El jugador del Barcelona que preocupa por su adicción a Periscope, la herramienta de Twitter que permite emitir videos en directo, es Gerard Piqué.

Recientemente, Piqué saludó a sus seguidores diciendo: "Ya sé que hace mucho ruido esto del Periscope y la gente está alborotada pero tranquilos, seguiremos haciéndolo sin problema. Un abrazo".

El mensaje intentó calmar a su entorno y, principalmente, al Barcelona. El equipo de fútbol en el que juega que teme que su nueva diversión aumente la polémica fama que lo acompaña desde hace años.

En un video filmado por el futbolista en el avión se ve el rechazo de Luis Suárez a las constantes grabaciones de su compañero de equipo. De hecho, Piqué dice con humor "Vamos a enfocar al gordo que no quiere salir".

Alfredo Di Stéfano, futbolista y entrenador argentino, dijo alguna vez: "El fútbol de verdad se acabó cuando entró el primer secador de pelo al vestuario", haciendo referencia a que las nuevas generaciones de futbolistas se preocupan de modo exagerado por su imagen y crecen junto a los medios de comunicación.

Con la aparición del Smartphone la situación planteada por Di Stéfano se profundizó aún más. El esposo de Shakira tiene más de 12 millones de seguidores en Twitter, 7,5 en Instagram y 19 millones en Facebook.

A su vez, al tiempo que Piqué prometió controlar el uso que realiza de Periscope, Mascherano ha sido otro de los que se mostró molesto por las veces que se ha exhibido de forma involuntaria su privacidad, culpa de la adicción que presenta su su compañero a la aplicación.