El jefe de producción de En Perspectiva, Andrés Gil, reporta desde Madrid.

Optimismo español sobre el futuro de América Latina

Invitado por el Grupo Santander, junto a otros 40 periodistas de Sudamérica, el jefe de producción de En Perspectiva, Andrés Gil, está en España para un ciclo de charlas sobre la realidad latinoamericana. Una realidad que se presenta de una manera muy optimista, según los primeros contactos con los responsables de esa institución financiera.

(Emitido a las 10.15)

EMILIANO COTELO:
Estamos en contacto con Andrés Gil, jefe de producción de En Perspectiva, que se nos fue de viaje ayer.

***

Andrés, ¿dónde estás?

ANDRÉS GIL:
Acá estoy, muy cerquita de Madrid. Escuchaba recién los 2ºC que tienen ahí por Montevideo. Aquí está soleado, cien por ciento despejado y la temperatura a esta hora es de 30ºC, aproximadamente.

EC - ¿Para qué te fuiste a España?

AG - En este momento me encuentran en la terraza del restaurante del Club de Golf de la ciudad financiera del Grupo Santander, un espacio increíble, ubicado a unos 15 kilómetros del centro financiero de Madrid.

Estoy invitado, junto con otros 40 periodistas de Argentina, Chile, Colombia, México, Brasil, al "6º Encuentro Santander-América Latina Universidad Internacional Menéndez Pelayo". Es un foro que se realiza cada año desde hace seis y que este año tiene como leit motiv "América Latina camino de una sociedad de clases medias". Se va a desarrollar en la ciudad de Santander los días 4, 5 y 6 de julio. Ahora estamos en una fase preparatoria, con algunas charlas, preparando los encuentros en los cuales van a participar distintas autoridades y personalidades.

EC - ¿Por ejemplo?

AG - La apertura del seminario estará a cargo de Enrique Iglesias, de la Secretaría General Iberoamericana, pero también van a estar Ricardo Lagos, el ex ministro de Economía de Brasil Antonio Pallocci, otras personalidades españolas, empresarios. Se van a organizar cinco mesas redondas de discusión sobre distintos temas vinculados con la relación América Latina-España, pero puntualmente sobre América Latina, el hoy del continente y las perspectivas.

EC - Me llamó la atención ese título, el tema general de estos debates, "América Latina camino de una sociedad de clases medias". Puede dar lugar a interpretaciones muy distintas, ¿tú ya tienes una bien clara sobre cuál es exactamente el foco?

AG - El marco analítico en el cual se va a desarrollar el seminario es esta visión de que pese a la normalidad democrática que rodeó todo el ciclo electoral de los últimos años, tan intenso, en América Latina, y pese a esta fase tan intensa de crecimiento, sumada a la estabilidad que América Latina ha logrado desde 2003, las señas de identidad con las que se puede asociar la imagen del continente siguen siendo la pobreza, la desigualdad en la distribución de la renta, la debilidad institucional. El objetivo de este encuentro es analizar si esta imagen de la región sigue siendo un fiel reflejo de la realidad y más en particular analizar desde distintos ángulos el significado que para el futuro de una región puede tener la aparición de una clase media emergente con comportamientos sociales, económicos y exigencias democráticas muy distintos de los que estuvieron pautando el pasado.

En ese sentido, si bien yo ya tenía hecha una composición de lugar, aterrizamos de lleno en las primeras horas de estadía en Madrid con una charla muy interesante que me dio una pauta a propósito de por dónde viene la cosa, este cuestionamiento a este estigma que sigue cargando América Latina.

EC - ¿Cómo dirías que es el clima que se respira en ese ambiente?

AG - Pensé que a esta hora iba a tener que imaginarlo, pero ya tengo una imagen muy clara, porque tuvimos en la mañana de hoy una charla con el economista José Juan Ruiz (foto), que es director de la División América del Área de Estrategia de Análisis del banco, que nos transmitió una visión brutalmente optimista respecto de la situación del continente y del futuro. Habló de un ataque frontal al pesimismo en América Latina.

De hecho lo plantea como una cuestión estratégica, dice que el cambio del estado de ánimo es la principal reforma que tiene que acometer la región hoy en día, citando las palabras de Francisco Luzón, que es el director general del banco. Luzón decía que en América Latina el fracaso tiene un enorme prestigio intelectual, que hoy en día a América Latina le está yendo bien y hay que decirlo, 18 millones de personas salieron de la pobreza en los últimos cuatro años, el PBI ha crecido a una tasa de 5% en los últimos cuatro años, con inflación contenida.

Realmente me impresionó la fuerza que le ponían al tema de la inflación. De hecho puntualmente decía que la inflación baja es algo que está marcando a la región y es la diferencia con otros procesos de crecimiento del continente. Puntualmente decía que esto que está pasando en América Latina no ha pasado en 25 años, que hay una generación entera de todo el continente que soñó y que no pudo ver lo que estamos viendo nosotros, un crecimiento de más de tres años, de cuatro o cinco, con tasas promedio de 3,5%, y al mismo tiempo con inflación en el entorno de 5% en todo el continente. Una cantidad de indicadores, baja de la pobreza, aumento de la renta per cápita, la importancia de que la región esté al borde como unidad del investment grade, lo que indica que es un modelo que se está comprando desde los tomadores de decisión en los mercados financieros. Y puntualmente también sorprendió el optimismo respecto de las perspectivas.

EC - ¿Cuáles son? ¿Cómo se las ve?

AG - Decían que no parece que esto vaya a cambiar en un escenario de corto plazo de 12, 18 meses, porque a la demanda interna, que ha sido el gran motor (y es un diferencial importantísimo que señalaban en este proceso de crecimiento), le queda mucho por crecer, la inversión tiene mucho más para seguir creciendo si se la compara con antecedentes históricos. En ese sentido señalaban que quizás las únicas sombras que aparecen en el escenario están por el lado del panorama político, aunque se destacó muchísimo las transiciones sin problemas, el hecho de que buena parte del continente haya elegido en elecciones democráticas y sin ningún tipo de nubes, sin ningún tipo de irregularidad, sus autoridades democráticas. Pero sobre todo puntualmente señalaban que en el plano político tiene que haber una agenda de consenso, como si el continente fuera una empresa, es imprescindible que sepamos los políticos y las sociedades hacia dónde queremos ir, estemos de acuerdo y nos pongamos a producir las reformas de fondo.

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Edición: Mauricio Erramuspe