Mario Saralegui: "Hay que prepararse para los hechos violentos porque la sociedad siempre fue violenta"
Mario Saralegui, exjugador y entrenador de fútbol, dialogó telefónicamente con La Tarde D10,y se refirió a los festejos de los 126 años de Peñarol, su salida de Liverpool, la selección nacional y la situación en el fútbol por los hechos de violencia.
El exfutbolista, psicólogo de profesión, comentó cómo vivió los festejos por los 126 años del Club Atlético Peñarol. "La ida al estadio Campeón del Siglo fue muy emotiva, el recibir los carnet vitalicios, nombrarnos socios honorarios y que nos cedieran un espacio en el palco para ver los partidos. Ese tipo de cosas nos levanta la autoestima, y nos hace sentir importantes. Fue bueno también el reencontrarse con varios amigos";, afirmó.
Consultado sobre cómo observa los hechos que suceden previos a las elecciones en Peñarol, expresó que se siente "muy cercano al delegado Jorge Barrera";, y que lo considera un amigo. "Es verdad que ocurrieron cosas, y seguramente él pensó en su momento que debería de haber un cambio en Peñarol. Tengo en claro que si existía ese cambio, el candidato para él era yo. Sobre detalles de su renuncia no tengo conocimiento";.
Acerca de su salida de Liverppol por una publicación que realizó en redes sociales sostuvo: "No tengo ningún problema con el Twitter, y es de uso cotidiano para mí. Sé lo que presupone, los riesgos y las cosas positivas y negativas que tiene. No me arrepiento de Twuitter porque es una herramienta que yo he usado reiteradamente para varias cosas. A la gente de Liverpool no le gustó, cada uno tiene su punto de vista y el presidente José Luis Palma reaccionó pidiéndome que deje el equipo y fue lo que pasó, no mucho más. Yo no puedo cambiar lo que pasó y no me puedo poner en la cabeza de los demás. Cada uno que piense como quiera. La relación con José Luis Palma es excelente, y quizás es mejor que cuando trabajaba con él. Para mí ese tuit fue más folklórico que violento";.
En línea con el mismo tema y sobre qué opina de Juan Pedro Damiani y su decisión de no postularse a candidato a los comicios, dijo que tiene un gran respeto por el dirigente, y que tiene con él una relación de casi 40 años. "Él me ayudó en momentos muy difíciles, pasé momentos complicados, incluso económicamente. Él me dio trabajo. Él por sobre todo y su familia quieren y aman a Peñarol, y nunca van a traicionar al club. Luego hay un montón de gente que hace su lucha electoral por llegar a la presidencia de Peñarol. Yo a los que conozco son a los Damiani. Personalmente no tengo quejas. Si me preguntas hoy, de los candidatos que hay, si estuviera Juan Pedro Damiani votaría a Damiani";, dijo.
Saralegui tuvo palabras además para la selección uruguaya y su entrenador, Óscar Washington Tabárez. "Creo que ha marcado una época histórica, porque por primera vez en mucho tiempo Uruguay puede formalizar un proceso de trabajo, que se dió en el tiempo con momentos muy difíciles en los cuales todos sabemos que Óscar Tabárez no salió de la selección porque lo mantuvo el gobierno. Eso lo sabemos todos. Ese proceso se mantuvo y ha sido exitoso. El proceso de Tabárez ha sido espectacular, y creo que lo que le falta es ganar la Copa del Mundo. Ha tenido un proyecto de trabajo donde ha cumplido lo que ha dicho";.
En un balance que hace sobre el fútbol actual y los hechos de violencia, el entrevistado expresó que en Uruguay las cosas van llegando más tarde y que cuesta adaptarse. "Esto es la ley del mercado, y el fútbol se ha transformado en un gran negocio más allá del color de las camisetas y del amor que siente la gente. Pero hay empresarios que más allá de todo ven el fútbol como una gran posibilidad de hacer dinero. Es la realidad de hoy en cuanto a la televisión. La aparición de Paco Casal marcó un antes y un después, solo que con el paso del tiempo se ha ido desvirtuando un poco y ha perdido la fuerza que tenía en su momento. No soy de los que critican a Francisco Casal ni mucho menos. Hay que prepararse para los hechos violentos porque la sociedad siempre fue violenta. Es difícil acá controlar la violencia sin la presencia policial";, concluyó.