Traicionado por sus propios aliados, el cabecilla de la principal guerrilla rebelde del Congo cayó gracias a una operación conjunta entre Ruanda y las tropas gubernamentales congoleñas.

El líder militar de la guerrilla rebelde más grande y poderosa de la República Democrática del Congo, fue capturado luego de perder el apoyo de las tropas de Ruanda, su principal aliado en la región, quien se uniera a las fuerzas gubernamentales del Congo. 

Nkunda fue capturado a las 22:30 del jueves mientras se fugaba a Uganda en busca de refugio ya que estaba enterado de la alianza en su contra.

La versión oficial de la fuerza conjunta afirma que "Nkunda ha sido un obstáculo para la paz y, principalmente, para esta nueva alianza en la zona, al negarse a apoyar al destacamento ruandés en el este del Congo".

El rebelde se enfrentará a fuertes cargos de crímenes contra la humanidad.

A mediados de noviembre del pasado año el gobierno ruandés declaró -en un cambio de operación- que trabajaría con los congoleños para acabar con los rebeldes hutus de la región.

Ahora, con la caída del líder tutsi congoleño, la nueva fuerza conjunta hace un llamamiento a los tres batallones de rebeldes de Nkunda para que se integren en las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo.