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Botnia y Ence ante la posible intervención de la Corte Internacional de La Haya en el diferendo entre Uruguay y Argentina

Pese a que existe la certeza de que las plantas de Ence y Botnia cumplen con la reglamentación y, por tanto, no tendrían problemas en una demanda ante La Haya, la presentación de recurso ante ese tribunal por parte de Argentina, puede complicar o al menos demorar el financiamiento de las obras. En Perspectiva consultó a ambas empresas para evaluar cómo están siguiendo esta parte del problema.

(Emitido a las 8.30)

EMILIANO COTELO:
El Tribunal de La Haya se perfila de a poco como una espada de Damocles para las plantas de celulosa de Fray Bentos. En un principio, las autoridades uruguayas no se mostraron muy preocupadas – por lo menos no públicamente – ante la eventualidad de tener que enfrentar un juicio en este tribunal internacional.

Sin embargo, y más allá de que Uruguay tiene buenas chances de lograr un fallo favorable a sus intereses, surgen interrogantes sobre el impacto que esta denuncia podría llegar a tener sobre el avance de las obras de construcción.

JOSÉ IRAZABAL:
Sí, en un principio todas las opiniones que se han podido escuchar de este lado del río, coinciden en que, desde el punto de vista formal, en lo estrictamente jurídico, la presentación de la demanda no tiene carácter suspensorio sobre la construcción de las plantas.

EC - De todos modos, en caso de que finalmente se presente el recurso, la duda que aparece es: ¿se mantendrá el flujo de financiamiento para estas empresas? Recordemos que esos créditos dependen de decisiones – por ejemplo – de bancos privados...

JI - Claro, instituciones que no parece tan claro que vayan a estar dispuestas a seguir prestando dinero a proyectos que no se tiene la certeza si finalmente van a poder llevarse a cabo.

EC - Con esa inquietud – que además ha estado circulando como comentario en diversos ambientes últimamente – estuvimos trabajando para tratar de pasar en limpio este eventual frente de complicación, en un tema que cada vez tiene más ángulos.

JI - Simplemente, a modo de adelanto, te cuento: las firmas a cargo de estos proyectos reconocen que esa incertidumbre puede llegar a traer algún tipo de complicación. Además, es evidente  que la incidencia de este frente no es idéntica para Botnia y Ence, aunque ambas confían en poder mantener el ritmo de trabajo en caso de tener que hacer frente a esta eventualidad.

La primera reacción del gobierno

EC - Pero repasemos cómo se dieron las cosas en estas semanas.
En un principio, la amenaza lanzada por el gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, no generó mayor alarma en nuestro país. ¿Por qué? Bueno, de las distintas declaraciones que se pudieron escuchar se pueden inferir varios motivos: primero, la confianza inicial en que     el gobierno central argentino no apoyara la iniciativa de Busti; segundo, la esperanza de que el conflicto se solucionara antes, sin necesidad de llegar a ese extremo...

JI - También la convicción de que, en caso de tener que afrontar un pleito en La Haya, el gobierno uruguayo dispone de elementos para pensar que no hay forma de perder.

EC - Al mismo tiempo, se manejó el argumento de que se trata de un proceso jurídico con plazos muy largos, a lo que se suma la certeza de que la presentación del recurso ante Tribunal Internacional como el de La Haya no tiene efectos suspensorios sobre las obras.

¿Cuál era el razonamiento, según parece? Sencillo: "que presenten  lo que quieran, total, lo discutiremos vaya uno a saber por cuántos años; mientras tanto, las plantas, ya van a estar trabajando".

JI: Por lo menos, es lo que podía inferirse de las respuestas que daba el canciller Reinaldo Gargano, apenas conocida la amenaza, cuando lo entrevistamos en enero aquí EN PERSPECTIVA:

(Audio)

 
"REINALDO GARGANO:
Si la cancillería argentina quiere hacerlo, que lo haga. Ahí estaremos discutiendo 10 años el tema. Porque los pronunciamientos a veces son lentos. De todas maneras, no creo que se llegue a eso. No deseo que se llegue a eso".

(Fin del audio)

EC - Pero ya han pasado varias semanas desde que se escuchó por primera vez a Busti hablando de la Corte Internacional, y lo cierto es que La Haya se instaló en el horizonte de las plantas de celulosa.

JI - Ahí vamos al planteo del principio: si bien no necesariamente deberían surgir trabas jurídicas, aparece el tema del acceso al crédito.

EC – A nadie escapa que las empresas que tienen a su cargo la construcción de las plantas, concretamente Botnia y Ence, hacen una buena parte de estas inversiones en base a préstamos, no sólo  el tan publicitado de la Corporación Financiera Internacional, sino también otro tipo de financiamiento privado.

