Aunque se encuentra felizmente casado con la diseñadora Astrid Klisans, con quien a finales de julio tuvo a su primogénito Markuss, el cantante Carlos Baute no ha dudado en hacer uso de su canal de YouTube para ofrecer una serie de peculiares consejos dirigidos a todas aquellas chicas que quieran disfrutar en el futuro de una vida sentimental tan satisfactoria como la suya, siendo dos de ellos la necesidad de no proyectar "tristeza" y hacer todo lo posible para desprenderse de la timidez.

"Los hombres nos fijamos mucho en la actitud. De nada te sirve estar con la mujer más guapa del mundo si está triste, si está depresiva, si es apagadita... Si es tímida y no tiene nada de lo que hablar, entonces no, esas mujeres no nos gustan, y menos aún si es una amargada. Las mujeres nos gustan divertidas, simpáticas, alegres, que tengan cosas que decir, eso resulta irresistible. Y sobre todo que no nos rezonguen, que no se acaben convirtiendo en máquinas de discutir", manifestó en un vídeo publicado en su espacio personal "El mundo de Baute";.

Otras de las recomendaciones que hace el conocido artista a su público femenino tienen que ver tanto con la salud bucodental como con el cuidado de los pies, aconsejando a las chicas que no saben "andar con tacones" que opten por un calzado más cómodo que les ayude a caminar "erguidas".

"La sonrisa puede ser una de las mejores armas que tienen las mujeres, ya que refleja felicidad, alegría, buena onda. Pero hay algunas que necesitan una buena limpieza. Si tienen mucho sarro... Bueno, si tienen solo un poco de sarro, como que no", explicó antes de entrar a valorar cómo deberían pasear las mujeres por la calle.

"Nos gusta que una mujer camine con decisión, y si va con tacones que lo haga con determinación. Si va desganada, sin equilibrio... para eso quítate los tacones y ponte zapatos planos. Lo importante es que camine erguida, que lo haga bien. El zapato también es importante, que sea acorde a cómo va vestida, armonioso. Pero sobre todo hay que cuidarse los dedos, quitarse los callos, que las uñas no sean muy largas y se le vean las grietas", aseveró.

A pesar de que el venezolano parece sentir cierta antipatía hacia aquellas mujeres que exhiben abiertamente los aspectos más vulnerables de su carácter, eso no le impidió convertirse en el principal apoyo de su mujer durante aquellos días en los que, como ella misma reveló, no podía dejar de llorar tras dar a luz a su primer hijo con el vocalista.

"Al tercer día de dar a luz, cuando aún estaba en el hospital, comencé a llorar desesperadamente. Pero no era un llanto de tristeza, sino de sentimientos acumulados. Veía su carita y lloraba, veía su ropita y lloraba también. Entraba el pediatra en la habitación, lloraba... Me sentía ridícula, pero simplemente no lo podía contener", aseguraba Astrid en su blog de la revista ¡Hola! "A veces, me despierto gritando a todo pulmón que no veo al bebé y que se me ha caído. Ahí es cuando mi marido da un salto para entender la situación y terminar explicándome que el bebé está durmiendo plácidamente en su moisés y que solo ha sido una alucinación", se sinceraba en el mismo artículo.

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