Gatto opinó que estos casos son difíciles que se den como productos surgidos del propio país, lo que sí es más común en Argentina, donde el sindicalismo está fuertemente vinculado a la corrupción. "Este es un sindicalista de un gremio pequeño, bastante ignorado, que hasta ahora no sabíamos quién era este señor, pero sorprende", añadió.

Por otro lado, el tertuliano dijo que "no debemos crear de fenómenos como este una especie de sociedad súper vigilante, que tiene que está al tanto de todo lo que hacen sus ciudadanos".

"Me da la sensación que vamos sobre hechos consumados, porque aparecen estas cosas, y resulta que hace tiempo están instaladas en el país, siguiendo procedimientos ilegales. Cuando comienzan a parecer casi de la nada estas casas y este despliegue de lujo, con veinte empleados en un lugar que es insignificante como tierra, ¿no implica que haya cierto trabajo de inteligencia frente a un extranjero que esté instalado en el país de esa manera? Esto parece ser un santuario, no sé si es el paraíso fiscal, pero da la impresión de que se viene trabajando. No es el primero que se ha refugiado aquí", apuntó Nieto.

"A la necesidad de conseguir capitales para que el país despegue, mejore mucho, no podemos acompañarla con una política displicente frente al tipo de turista que no viene con esas interacciones. Aquí la gente viene por la tranquilidad del país. Estas cosas son una mala señal. No es un turismo sano el que estamos propiciando", señaló el tertuliano.