(Emitido a las 7.38)

Vea la entrevista con German Riet, director de Ancap

EMILIANO COTELO:
Tenemos nuevos precios de los combustibles, 3,6% es en promedio el incremento que rige desde la hora 0 de hoy.

Pero ese 3,6% es un promedio engañoso, porque por un lado algunos combustibles no subieron, como es el caso del supergás y el queroseno, y por otro lado el gasoil aumentó bastante más, 4,4%.

La nafta Premium queda en 35,70, la Súper 95 en 34,40, la Especial 87,33 y el gasoil 23,70 pesos.

En conferencia de prensa el presidente de Ancap, Daniel Martínez, explicó que este incremento de los combustibles llega como consecuencia directa del aumento del precio internacional del petróleo, que en los últimos días ha estado en el entorno de los 75 dólares por barril.

(Audio)

"DANIEL MARTÍNEZ:
Estamos hablando de cuatro dólares por barril por encima del valor fijado como referencia por nosotros, que era 71. Como ustedes saben, el crudo significa el 60% del precio final de los combustibles, lo hemos comentado más de una vez, y cuatro dólares el barril significa cuatro millones de dólares más que estamos pagando cada 25 días. Si bien no está reflejado en el aumento todo el impacto del aumento del precio del crudo porque nos ayudó el hecho de que estemos comprando el dólar entre 24 y 24,10 para pagar los embarques de crudo, no a 24,50 que es lo que teníamos como referencia y que se sigue manteniendo. Dio para achicar el aumento, no para evitarlo".

(Fin)

EC - El presidente de Ancap explicó también que el gasoil aumenta más que las naftas a causa de la diferencia en la carga tributaria entre esos combustibles.

(Audio)

"DM - Ancap aumentó el mismo porcentaje en todos los valores. Como siempre, el gasoil, tiene un aumento porcentual mayoritario porque tiene un Imesi muy bajo y la mayor parte del impuesto es IVA, entonces aumenta más que las naftas, por más que Ancap haya aumentado exactamente lo mismo la nafta que el gasoil."

(Fin.)

EC - ¿Qué repercusiones tiene esta nueva tarifa de los precios de los combustibles? ¿Cómo la ve el diputado Álvaro Delgado, de Correntada Wilsonista, Partido Nacional (PN), que hace pocos días le había presentado al ministro de Industria, Jorge Lepra, una propuesta para bajar el Imesi de las naftas como forma de lograr una rebaja significativa en el precio de ese combustible y alentar la suba de las ventas?

***

Diputado Delgado, ¿qué dice de este aumento de ayer?

ÁLVARO DELGADO:
Más allá de las cifras, no compartimos la filosofía del aumento.

EC - El precio del crudo es un dato determinante, se están dando incrementos muy fuertes a nivel internacional. ¿Entonces?

AD - La tendencia va a ser a seguir subiendo, lo dicen todos los análisis. Justamente por eso es oportuno empezar a discutir otras cosas que históricamente la izquierda propuso y que nosotros en particular en algunos aspectos compartimos. Por ejemplo, que no siempre la variable para fijar el precio del combustible sea el precio internacional del petróleo, si no Uruguay va a seguir en una escalada de suba de precios que no resiste más, es uno de los combustibles más caros del mundo.

EC - No se puede perder plata.

AD - Pero hay dos componentes más que no están en la discusión y que nosotros queremos proponer que se empiecen a discutir. En primer lugar los costos de Ancap, los costos internos, los costos de refinación y además los extracostos que el PN ha reclamando permanentemente que se bajen y que este directorio ha reconocido que no ha podido bajar: el impuesto a la compra de moneda extranjera, la tasa de inflamables a la Intendencia de Montevideo, hay un compromiso de incluirlo en el presupuesto municipal y no se baja, estamos hablando de 30 millones de dólares. Y además –es el tema de fondo– empezar a discutir el componente de impuestos a los combustibles, porque en ninguna de estas opciones está arriba de la mesa que el Estado baje su recaudación. Esa es la diferencia que tenemos con el gobierno. El gobierno trata de estimular el consumo de nafta castigando o desestimulando el consumo de gasoil aumentando los impuestos.

EC - Hay un problema con la demanda tan alta de gasoil y lo que produce la refinería –cualquier refinería, pero en particular la de Ancap– porque para cubrir la demanda de gasoil, por las proporciones de combustibles que salen de la refinación del petróleo, hay que producir demasiada nafta, mucha más que la que se consume, entonces hay que terminar exportándola a precios muy cuestionables.

AD - Están casi tres a uno los consumos de gasoil y de nafta, el mercado está absolutamente desvirtuado. Esto lo compartimos y compartimos el objetivo, no compartimos el instrumento.

EC - Ustedes comparten la idea de desalentar el consumo de gasoil o estimular el consumo de nafta.

AD - Estimular el consumo de nafta, no castigar a los que usan gasoil, que ya tienen un precio muy alto, y además es el combustible de la producción. Nosotros presentamos, con el aporte de técnicos de Correntada Wilsonista, un proyecto la semana pasada al ministro Lepra, sólidamente armado, compacto, con proyecciones de dos y tres años. Recordemos que más o menos el 50% del precio de las naftas es impuestos, y en el gasoil alrededor del 20%. Ese componente de impuestos que tienen los combustibles en Uruguay es lo que hay que empezar a discutir para empezar a bajar el precio, para bajar el consumo de gasoil y seguir asegurando recaudación.

EC - ¿Cuál es la propuesta?

AD - Tiene que ver con ir bajando el precio de las naftas a través de la baja del Imesi. Hoy el Imesi se reajusta sólo por IPC, entonces proponemos establecer una recaudación de referencia, porque como oposición no podemos hacer una propuesta de este tipo sin responsabilidad fiscal. La idea es asegurarle al Estado una recaudación por concepto de Imesi a los combustibles igual a la de 2005, que fue de 200 millones de dólares; la de 2003 fue de 150 millones de dólares, la de 2004 fue de 160.

EC - Asegurar esa recaudación por Imesi de combustibles.

AD - Asegurar esa recaudación de referencia y a partir de ahí ajustar cuando se reajuste el Imesi, por una fórmula vinculada con IPC y recaudación, que cuanto más se recaude proporcionalmente, la recaudación por encima de esa de referencia de 200 millones de dólares vaya directamente, proporcionalmente a bajar el Imesi de las naftas, para así poder bajar su precio al consumo.

EC - O sea, que Rentas Generales no se preocupe, va a seguir recaudando por Imesi de combustibles 200 millones de dólares. Pero cuando se produzcan los ajustes que hay que hacer por IPC se procurará que esa recaudación no suba y la diferencia se vuelque a bajar el Imesi sólo de las naftas.

AD - El de las naftas de cuyo precio es el gran componente, es el 50%. El Imesi del gasoil es muy pequeño. Para el gasoil tenemos una propuesta que tiene que ver con la reforma tributaria: transformar el Imesi en IVA para que las empresas que vayan a tributar IRAE puedan empezar a descontar el IVA al gasoil; de esa manera, entre otras cosas, se contribuye al formalismo.

Con respecto al Imesi de las naftas la propuesta vincula IPC con recaudación, si hay mayor recaudación por aumento del consumo, que eso vaya directamente a bajar el Imesi de las naftas para empezar una tendencia de baja rápida de los precios. Esto es una proyección a tres años. Va a cambiar rápidamente las tendencias de consumo.

En esta línea están las propuestas de los taxistas, que quieren cambiar su flota por vehículos a nafta. En la medida que cambie la filosofía de ajuste de precios, que a partir de ahora se tengan en cuenta también los impuestos de las naftas para poder bajar su precio.

EC - Si entiendo bien, esta propuesta no habría podido tener impacto en este ajuste de precios.

AD - La idea era amortiguar el incremento de los combustibles a partir del incremento del precio internacional del petróleo, porque si no el ajuste es siempre el mismo, lo pagan la población y la producción, y sigue creciendo. Si esa es la filosofía, seguir aumentando cada vez que suba el petróleo, si no nos ponemos ingeniosos y buscamos alternativas para fijar el precio de los combustibles, sin discutir los impuestos que tienen, Uruguay va a ser inviable desde el punto de vista del uso de combustibles porque son carísimos.

El ministro Lepra vio nuestra propuesta, le pareció interesante, técnicamente sólida, se comprometió a estudiarla, y sé que por ahí ha comentado que la quiere manejar. Vamos a insistir en ella, porque a partir de ahora tenemos que cambiar el eje de la discusión, no es sólo el precio del petróleo, es el impuesto a los combustibles, y por esta vía empezar a bajar algunos de los combustibles, estimular su consumo, y en la medida que estimulemos el consumo de nafta bajándola, vamos a seguir recaudando, las proyecciones son muy claras en ese sentido.

EC - Usted decía que tiene un estudio hecho a tres años. ¿Qué impacto puede tener una medida como la que usted propone en ese período?

AD - La idea es que en un año se pueda bajar entre 8% y 10% el precio en surtidor de las naftas.

EC - ¿Y qué está suponiendo usted que ocurre en ese período con el precio del petróleo?

AD - Una baja de entre 8% y 10% si se mantienen las mismas tendencias de consumo que se están dando en el primer semestre de 2006. Esto permite trabajar no sólo para estimular el consumo de nafta, para cambiar las tendencias de consumo, para empezar a cambiar flotas, para cambiar la ecuación de uso de combustibles en Uruguay que está bastante distorsionada, sino también empezar a trabajar el otro precio, que es el debe de Uruguay, el del combustible de la producción típico, que es el gasoil, que de por sí está muy caro.

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Edición: Mauricio Erramuspe