El "Día de los difuntos" es considerado por la Unesco patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad, por todo lo que rodea a esta fecha en México, como fiesta tradicional.

En referencia a la celebración de su país, el embajador contó cómo es esa fiesta "alrededor de la muerte", donde cada comunidad tiene sus ritos en torno a ella. Agregó que la gente "canta, añora, recibe a los que se fueron, reza por sus almas, para que estén en paz. Hay una mística, un sincretismo, un sinergia, pero además es más que religioso, es prehispánico, donde no estaba el precepto moral, que luego vino con los católicos, de que el infierno era malo y que el que se portara mal se iba a achicharrar eternamente en el infierno".

Resaltó la tradición de algunas comunidades, como las de los estados de Campeche y Yucatán, donde las familias van los 2 de noviembre a los cementerios a limpiar los restos de sus ancestros. "Lavan los huesos y los vuelven a guardar en tumbas expresamente hechas para que con una llave puedan sacar los huesos cada año", comentó.

El próximo 12 de noviembre, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, viajará a México con la intención de mejorar el TLC que mantienen. Referido a esto, el entrevistado aseguró que el gobierno mexicano está "muy contento" de recibirlo. También expresó que es un negocio muy importante para ambos países, porque el tratado podría crecer un 50%, y alcanzar los 700 millones de dólares.

Sobre la violencia que vive el país norteamericano, el diplomático admitió que tienen "un problema severo", y opinó que se debe "al proceso que vivió Colombia, que México lo está replicando", pero aseguró que el estado mexicano "está reaccionando a tiempo y con la efectividad que le es dable ante un fenómeno que deviene de la delincuencia organizada, que va al mercado más grande de consumo del mundo, que es Estados Unidos".

"Las bandas de delincuencia organizada no solo operan en México, también operan en Estados Unidos, que son los que compran la droga, pagan con dólares en efectivo y armas, y que corrompen toda nuestra institucionalidad", añadió.

Por otro lado, Arroyo sostuvo que "de los 142 mayores capos, se encerraron prácticamente a 100, pero esto es una hiedra de mil cabezas, porque surgen nuevas cabecillas todo el tiempo".

"La corrupción del Estado está, pero para los mexicanos y el Estado es una lucha frontal. El México actual tiene dos retos fundamentales, que se tienen que atender, gane quien gane las próximas elecciones, que son el combate contra la corrupción y el tratar de reactivar el mercado interno, generando para los trabajadores mejor poder adquisitivo", añadió.

El embajador también se refirió al asesinato de 12 estudiantes en Ayotzinapa, sobre el que expresó: "el Estado de México y el gobierno somos los primeros interesados en que el asunto se esclarezca, pedir y exigir justicia. Por este asunto tenemos más de cien personas en la calle, pero el Estado, quizás por las destrezas de las bandas, no logra dar a las familias una explicación de qué pasó con sus hijos".

Consultados sobre los planes del presidente estadounidense Donald Trump, de construir un muro para delimitar el ingreso de mexicanos al país, Arroyo dijo que "de ninguna manera" México costeará el muro. "Lo vemos con ojos de cierta duda", enfatizó.

"No nos imaginamos a los Estados Unidos sin la mano de obra mexicana. La migración mexicana a Estados Unidos está en equilibrio. Están regresando los que se habían ido, porque los mexicanos no quieren ir a EE.UU para quedarse allá. Es una relación compleja, muy intensa y muy importante", remató.