(Emitido a las 8.35)

EMILIANO COTELO:
"El pueblo de Costa Rica ha dicho Sí al Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y ésa es para mí una voluntad sagrada". Con esas palabras, el presidente costarricense, Oscar Arias, anunciaba el triunfo del "Sí" en el referéndum celebrado el domingo 7.
Un referéndum muy particular. Se trata del primero en la historia de Costa Rica y tiene lugar después de más de tres años de discusiones sobre la conveniencia o no de ratificar un acuerdo con Estados Unidos.
Sobre esta consulta popular y sobre el futuro político de esta nación centroamericana a la que muchas se suele mirar como referencia, vamos a hablar en los próximos minutos con Elisa Lieber.

***

Elisa, según los resultados oficiales, los costarricenses aprobaron el TLC con Estados Unidos, aunque cabe aclarar que lo hicieron por un estrecho margen. Repasamos las cifras como punto de partida.

ELISA LIEBER:
Con 97% de las mesas escrutadas el Sí ganaba por 51,6% votos y el No tenía el 48,3% de los votos.

Las encuestas de opinión previas al referéndum auguraban un triunfo del No y el ánimo está muy caldeado. La oposición ya está exigiendo un recuento de los votos.

Como decíamos al principio, este referéndum tiene lugar después de más de tres años de duras discusiones.

EC - Recordemos que Costa Rica es el último país centroamericano que ratifica el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.

EL - Claro, está bien, hay que aclarar que la victoria del sí suponía la ratificación automática del DR-CAFTA o CAFTA-RD (como prefieran llamarlo)...

EC - ¿Qué es esto?

EL - El Tratado de Libre Comercio entre América Central, República Dominicana y Estados Unidos. Los países firmantes del DR-CAFTA fueron Estados Unidos, Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y República Dominicana.  Y, precisamente, Costa Rica era el único de ellos que no había ratificado el TLC, que ya había entrado en vigor en los países vecinos.

EC - Antes de seguir, me parece importante aclarar qué implica la aprobación de este referéndum a nivel comercial...

EL - Está bien... A grandes rasgos, por un lado, el 87% de los productos estadounidenses van a poder entrar a Costa Rica sin aranceles. El resto lo hará según plazos de desgravación arancelaria. Por otro lado, el 98% de los productos costarricenses van a poder ingresar a Estados Unidos libremente.

Es importante tener en cuenta que Costa Rica ya tenía una relación comercial muy fluida con Estados Unidos, el 40% de sus exportaciones van hacia ese país. Y cerca de dos terceras partes de la inversión extranjera en Costa Rica viene de Estados Unidos.

EC - La pregunta es por qué recién se aprueba ahora...

EL - Se trató de una discusión muy compleja con bandos muy marcados y muy parejos. Además, hay que tener en cuenta que hubo elecciones en el medio...

EC - En esas elecciones ganó Oscar Arias...

EL - En la campaña electoral que lo llevó a la presidencia el año pasado, Arias fue un firme defensor de la ratificación del TLC con Estados Unidos. De la otra acera, del lado de los detractores, estaba la izquierda tradicional, liderada por Ottón Solís, y –sobre todo- por los sindicatos del sector público. Lo que decían, lo que dicen, es que el cambio va a afectar el régimen de seguridad social, va a llevar a la privatización de las telecomunicaciones y seguros, y además va a encarecer los servicios públicos.

Pero, hay que tener en cuenta que esta discusión no se saldó con el referéndum. Todavía falta que el Parlamento vote un paquete de leyes de implementación del TLC.

EC - ¿A qué te referís con "leyes de implementación" del TLC?

EL - El Parlamento todavía tiene que aprobar un paquete de leyes imprescindibles para la implementación del TLC, entre ellas la apertura de monopolios como telecomunicaciones y seguros

Se trata de 12 leyes o tratados que Costa Rica tiene que aprobar para adaptar la legislación costarricense a las exigencias del TLC. Algunas ya están listas para ser votadas, pero la mayoría se encuentra en debate en diferentes comisiones.
Todo este paquete tiene que estar aprobado antes del 1º de marzo, cuando expira el plazo para la firma del TLC con Estados Unidos.
EC - ¿Y qué posibilidades hay de que se logre votar este paquete antes del 1º de marzo teniendo en cuenta que las discusiones ya llevan tres años?
EL - Por lo pronto, el líder de la oposición, Solís, condicionó el apoyo de su partido a la aprobación de un paquete de leyes de "compensación" para beneficiar a agricultores, dar recursos para la pequeña y mediana empresa y para mejorar la educación.
Entre tanto, Arias sigue intentando convencer a los costarricenses de que el TLC es la mejor opción. Antes del referéndum había sido contundente. Les leo lo que dijo (a algunos les puede sonar conocido) Arias dijo que "el tren sólo pasa una vez. Les pido una vez más a los costarricenses sin ningún temor que tenemos que montarnos en ese tren, porque de lo contrario nos quedaremos en la estación y eso significa empobrecernos".
Y eso no fue todo. También puso en duda la gobernabilidad del país en un claro mensaje al Parlamento. Dijo y cito textualmente: "Tengo todavía dos años y medio para gobernar. El rechazo del TLC me va a hacer más difícil las cosas que estoy haciendo, pero no imposible".

EC - Y también hubo algunas presiones desde Estados Unidos. Hace unos días leía que la Casa Blanca advirtió que no estaba dispuesta a renegociar el pacto si era rechazado.
EL - Sí, y además insinuó que esa negativa haría imposible renovar las preferencias comerciales unilaterales de las que disfruta Costa Rica y que expiran en setiembre de 2008. De alguna forma: el mensaje de Arias y de Estados Unidos era "o se unen a nosotros o quedan aislados".
Porque además aquí hay un detalle: no sólo todos los vecinos son parte de este acuerdo con Estados Unidos...
Este acuerdo con Estados Unidos acerca la posibilidad de un trato comercial entre los países centroamericanos y la Unión Europea. La UE condicionó un acuerdo a la existencia de una unión aduanera en la región.

De todos modos, aunque algunos ya cantan victoria todavía queda una carrera contrarreloj en el Parlamento. Una carrera que ya dejó muchas cicatrices en la sociedad tica.

EC - Una carrera que, entre otras cosas, le costó su puesto al segundo vicepresidente del país, Kevin Casas Zamora, un delfín del presidente Arias, a quien entrevistamos En Perspectiva hace algunos meses a propósito del a firma de un TLC con Estados Unidos.

EL - Casas Zamora estuvo envuelto en una especie de "Watergate" y tuvo que renunciar al cargo. Se lo acusa de haber redactado un memorando muy polémico, junto a un diputado oficialista, en el que recomendaba impulsar una campaña de temor entre la población con el propósito de ganar adeptos al "SI".

El memorando fue filtrado hace unas semanas al semanario Universidad, y contenía "recomendaciones" al presidente, incluyendo la presión de alcaldes, amenazándolos con no girarles recursos financieros si no lograban un "SI" en sus comunidades. El caso está bajo investigación judicial.