelante.
EC Tú hablas de la posibilidad de exportar. ¿No te asusta eso? El problema del volumen, seguramente las exportaciones implican llegar a un nivel de producción, a una cantidad que no parece en principio fácil de alcanzar para un emprendimiento de estas características. ¿Cómo enfrentas ese detalle?
RP Hay un nicho de mercado, por ser tejidos artesanales se pueden trabajar pequeñas cantidades. Pequeñas cantidades, 500 o 1.000 prendas, que para mí no es algo inaccesible porque estoy trabajándoles a los grandes supermercados y he dado cumplimiento y ha sido muy bueno el relacionamiento con ellos. Hoy por hoy no apostamos tanto a las cantidades, porque las cantidades vienen de China con una calidad que no es la mejor. Apuntamos a la calidad, no tanto a la cantidad, a la calidad y al diseño, las cantidades no son tan importantes para nuestro mercado. Si Manos del Uruguay ha estado exportando, R&O también lo puede lograr, es uno de nuestros objetivos, lo he hablado con técnicos en la materia y creo firmemente que llegamos.
EC - ¿Pero la posibilidad está en el horizonte realmente?
RP Sí, sí, sí, por supuesto que está, estamos haciendo muy buenos contactos. Por supuesto que está.
Muchas gracias por la oportunidad de mostrar mi pequeño emprendimiento, que sin quererlo está llegando al corazón de mucha gente. Ese es nuestro objetivo, que la gente vea que puede creer, que los sueños se pueden hacer realidad, que está Endeavor para apoyar y que no dejamos a soñadores en el camino. Que podemos.
EC Se puede, ése es uno de los lemas de este programa Pequeña Empresa de Endeavor.
RP Claro que se puede.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe