Cepal llama a recuperar la universalidad y la solidaridad en los sistemas previsionales
Para la Cepal "es esencial" que los sistemas de protección social de América Latina recuperen o incorporen la universalidad y solidaridad. José Antonio Ocampo, secretario general adjunto de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales, llamó la atención respecto a que en muchos países sólo el 20% de población está incluido en esos sistemas. Ocampo también señaló que la recuperación económica que vive el subcontinente no tiene el ritmo que debiera por "el relativo atraso de los sectores con alto contenido tecnológico".
(Emitido a las 8.52)
EMILIANO COTELO:
Desde el lunes pasado el centro de Montevideo, concretamente el Radisson Victoria Plaza, ha estado colmado de economistas y sociólogos latinoamericanos. ¿Por qué? Porque en estos días Uruguay es sede del Trigésimo Primer Período de Sesiones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Estas reuniones, que se extenderán hasta mañana viernes, fueron inauguradas por el presidente Tabaré Vázquez y contaron, entre otros, con la presencia como oradora de la flamante presidenta de Chile, Michelle Bachelet.
¿Qué temas se están tratando?
Para acercarnos a esta cumbre, para saber cuáles han sido sus principales conclusiones hasta el momento, estamos en contacto con el colombiano José Antonio Ocampo, secretario general adjunto de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales. Desde ese cargo dirige el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU y preside el Comité Ejecutivo de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU.
Antes de asumir sus actuales funciones, Ocampo fue secretario ejecutivo de Cepal y desempeñó varios cargos en su país, incluyendo los de ministro de Hacienda y Crédito Público, director del Departamento Nacional de Planeación y ministro de Agricultura.
***
Doctor Ocampo, lo encontramos en el aeropuerto a punto de tomar el avión, ¿no?
JOSÉ ANTONIO OCAMPO:
Así es.
EC - Usted estuvo en Montevideo para asistir a este Trigésimo Primer Período de Sesiones de la Cepal. ¿Qué impresión se lleva de estas jornadas?
JAO - La Cepal ha hecho unos planteamientos muy importantes para todos los países de la región sobre el tema elegido para esta cumbre, que es la protección social en sus distintas dimensiones: programas de salud, programas de pensiones y programas de lucha contra la pobreza.
EC - Justamente, ¿en qué áreas se debe trabajar para conseguir una reforma eficiente del sistema de protección social?
JAO - Como le señalaba, están estas tres áreas que son las que ha elegido la Cepal. Tal vez podría agregar al menos una cuarta, que son los programas de seguro de desempleo, que en general están poco desarrollados en América Latina, hay varios ejemplos. Lo que plantea la Cepal es un mecanismo que permita ampliar sobre todo los servicios de salud y atención para que sean universales y solidarios.
EC - ¿Por qué eligen este tema para estas sesiones de Montevideo?
JAO - La Cepal elige cada dos años un tema especial y este un tema de inmensa actualidad, como se ha reflejado en la reunión.
EC - ¿Qué es lo que perciben que está pasando en América Latina en materia social?
JAO - En materia de protección social los sistemas en general tienen una cobertura muy escasa. Hay excepciones, Uruguay de hecho es uno de los países que tienen mayor cobertura en sus sistemas de protección social, pero en general en muchos países esos sistemas sólo abarcan un 20 o un 30 por ciento de la población, por lo tanto la manera de tratar de generalizar, de universalizar estos sistemas es importante.
EC - En el análisis que hace la Cepal, ¿hay una crítica implícita a los modelos que se han seguido en esta materia en las últimas décadas en el continente?
JAO - La Cepal plantea que los efectos de las reformas económicas sobre los mercados de trabajo han hecho más difícil la tarea, porque en la visión tradicional de la protección social el mercado de trabajo era el vínculo con la protección, cuando el trabajador ingresaba a sus labores tenía acceso a una seguridad social que le daba salud y pensiones en el futuro, pero ese vínculo ya no funciona muy bien debido al carácter precario e inestable de muchos de los trabajos.
EC - ¿Cuál es, entonces, el camino de la corrección? ¿Por dónde pasan los mecanismos que ahora hay que emplear?
JAO - Pasan en primer lugar por restablecer como principios básicos de la protección social la universalidad y la solidaridad. La solidaridad es muy importante porque en muchas de las reformas, especialmente las que se hicieron en Chile en el campo de la salud y de las pensiones, que han sido muy utilizadas, muy copiadas por otros países, esos principios desaparecieron totalmente del panorama y apenas están siendo reinsertados. Por lo tanto el restablecimiento de esos principios es esencial.
Y segundo, pasan por, como señala la CEPAL insistentemente en el documento, combinar sistemas contributivos, en los cuales los trabajadores contribuyen con una parte de su salario a la protección social, con sistemas no contributivos, donde el Estado a través de impuestos generales aporta especialmente para los trabajadores que no tienen acceso normal a la seguridad social.
EC - Usted decía que ese análisis está centrado en los sistemas de salud y en los sistemas de pensiones. Para aterrizarlo y para que el oyente entienda, detengámonos en los sistemas de pensiones, ¿en qué se traduciría el objetivo de universalidad que la Cepal entiende que hay que enfatizar y perseguir? ¿Qué cambios implica?
JAO - Implica que toda persona mayor de 65 años tenga una pensión del Estado, del sistema. Hoy en día en Uruguay debe haber un 20 por ciento de personas mayores que no tienen acceso a pensión, pero en muchos países es el 80 o el 90 por ciento que no tiene acceso a pensión, por lo tanto se trata de desarrollar unos sistemas públicos que permitan proteger a las personas de mayor edad. De hecho hay algunos ejemplos de esa naturaleza, los más conocidos son los sistemas de pensiones rurales de Brasil, que dan una pensión a todas las personas mayores, independientemente de si han contribuido o no al sistema, y el llamado Bonosol en Bolivia, que les da a todas las personas mayores de 65 años una pequeña pensión.
EC - Usted hablaba de la necesidad de que existan elementos no contributivos. ¿Podemos desarrollar esa parte de la idea?
JAO - En principio toda persona que es parte del sistema de seguridad social tiene que aportar una parte de su salario. En casi todos los países el sistema tiene un elemento que aporta el trabajador y otro que aporta el empleador, de esa forma se han diseñado tradicionalmente estos sistemas, esa es la parte contributiva. La parte no contributiva son impuestos generales.
EC - ¿Cuál es la evaluación que se hace de los sistemas de AFAP o similares, los sistemas de ahorro previsional individuales, en los que cada trabajador tiene una cuenta de ahorro individual? ¿Cuáles son los complementos necesarios?
JAO - Esos sistemas están establecidos en algunos países, a veces son el sistema único y otras veces son complementarios, hay una pensión básica del Estado y después esta pensión sobre la base de una capitalización individual.
EC - Ese es el caso de Uruguay, concretamente.
JAO - Exacto. Donde no existe el pilar básico hay una gran cantidad de personas que terminan sin una pensión, porque no llegan al número de semanas que tienen que cotizar para tener derecho a una pensión. Entonces ese sistema no alcanza para una parte importante de la población, que son generalmente personas que han tenido una vida laboral más recortada, inestable, y en el caso particular de las mujeres porque una parte importante ha salido de su vida laboral para actividades domésticas y por lo tanto no alcanzan a acumular la cantidad de semanas. Y en los países que tienen alto grado de informalidad laboral los trabajadores informales no cotizan al sistema, por tanto hay una parte importante de la población que queda marginada.
EC - Es necesario, entonces, que haya otro componente en el sistema de pensiones.
JAO - Exactamente, entonces habría un componente no contributivo, un aporte del Estado, seguramente mezclado con un aporte del trabajador, lo que le permita al trabajador acumular esos derechos. Y a las personas que han tenido una vida laboral recortada, les permite complementar sus cotizaciones con otras contribuciones.
EC - ¿Y cómo se resuelve el financiamiento de mecanismos complementarios, correctivos, como estos que Cepal está considerando y que entiende imprescindible establecer?
JAO - Tiene que ser con impuestos generales, entonces ahí la pregunta pasa a los sistemas tributarios y qué tan bien desarrollados están.
EC - Tradicionalmente cuando se ha tendido a hacer reformas que iban hacia la privatización de los sistemas, tanto de pensiones como de salud, uno de los argumentos centrales ha sido que los Estados no se encontraban en condiciones de soportar con sus propias finanzas el problema voluminoso que terminaban siendo tanto un servicio como el otro. ¿Entonces?
JAO - Todo el sistema tiene que ser viable financieramente, y un problema esencial que todavía mantienen los sistemas públicos existentes es que no son sostenibles financieramente, por lo tanto cualquier reforma, ya sea que el sistema se privatice o que no se privatice, diría que aun más importante cuando no se privatiza, implica ajustar los parámetros para que sea viable, para que las promesas que se le están haciendo a la gente de esas pensiones sean realidad y no que en el día de mañana, cuando llegue a los 65 años de edad, le digan: "Mire, lamentamos mucho decirle, pero el sistema no le puede pagar esa pensión", van a tener que ajustarse a los parámetros. Yo siempre he dicho que es mejor que la gente sepa cuál es la pensión que realmente va a tener, a que el día de mañana, cuando el sistema esté quebrado, le digan: "Mire, lamentamos mucho, su pensión va a ser mucho menor".
EC - Después de la crisis económica que golpeó a América Latina a finales de los noventa, la región parece estar levantando cabeza, los índices económicos muestran recuperación, un crecimiento significativo. ¿Cómo evalúa la CEPAL el desempeño en materia económica de los gobiernos, sobre todo de los gobiernos de izquierda que han ido extendiéndose en nuestro continente en los últimos años? ¿Qué opinión se tiene sobre los rumbos que se están siguiendo?
JAO - La coyuntura actual ha sido muy positiva por la combinación de buenos precios de materias primas y bajas tasas de interés, una combinación muy favorable en particular para América del Sur. Esa coyuntura ha sido en general bien utilizada, ha sido utilizada para crecer, pero al mismo tiempo para mantener unas financias públicas sanas, para reducir los niveles de endeudamiento, para acumular reservas internacionales. Todos esos son elementos positivos.
Yo le diría que de todas maneras hay por lo menos dos elementos negativos que vale la pena resaltar: el primero es la tendencia a la revaluación de las monedas, que reduce la competitividad de los sectores exportadores y la producción nacional, y por lo tanto utiliza en forma no necesariamente óptima los años de abundancia. Y el segundo es que las estructuras productivas de América Latina no parecen estar respondiendo con la agilidad necesaria.
América Latina ha estado creciendo a un ritmo de 4, 5 por ciento, algunos países más, básicamente porque han estado en un proceso rápido de recuperación, como Uruguay, Argentina y Venezuela, pero en la coyuntura actual América Latina debería estar creciendo 6, 7 por ciento, como crecía antes de la crisis de la deuda, por lo tanto hay algo insatisfactorio en el propio sistema productivo que tiene que ver con el estado de relativo atraso de los sectores más dinámicos, que son los sectores con alto contenido tecnológico.
EC - Relacionándolo con lo que conversábamos antes, ¿esto implica algún problema para la implementación de esos sistemas correctivos en materia de protección social que Cepal está impulsando?
JAO - Por supuesto, un mejor sistema de protección social se podrá obtener si existe una economía más sólida, por lo tanto si logramos crecer más rápidamente más fácil va a resultar la reestructuración de los sistemas de protección y más fácil será llegar rápidamente a todos, entre otras cosas porque las oportunidades de empleo van a mejorar considerablemente.
----------------
Edición: Mauricio Erramuspe