JI - Financiamiento que es aportado por instituciones bancarias privadas, que podría ocurrir que no estuvieran dispuestas a seguir prestando dinero a proyectos cuyo retorno no es seguro, en la medida que no hay certeza de que las plantas se terminen construyendo.

Botnia

EC -  Pero vayamos a los casos concretos, por ejemplo, cuál es la situación con el proyecto de Botnia...

JI - Sobre este tema consultamos al asesor de BOTNIA en Uruguay, ingeniero Carlos Faroppa, quien reconocía que la eventualidad de una denuncia ante La Haya – si bien es positiva porque permite encauzar un conflicto por una vía institucional, más civilizada que la actual – es cierto que constituye una fuente de incertidumbre que podría traer algún problema.

(Audio)

"CARLOS FAROPPA:
En la medida que sepamos cómo avanza esto, veremos como van reaccionando algunas fuentes de financiamiento nuestras. En principio, nuestro proyecto lleva el 60% de fondos propios y el 40% es a créditos. De repente, cambia en alguna forma esa proporción; si es que hubiera algún problema veremos alguna forma más propia de financiar. Si es que hubiera alguna incertidumbre en el financiamiento. No la creemos así, no la estamos viendo así, no ahora; de repente en algunos meses lo vemos de otra forma"

EC - Lo decía Faroppa, en el caso de la planta de Botnia – que requiere una inversión del orden de los 1.200 millones de dólares – hay un 40% (casi 500 millones) que depende de fondos externos a la empresa que provienen de un grupo de bancos liderado por el ING de Holanda cuya fluidez, teóricamente, podría ser afectada por este eventual foco de incertidumbre.

JI - De todos modos, Faroppa dejó claro también que BOTNIA tendría "resto" financiero para poner más fondos propios para cubrir un posible corte parcial o momentáneo en el financiamiento. Además, el proyecto de Botnia cuenta con la ventaja de que, como ya dijimos, el 60% del total de la inversión corresponde a fondos propios. Esto permitiría seguir avanzando con las obras durante algunos años, sin que una hipotética restricción en el crédito obligara a parar las obras.

EC - De todos modos, debe existir la convicción más absoluta de que las plantas efectivamente van a terminar operando sin problemas, porque de lo contrario no se explica que Botnia siga poniendo plata en un proyecto de dudosa ejecución.

Ence

EC - En el caso de Ence, la situación es un poco diferente. Si bien es un proyecto de menor porte (la inversión total es de 660 millones de dólares) la empresa española se maneja con una proporción más alta de financiamiento externo, es decir, financiamiento basado en préstamos bancarios.

JI - Si te parece, revisamos los números: de esos 660 millones de dólares, 200 son de aporte propio de ENCE, 60 corresponden a fondos de la Corporación Financiera Internacional del Banco Mundial y 400 millones dependen de créditos bancarios "sindicados", en los que el banco BBVA juega el rol de articulador, captando fondos de diferentes instituciones bancarias.

EC - Pasando a porcentajes: un 60% del financiamiento depende de bancos privados y sólo un 30% de aporte propio del Grupo Ence.

JI - De todos modos, fuentes de la empresa consultadas por EN PERSPECTIVA señalaron que al día de hoy no han sufrido ningún tipo de restricción financiera, aunque no llegaron a descartar un impacto negativo en caso que finalmente el tema llegue a La Haya.

EC - Sin embargo, esos informantes confirmaron que las obras van a continuar de cualquier modo.

JI - Señalaron que los accionistas de la empresa confían en que   en este proyecto de Fray Bentos se están haciendo las cosas bien, respetando todas las normas vigentes, por lo que no creen que haya riesgos de tener que enfrentarse a un fallo negativo.

EC - Además, según surge de nuestras consultas, hay un respaldo adicional: en noviembre del año pasado el Grupo Ence concretó una ampliación de su capital. Es decir, el grupo emitió nuevas acciones que permitieron que quienes ya eran accionistas aumentaran su aporte y que, al mismo tiempo, facilitaron el ingreso a nuevos capitalistas. Así, el grupo español mejoró su liquidez, y quedó en mejor posición para enfrentar posibles complicaciones de financiamiento.

JI - De hecho, por este mecanismo, el capital accionario del Grupo aumentó en 173 millones de euros, unos 210 millones de dólares.

EC - Es más. Según un comunicado oficial de la matriz del Grupo Ence, la decisión de ampliar el capital tuvo por objetivo "reforzar los recursos propios, dentro de un diseño financiero dirigido a soportar la estrategia en curso de consolidación y expansión de sus posiciones forestal y de generación eléctrica con biomasa y gas y, simultáneamente – y esta es la parte importante – la materialización de sus proyectos industriales y de valorización energética en Uruguay".

JI - Interesante eso de que el único país mencionado expresamente sea Uruguay.

EC - Sin duda, que es toda una señal.