El auge del precio de las materias prima
Análisis del economista Pablo Rosselli, de Tea Deloitte.
(Emitido a las 8.26)
ANDRES GIL:
Como ustedes saben, la economía uruguaya es muy dependiente de la evolución de los precios internacionales de la materias primas, porque en las materias primas agropecuarias se concentran una buena parte de nuestras exportaciones.
En ese sentido, el 2006 terminó en forma alentadora para nuestro país y los primeros números de 2007 también están mostrando tendencias positivas. ¿Cómo han evolucionado los precios de las materias primas más relevantes para nuestro país? ¿Cómo se explica la fortaleza de los commodities? ¿Cuáles son las perspectivas para este año? ¿Estamos ante un auge cíclico de los commodities o estamos ante un cambio estructural que hace que debamos pensar en altos precios de las materias primas por mucho tiempo?
Enseguida, el diálogo es con el economista Pablo Rosselli, de Tea Deloitte.
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Pablo, podríamos comenzar con algunas cifras claves, para situar a los oyentes en el contexto.
PABLO ROSSELLI:
Me parece bien, Andrés. Tú decías que el año pasado terminó en forma alentadora. Ya vamos a comentar tendencias particulares de varios rubros pero para manejar un número de resumen podemos decir que el índice de precios de las materias primas que elabora la revista The Economist cerró 2006 con una suba de 30% medido en dólares. Las materias primas alimenticias subieron un 20% y los metales aumentaron en promedio un 55%.
En lo que va de 2007, se siguen observando tendencias favorables. Si bien el índice total de The Economist registró un descenso leve, de 1%, los alimentos y las materias primas industriales de origen agropecuario mostraron nuevas subas de 3% y 12%.
AG - ¿Y desde cuándo se observa una tenencia creciente de los precios de las materias primas? Si recuerdo bien, la tendencia alcista no empezó el año pasado.
PR - Es cierto, Andrés. Aunque los precios de los commodities suelen mostrar cierta volatilidad, desde 2002 se observa una tendencia marcadamente alcista de los precios de los commodities en los mercados internacionales.
Hay que recordar que en 2002 los precios de los commodities se encontraban en niveles muy reducidos en términos históricos. Pero desde entonces la tendencia ha sido fuertemente alcista. El índice general de The Economist acumuló una suba de 100% en la comparación de los niveles actuales con los prevalecientes a inicios de 2002. Los alimentos, por su parte, subieron más de 60%.
AG - ¿Y cómo ha sido la evolución de los precios más relevantes para nuestro país? Estoy pensando, por ejemplo, en la carne, los lácteos, la lana, el arroz, la soja.
PR - En general la tendencia ha sido marcadamente alcista. En el caso de la carne hay variaciones muy significativas de un mercado a otro en función de temas sanitarios y de barreras al comercio. Pero para poner un ejemplo, los precios de la carne en Australia, un exportador relevante en el mercado mundial, subieron 5% el año pasado y 20% frente a inicios de 2002.
Los precios de la leche en polvo entera en los mercados europeos subieron más de 35% el año pasado y siguieron aumentando un poco a principios de este año. Si comparamos contra 2002, la suba de precios es de 90%.
Los precios del arroz en los mercados de Asia subieron 12% el año pasado y más de 50% frente a los registros de 2002. La soja, por su parte, mostró una tendencia similar: subió 12% en 2006 y más de 50% frente a 2002.
Y la lana, que había permanecido bastante al margen de ese auge, en 2006 terminó con una suba de 35% en el mercado australiano.
AG - ¿Hay algún otro rubro relevante para mencionar, Pablo?
PR - En lo relativo a la agricultura, tenemos los precios del trigo, la cebada y el maíz. El trigo subió más de 35% el año pasado; la cebada aumentó 47% y el maíz más de 55%. La comparación contra 2002 muestra subas mayores a 70% en el trigo y el maíz y de 52% en la cebada. Y finalmente, podríamos mencionar también la evolución de los precios en el sector forestal. La celulosa subió más de 20% el año pasado y más de 50% frente a los registros de 2002. Y esos mayores precios de la celulosa también se trasladan a los precios de la madera en rolos, que en 2006 subieron también más de 20%.
AG - Este auge de los commodities es sumamente favorable para nuestro país. Entonces, ¿cómo se explica? ¿Estamos ante un fenómeno transitorio o debemos pensar en un cambio estructural que nos haga prever altos precios por varios años?
PR - Es difícil responder tu pregunta. Probablemente haya algunos factores estructurales o duraderos y sobre eso podemos hablar más adelante.
De todas maneras, a nuestro juicio hay que tener en cuenta que esta tendencia creciente en los precios de los commodities es coincidente con el dinamismo que está mostrando la economía mundial. Desde 2003 la economía mundial está creciendo a una tasa superior al promedio de los últimos 35 años. Quiere decir que la economía mundial se encuentra en una fase cíclica de fuerte expansión y eso influye en forma decisiva en los commodities.
Las perspectivas al menos para 2007 son de que la economía mundial continuará creciendo a una tasa muy importante, del orden de 4,9% anual, frente al 3,7% anual de los últimos 35 años. Si se cumple esa proyección, estaremos ante el ciclo económico mundial más fuerte y más prolongado de por lo menos los últimos 35 años. Pero más tarde o más temprano vendrá un debilitamiento de la economía mundial y, por lo tanto, también deberíamos prever cierto debilitamiento de los precios de los commodities.
AG - ¿No hay entonces variables estructurales? ¿Cómo incide, por ejemplo, el dinamismo de la economía China?
PR - Es pertinente tu planteo, Andrés. También hay una influencia de factores estructurales, más duraderos. Tú mencionabas el caso de China, sobre lo cual podemos hablar ahora pero también hay otros aspectos interesantes que abren lugar a cierto optimismo.
AG - Empecemos entonces en China. ¿Cuánto influye China en la suba de los commodities?
PR - China influye mucho. La economía de China está creciendo a razón de un 9% o 10% anual y no hay previsiones de un enlentecimiento significativo para los próximos años. Eso hace que China tenga un peso creciente en la economía mundial. A inicios de los 80 China representaba un 4% del PIB mundial; actualmente representa un 15%.
A su vez, ese país cuenta con un desarrollo industrial muy importante y eso determina que la expansión de la economía china impulse de forma fuerte la demanda de materias primas. China y otros países asiáticos (que también crecen fuertemente, como la India) consumen una fracción creciente de los metales que se producen en el mundo, del petróleo y de alimentos. Es posible, entonces, pensar en que el desarrollo de China y de otras economías asiáticas estará presionando en forma sistemática sobre los precios de algunas materias primas. Si pensamos en las materias primas agropecuarias, hay analistas que prevén una demanda muy sostenida de alimentos ricos en proteínas, lo cual daría sustento a precios altos de la carne, de los lácteos y de los oleaginosos.
AG Eso nos viene bien. Pero decías, Pablo, que hay otros factores que pueden ser estructurales.
PR - Sí, la suba de los precios del petróleo ha impulsado los precios de las materias primas agropecuarias que se pueden utilizar para la producción de biocombustibles. Así se explica, en parte, la suba fuerte que mostraron los precios internacionales del azúcar y del maíz, que reflejaron la posibilidad de producir etanol. Del mismo modo, se puede explicar parte de la suba de los oleaginosos, que podrían emplearse para la producción de biodiesel.
Otro aspecto que podría ser en alguna medida estructural tiene que ver con la reducción de los subsidios a la producción agropecuaria por parte de la Unión Europea.
AG - Entonces, Pablo, ¿cuál es la síntesis? ¿Los precios altos llegaron para quedarse o se trata de una suba cíclica?
PR - Es difícil delimitar en forma objetiva el peso de cada factor de los que estuvimos hablando recién. De todas maneras y sin desconocer que puede haber algunos factores estructurales que estén dando un impulso muy duradero a los precios de algunas materias primas, en principio pensamos que una parte importante de la suba de precios se asocia a una fase cíclica de la economía mundial. Es difícil pronosticar cuánto dura cada ciclo y es posible pensar que a instancias de las economías asiáticas, la economía mundial mostrará en el futuro más dinamismo que en los últimos 35 años. Pero la historia de los últimos cien años muestra que los precios de las materias primas siguen un patrón cíclico, acompañando los vaivenes de la economía mundial. Por esa razón pensamos que las perspectivas de corto plazo (2007 y quizás 2008) son muy favorables pero no deberíamos pensar que los altos precios actuales van a durar indefinidamente.