(Emitido a las 08.16)

EMILIANO COTELO:
Un comando de hombres armados con fusiles y lanzacohetes abrió fuego ayer contra edificios diplomáticos en Damasco, la capital Siria. La escasa información que ha llegado hasta el momento, bastante confusa por cierto, habla de un grupo de al menos siete hombres, de los cuales cuatro habrían muerto bajo fuego policial durante el ataque; también murieron un policía y una mujer que pasaba por el lugar del atentado, donde se encuentran, entre otros, un edificio que era utilizado hasta hace poco por la ONU, así como las embajadas de Gran Bretaña, Irán, Arabia Saudita y Canadá. ¿Quiénes perpetraron este ataque? ¿Qué fines perseguían?

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Estamos en comunicación con el periodista Mauricio Rabuffetti y, para variar, una vez más nos ocupamos de atentados.

MAURICIO RABUFFETTI:
Sí; ayer hablábamos de un denunciado intento fallido de atentado químico en Jordania y hoy tenemos que ocuparnos de esta situación en Siria. Como decía a fines del año pasado en una tertulia nuestro jefe de producción, Andrés Gil, "nos toca correr atrás de las bombas".

EC - Tú mencionabas el análisis de ayer sobre Jordania y es claro que hay muchas preguntas que van a repetirse en este caso. Pero lo primero es resumir lo que ocurrió. La información es confusa, las cifras sobre el número de atacantes y de muertos es muy distinta según las fuentes...

MR - Sí. No olvidemos que Siria vive en un marco de dictadura militar y por ende no se caracteriza precisamente por un manejo transparente de la información.

EC - De hecho buena parte de la información que manejan los medios de prensa internacionales presentes en Damasco, donde se produjo el ataque, proviene de testigos presenciales.

MR - Incluso la agencia oficial siria Sana primero dio la información de que varios de los atacantes habían muerto y luego, sin mediar explicación, anuló esos datos. Lo cierto es que, si se puede llamar así, el consenso de los medios informativos es de cuatro atacantes muertos, más un policía y una mujer que estaba en el lugar, producto de disparos cruzados entre la policía y los atacantes que huían después de disparar dos veces con un lanzacohetes a un edificio que hasta hace algún tiempo era sede de una misión de observación de las Naciones Unidas en Siria; se agregaría un atacante capturado e incluso, para añadir más a esta enorme maraña de datos que está llegando desde Siria, a última hora de ayer el diario francés Le Monde señalaba, de fuentes oficiales sirias, que el ataque habría incluido además cargas explosivas colocadas debajo de un vehículo.

EC - Con el correr de las horas seguramente se aclarará un poco el panorama, pero completo tu resumen diciendo que el ataque se produjo casi a las 20, hora local siria, en el barrio de Mazzeh, al oeste de Damasco. La pregunta es si puede inferirse ya, con la información que existe hasta este momento, alguna explicación sobre las motivaciones de este atentado.

MR - No, al menos no con certeza. De hecho aún no está claro si más allá de este edificio había otros blancos a los que este comando pretendía atacar. En esa zona, como tú señalabas al comienzo, hay varias residencias de diplomáticos y embajadas, como las de Irán, Canadá, Gran Bretaña y Arabia Saudita. La BBC destacaba ayer, citando a uno de sus lectores desde Siria, que se trata de una zona donde también viven muchos integrantes del partido Baas, que gobierna Siria desde 1973.

De todos modos, tenemos algunas piezas de un puzzle que nos permiten plantearnos preguntas. ¿Por qué un ataque en una zona diplomática en Siria?, ¿por qué un edificio que simbólicamente representa la presencia de las Naciones Unidas en Siria, aunque no estuviese ocupado? ¿El ataque apuntaba a ese edificio solamente, o había otros blancos, como podían ser las sedes diplomáticas? Y en ese caso, ¿a la sede de qué países? Todas estas preguntas, que se irán aclarando a medida que se conozca más información, van a permitir entender los móviles del ataque.

EC - Y quizá también, quién lo llevó a cabo...

MR - En este punto específicamente hay algo a destacar. Ayer, en declaraciones a CNN, el embajador de Siria en Washington, Imad Mustafá, decía que por supuesto su gobierno trata de descubrir a los autores de este ataque; y dijo algo más: "Hacemos lo que podemos contra la red Al Qaeda. Compartimos el mismo enemigo" con Estados Unidos.

EC - De alguna forma está insinuando que Al Qaeda podría estar detrás de estos ataques.

MR - Lo cual tiene cierto sentido; ubiquémonos en un plano de conjetura pura: tú ayer me preguntabas "por qué Jordania"...

EC - La pregunta se repite: ¿por qué Siria?

MR - Vayamos unos meses atrás, quizá un año atrás, cuando aquí mismo En Perspectiva nos ocupábamos de las advertencias de Estados Unidos a Siria, país al que acusaba de cobijar terroristas. Incluso se decía que quizá Siria podría seguir el destino de Irak, es decir ser invadido por Estados Unidos. Fue una versión que sonó fuerte en su momento, pero esa situación cambió y mucho. El presidente sirio, heredero del poder, Bachar el Assad, asumió una tesitura de poca confrontación con Estados Unidos que llevó a su gobierno a definir a Al Qaeda como un enemigo que, como señalaba el embajador sirio en Washington, comparte con Estados Unidos. La ecuación cerraría bastante bien: Siria se enfrenta a Al Qaeda, Al Qaeda ataca en Siria, en un barrio diplomático, donde viven además miembros del partido de gobierno sirio. Suena bastante tentador como conclusión, aunque por ahora es simplemente una hipótesis que puede avanzarse como explicación a partir de la insinuación que hizo el embajador sirio en Estados Unidos.

EC - Lo cierto es que, de confirmarse esta hipótesis que planteabas recién, estaríamos hablando de una red Al Qaeda sumamente activa en Medio Oriente y en todo el mundo árabe...

MR - Justamente a eso apuntaba cuando te propuse el título del espacio de hoy...

EC - "Crece el mapa de la violencia."

MR - Sí. En poco más de un año de trabajo que llevamos hemos dedicado una buena parte de los enfoques a analizar atentados, muchos de ellos en Medio Oriente y el mundo árabe. Sólo por poner algunos ejemplos en la región, recordemos Arabia Saudita en dos ocasiones, Estambul en Turquía, Casablanca en Marruecos, el intento en Jordania, ahora Siria. La lista es larga y podríamos sumar atentados en otros sitios, como Madrid en España o Bali en Indonesia. En todos los ejemplos que citaba, salvo el caso de Siria, que aún no está aclarado, aparece detrás una reivindicación o una pista clara que apunta hacia Al Qaeda. El mapa de la violencia sigue creciendo.

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Edición: Jorge García Ramón