La adicción a las drogas se reflejan en el rostro de Sheen

El estilo de vida de alto octanaje de Charlie Sheen está comenzando a pasarle factura. El actor de 46 años se veía devastado a su llegada para el juego de hockey entre los Kings de Los Ángeles y los Devils de Nueva Jersey, en el Staples Center.
A pesar de que cubrió su rostro con un par de gafas de sol y un sombrero de pico, igualmente no pudo ocultar que está muy demacrado en comparación con su aspecto de tan sólo dos años atrás. Su piel lucía con un aspecto envejecido.
Sheen se habrá puesto más viejo pero no perdió las mañas. El actor se enojó luego de que una guardia de seguridad no le permitió ingresar de nuevo al estadio, de donde se salió para fumar un cigarro en el entretiempo.
Esto provocó que el artista comenzara a gritar y a lanzar blasfemias, según el portal TMZ. Minutos más tarde llegaron amigos de Sheen para calmarlo.
"El Staples Center tiene una política de no dejar entrar a la gente una vez que sale. Charlie abandonó el estadio y luego quiso ingresar de manera abrupta", informó el vocero del estadio.
Charlie Sheen, hincha de Los Ángeles Kings, abandonó el lugar sin terminar de ver el juego y manifestando su molestia, ante la mirada atónita del público que se encontraba en el lugar.