Análisis Económico

El comportamiento de la industria manufacturera en 2006

Análisis del economista Pablo Rosselli, de Tea Deloitte.

(Emitido a las 8.25)

EMILIANO COTELO:
De acuerdo a las cifras que divulgó el Instituto Nacional de Estadística el lunes, la industria manufacturera terminó 2006 con una suba de 8,86%, en la comparación promedio de 2006 frente al promedio de 2005. Se trata de un crecimiento muy importante. Sin embargo, los datos de diciembre no fueron tan buenos. El INE informó un crecimiento de apenas 1,7% frente a diciembre de 2005.

Entonces, ¿cómo se deben interpretar esas cifras? Y en particular, ¿qué ocurrió en diciembre? ¿Las cifras de diciembre están indicando una pérdida de dinamismo del sector industrial? ¿Cómo son las perspectivas para este año? Enseguida, conversamos con el economista Pablo Rosselli, de Tea Deloitte.

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Pablo, para comenzar, ¿cuál es el balance que hacen del crecimiento de la producción industrial del año pasado?

PABLO ROSSELLI:
Sin dudas la industria mostró un desempeño muy favorable en el conjunto del año pasado. Tú adelantabas que en la comparación promedio anual, la producción industrial subió casi un 8,9%. Si se excluye la refinería de petróleo de ANCAP, la suba fue más pronunciada, fue de 10,9%.

De todas maneras, se advierte una desaceleración en relación a las subas observadas en los años previos, pero eso era enteramente previsible.

EC - ¿Podemos recordar cuánto había subido la industria en los años anteriores?

PR - Siempre considerando los datos del INE, en 2005 la industria sin refinería había crecido un 13,6% y en 2004 había subido un 21%. Por lo tanto, se está observando una desaceleración apreciable, pero que era previsible, porque las altas tasas de expansión registradas en los años anteriores estaban marcadas por los bajos niveles de partida derivados de la crisis de 2002.

Contemplando los niveles actuales de producción, tomando el promedio de 2006, la industria manufacturera acumuló una suba de casi 60% en relación a los mínimos de 2002 y alcanzó un máximo histórico, que es un 14% más alto que el pico observado en 1998, antes del comienzo de la recesión.


EC - ¿Cómo ha sido el desempeño por sectores dentro de la industria?

PR - En el conjunto de 2006 observamos una expansión bastante generalizada a nivel de las grandes divisiones que conforman la industria. Alimentos y Bebidas subió un 11,8% y explicó más de la mitad del incremento en la industria. Pero también tuvimos subas muy fuertes en la industria química, en maquinarias y equipos y en material de trasporte (por la expansión de la industria de autopartes).

EC - ¿Cuáles fueron los sectores de menor dinamismo?

PR - Hubo una contracción de 8% en los derivados del petróleo (esto es en la refinería de Ancap); la producción de tabaco cayó un 3,4% en una tendencia que se viene observando desde hace más de un año y una caída similar presentó la producción de la división Aparatos Eléctricos y de Óptica.

Por último, la división textil, vestimenta y cuero presentó una suba muy pequeña, de 0,8%, que se explica por dificultades importantes de competitividad de algunas ramas textiles, fundamentalmente en el sector de hilados y tejidos.

EC - Pablo, hasta aquí comentamos las cifras del conjunto de 2006, que marcan un panorama muy positivo. ¿Cómo interpretaron ustedes el dato puntual de diciembre? Te hago la pregunta porque una suba de solamente 1,7% frente a diciembre del año pasado marca una diferencia muy importante con el promedio anual. ¿Qué está pasando entonces? ¿Hay signos de que la industria está perdiendo dinamismo?

PR - A nuestro juicio, Emiliano, si bien es cierto que la comparación diciembre 2006 contra diciembre de 2005 mostró una suba muy pequeña de la producción industrial, en realidad estimamos que la industria continuará creciendo a tasas sensiblemente más altas que ese 1,7% anual.

EC - ¿Cómo llegan a esa conclusión?

PR - Hay varios factores a tener en cuenta. En primer lugar, hay que considerar que los datos mensuales de producción industrial tienen una volatilidad importante. En ese sentido, el dato de diciembre es particularmente bajo si se considera la comparación contra el mismo período del año pasado. La mitad de las ramas que conforman el índice de producción industrial mostraron una variación nula o negativa frente a diciembre de 2005. Pero a nuestro juicio, el dato de diciembre está afectado por esa volatilidad. Si se ajustan los datos para depurarlos de factores estacionales y de esa volatilidad mensual que se observa, la conclusión que sacamos nosotros es que en diciembre y en noviembre la industria mostró tendencialmente un buen desempeño en relación a los meses anteriores.

Más aún, si se sigue mirando las cifras depuradas de los factores estacionales y de la volatilidad mensual (que usualmente se denomina el componente tendencial o ciclo-tendencia), la conclusión que surge es que entre junio y octubre se había observado una desaceleración muy significativa, mientras que, como decía recién, las cifras de noviembre y diciembre lucen mejores.

EC - Entonces, ¿cuál es la síntesis? ¿Se está desacelerando la industria?

PR - La industria se está desacelerando, pero dentro de lo que a nuestro juicio era previsible. Por esa razón, a partir del cierre de producción industrial del INE para 2006 no vemos necesidad de corregir nuestra estimación de crecimiento del PBI de 2006. En marzo tendremos las cifras oficiales, que esperamos den cuenta de una suba del PBI del orden de 7%.

Teniendo en cuenta que el contexto internacional y regional seguiría siendo favorable, a pesar de que la comparación contra diciembre del año pasado muestra esa suba muy baja, de 1,7%, nosotros estimamos que la producción industrial mostrará en 2007 tasas de crecimiento más importantes, probablemente mayores al 4% anual.

EC - ¿Y cuáles serían las ramas más dinámicas este año?

PR - En principio pensamos que veremos un crecimiento bastante generalizado. Las industrias exportadoras en general presentarán nuevos récord en términos históricos pero deberíamos ver también un dinamismo importante de las industrias más volcadas al mercado interno, que todavía no han alcanzado los niveles de producción previos a la crisis del 2002.